El partido no tendrá candidatos a alcaldías en Antioquia pero quiere meter en listas conjuntas a concejos y Asamblea.
Farc sí tendrá candidatos en la casa del No, pero en compañía
A dos semanas de que arranquen las inscripciones de candidatos para las elecciones de octubre, el partido Farc ya está decantando su plan para ganarse un lugar en Antioquia, donde la puede tener dura porque es el departamento de Álvaro Uribe y porque allí triunfó el No a los Acuerdos de La Habana en el plebiscito de 2016.
Estas elecciones son claves para Farc porque medirá por primera vez su fuerza electoral a nivel local, que ha sido su apuesta para ganar espacios políticos. Su apuesta pasa por hacer alianzas con partidos y movimientos alternativos, una ruta que empezaron a tomar desde comienzos de este año; y en el respaldo a candidatos a alcaldías que ya tengan aval.
Su fin al meterse bajo la sombrilla de las alianzas, es tener más chance de llegar al umbral. También, exponerse menos a que los maten, cuando tienen el antecedente de dos excombatientes asesinados en el municipio de Peque en plena campaña a Congreso, mientras hacían proselitismo político; y de los asesinatos a sus integrantes en todo el país desde que dejaron las armas.
La trocha que quieren abrir
Desde hace un mes, representantes de Farc se han estado reuniendo con el Polo Democrático, el Mais, la Unión Patriótica, Fuerza Ciudadana (del exalcalde de Santa Marta y ex precandidato presidencial Carlos Caicedo) y Colombia Humana, para ver cómo irse juntos para la Alcaldía y el Concejo de Medellín.
El propósito es definir, en las próximas dos semanas, un mecanismo para escoger un candidato a la Alcaldía, y armar una lista con candidatos de todos esos partidos y movimientos, y líderes otros grupos sociales que se quieran sumar, según nos contaron por aparte el candidato a la Alcaldía por el Mais, Jesús María Ramírez, y la aspirante al Concejo por la Colombia Humana, Elda Sorel Restrepo.
Luego de definir esos dos puntos, quieren revisar cómo irse también juntos a la Asamblea, y si pueden juntarse para tener un candidato a la Gobernación.
Farc no va a postular candidatos a la Alcaldía ni Gobernación porque creen que es prematuro y por la estigmatización, según nos dijo Jesús Arenas o 'Marcos Urbano', el consejero político del partido en el área metropolitana.
Pero sí tiene definidas las fichas con las que se va a jugar un puesto en el Concejo de Medellín y otro en la Asamblea, dentro de la lista de convergencia, nos aseguró Olmedo Ruiz, el representante a la Cámara del partido.
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Quieren llegar al Concejo con la excombatiente Fancy Orrego, quien ha sido vocera del partido en Antioquia y es miembro de la Dirección Nacional.
Orrego estuvo por más de 40 años en las filas de las Farc en Urabá, fue comandante del bloque Iván Ríos, que operaba en Antioquia, Córdoba y Chocó. Fue negociadora en La Habana y estuvo en el segundo renglón de la lista cerrada a la Cámara por Antioquia. -
Elmer Arrieta es el aspirante a la Asamblea: también fue candidato a la Cámara y es excomandante de la guerrilla.
Arrieta militó en la guerrilla por 26 años, y fue cabeza del frente 18 de las Farc, que controló las rutas de la coca en Ituango y el Nudo de Paramillo por muchos años, y que incluso hoy tiene una disidencia que opera de la mano de la del frente 36, de Briceño.
La idea de la coordinación electoral en Antioquia es participar solo en las zonas donde han tenido trabajo político que calculan en unos 20 a 25 municipios, una quinta parte de los que tiene el Departamento.
En los que Farc tiene más incidencia histórica, como Dabeiba, Anorí y Mutatá, buscan tener listas al Concejo en alianza con partidos como el Verde, el Polo y el Liberal, nos dijo el representante Olmedo Ruiz; en algunos, como Chigorodó, en Urabá, o en Ituango, la lista podría ser solo de Farc, nos dijo el consejero ‘Marcos Urbano’.
