Guillermo Rivera Flórez

Guillero Rivera Flórez, Veedor Distrital de Bogotá, es un ex congresista liberal del Putumayo conocido por haber apadrinado la Ley de Víctimas.

Es abogado de la Universidad Extenado, especialista en derecho administrativo e hizo una maestría en ciencia Política, economía y relaciones internacionales con un convenio de la academia diplomática de San Carlos y el Instituto de Estudios Políticos de París (Sciences Po).

Nació en Mocoa, en 1970, su padre era conservador y su madre liberal. Según contó el representante a La Silla, su madre Luz Ángela Flórez fue una dirigente que trabajó por la protección de los derechos humanos en su departamento, y por su influencia, Rivera terminó en la política.

Guillermo Rivera fue secretario de la gobernación de Putumayo en 1998, cuando fue elegido gobernador el liberal Jorge Devia Murcia. Cuatro años después se lanzó a la Cámara y desde entonces ha logrado reelegirse en tres ocasiones al Congreso como representante del departamento.

Rivera ha mantenido su fortín político en Putumayo no sólo porque el Partido Liberal es el más fuerte en el departamento, sino porque ha impulsado algunos proyectos en representación de su región desde el Congreso. Rivera promovió varios debates para mejorar las vías de comunicación del departamento, se ha opuesto a las fumigaciones de cultivos ilícitos y ha planteado alternativas para hacer menos costoso el precio del combustible en Putumayo.

Rivera logró pasar la ley 1408 que creo el banco genético para las víctimas de desaparición forzada, lo que permitió por ejemplo almacenar datos genéticos para ser contrastados con cadáveres encontrados en fosas comunes. Esta ley la objetó Álvaro Uribe, pero la Corte Constitucional la aprobó y fue sancionada.

También trabajó, junto con el senador Juan Fernando Cristo, para perfeccionar la ley de víctimas que hundió el gobierno y ser su vocero desde la Cámara de Representantes. Aunque fue derrotado por los representantes, Rivera espera que ahora el proyecto si pase porque tiene el aval de Juan Manuel Santos. Aún así, Rivera está encima del proyecto para que cumpla con todos los estándares nacionales y internacionales sobre reparación. Rivera es un abogado que se sabe al derecho y al revés la legislación internacional sobre justicia transicional, y que puede recitar las sentencias de la Corte Constitucional que reclaman al Estado los derechos de las víctimas.

Además de la ley de víctimas, Rivera espera que pase en segundo debate de la Cámara otro de sus proyectos, que crea la figura de la declaración de ausencia por desaparición forzada para que las familias de las víctimas de desaparición forzada puedan acceder a la asistencia humanitaria.

Rivera intentó dar el salto al Senado en las elecciones de 2014, con la reconocida líder de víctimas Carmen Palencia como fórmula a la Cámara en Antioquia pero se quemó con 42 mil votos (apenas un centenar menos que el último que sí quedó).

En agosto de 2014 Santos lo nombró consejero de derechos humanos, un cargo con el que trabajó de cerca con el 'ministro del posconflicto', el general Óscar Naranjo.

En abril de 2016 pasó a ser viceministro de participación política de Juan Fernando Cristo, como parte del remezón ministerial que hizo Santos para llevar a más figuras regionales a cargos directivos del ejecutivo.

En mayo de 2017, antes de que arrancara la inhabilidad para participar en las elecciones de 2018, Cristo renunció al cargo y Santos otorgó este ministerio a Rivera para dar continuidad a la gestión, convirtiéndose así en el primer Ministro de la historia de origen putumayense.

Una vez terminó la Presidencia de Santos en agosto de 2018 y Rivera salió del cargo, hizo parte del grupo de liberales que renunciaron a su partido por desacuerdos con el Presidente de los rojos, César Gaviria.

Rivera y Cristo fundaron un movimiento de liberales disidentes llamado En Marcha, con el que comenzaron a hacer política.

En Bogotá adhirieron en 2019 a la campaña de Claudia López a la Alcaldía, avalada por la Alianza Verde y el Polo Democrático. Cuando ella ganó, en su equipo de empalme lo puso a él al frente del sector de organismos de control; y una vez ella se posesionó lo nombró Veedor Distrital.