Aunque aclara que “estamos armando el paquete” y no hay nada definitivo.
Lo que sí tienen definido es que no tener candidatos propios a alcaldías, ni siquiera en esos municipios, “porque no tenemos las condiciones políticas ni de seguridad”, nos dijo Ruiz.
“Es mejor dejar pasar un tiempito, porque hay mucha estigmatización”, coincide Joverman Sánchez, ‘Rubén el Manteco’, exjefe del frente 58 que vive en el espacio territorial de Mutatá, en Urabá.
Por eso buscan alianzas con alternativos, como la de Putumayo, y luego salir a respaldar de frente candidatos con los que tengan afinidad programática. Pero no es seguro que ocurran esas alianzas a nivel regional, en parte porque en otros movimientos temen que el apoyo de la exguerrilla les quite votos.
El temor a la rosa de Farc
Aunque casi está cocinada la convergencia en Medellín con el Mais, el Polo, la Colombia Humana y la Unión Patriótica, tres integrantes de esos partidos nos dijeron por aparte que no todos están cómodos con incluir a Farc.
“La izquierda tiene como miedo de tener a Farc en las listas. Entre las discusiones está que en esas coaliciones esté o no el logo de Farc”, nos dijo la concejal del Polo, Luz María Múnera.
“Las mismas fuerzas de izquierda no querían que fuéramos visibles como partido”, dice el consejero de Farc ‘Marcos Urbano’, refiriéndose a las primeras reuniones “Solamente pedimos que como reincorporación política podamos personificar las vocería de Farc”.
Como lo planteó un militante de Farc que nos habló fuera de micrófonos hace unas semanas por no ser vocero oficial, “ en Antioquia Farc es el leproso con el que nadie se quiere juntar”.
Pese a eso el candidato del Polo a la Alcaldía, Víctor Correa, y la aspirante al Concejo, Elda Sorel Restrepo, coinciden por aparte en que lo más probable es que Farc quepa bajo la sombrilla alternativa en la ciudad, porque ha ayudado a construir el programa político de la convergencia.
También argumentan que incluirlos es políticamente coherente, pues han sido son defensores del Acuerdo de Paz.
“Hay sectores que creían que parte de la decisión de los acuerdos de La Habana es que hicieran su proceso de manera independiente. Pero defender la paz no es solo defender la JEP, sino a una fuerza que ya es política”, nos dijo la candidata Restrepo.
En el caso de la Asamblea y la Gobernación es menos claro que la convergencia alternativa cobije a Farc.
Por el lado de Colombia Humana, nos aseguraron dos fuentes por aparte que no es seguro que entre la exguerrilla en la alianza.
“En Antioquia venimos trabajando en la misma línea nacional, en donde no están las Farc”, nos dijo Luis Fernando Llinás, que gerenció la campaña presidencial de Petro en Antioquia y quiere ser candidato a la Asamblea.
Las razones, nos dijo Llinás, son las diferencias en lo electoral, en lo programático y en asuntos económicos y sociales. “Pienso que Farc no está leyendo la realidad política, sobre todo en el cambio generacional de sus líderes políticos”. Es decir, que lancen como candidatos a excomandantes militares, lo que tiene un innegable costo en uno de los departamentos más golpeados por el conflicto y más de derecha.
Pero Llinás precisó que “esto no quiere decir que con Farc no existan canales para apoyar temas departamentales en Antioquia y posiblemente se puedan construir en algunos municipios convergencias”, aclaró.
El representante a la Cámara del Polo Democrático, Jorge Gómez, nos contó por su parte que hasta ahora Farc no está en el radar de la alianza de alternativos para escoger candidato a gobernador, y que no hay planes de listas conjuntas para la Asamblea de Antioquia como quiere Farc para poder participar.
Así, en Antioquia y Medellín, Farc dependerá del espacio que le quieran abrir los movimientos alternativos. Queda ver si en los municipios donde fueron fuertes como guerrilla, el empujón de otros partidos los haga fuertes como políticos.