Luis Alfredo Ramos, el ex gobernador de Antioquia, dijo ayer en una tertulia conservadora en Medellín que solo pondría su nombre a consideración en las próximas elecciones si se acordaba la consulta popular como mecanismo para escoger el candidato del uribismo.
Ramos solo va de precandidato si hay consulta interna del Centro Democrático
Luis Alfredo Ramos, el ex gobernador de Antioquia, dijo ayer en una tertulia conservadora en Medellín que solo pondría su nombre a consideración en las próximas elecciones si se acordaba la consulta popular como mecanismo para escoger el candidato del uribismo.
Así se lo hizo saber a unos 40 dirigentes empresariales y políticos retirados del conservatismo que se reúnen con cierta frecuencia a hablar del país. Algunos de los que asistieron dijeron que le escribirían una carta al ex presidente Uribe insistiendo en esta forma de escoger a la persona que represente su ideología en una contienda presidencial.
El mecanismo de la consulta popular favorecería a Ramos puesto que de todos los precandidatos uribistas es el único que realmente se ha medido en las urnas. En el 2002 sacó la más alta votación al Senado con 230 mil votos. En 2007, con 836 mil votos, llegó a la gobernación por el Movimiento Alas Equipo Colombia, una alianza que se formó en 2006 entre el movimiento de Ramos y Alas, de origen liberal.
Ramos obtuvo no sólo el apoyo de los principales conservadores antioqueños sino también el del Partido de la U, Cambio Radical, Colombia Democrática, Convergencia Ciudadana y de algunos liberales. Entre sus apoyos también hubo nombres polémicos como el liberal César Pérez, condenado posteriormente por la masacre de Segovia, el polémico ex senador conservador Óscar Suárez Mira, hoy detenido por parapolítica, y otros políticos de su Equipo Colombia, que hoy también están investigados, como contó La Silla.
Mejor dicho, aunque Pacho Santos tiene una mayor popularidad en las encuestas, Ramos es el que más ha probado su habilidad de sacar votos. Además, tiene un equipo político propio que incluye a la senadora Liliana Rendón, y que se mvoería apra ponerle votos a su jefe.
Por ahora, el ex gobernador ya está armando su equipo de campaña, y hay unas 20 personas trabajando con él. Entre los más visibles hay varios técnicos como Andrés Julián Rendón, su secretario de Gobierno en la Gobernación; Cristina Moreno, su ex directora de Planeación; y Nicolás López, su secretario de Minas.
La estrategia de Ramos -si finalmente se lanza- es proyectarse y diferenciarse de Santos como alguien que sí ejecuta lo que promete y que tiene una trayectoria para probarlo. Sin embargo, primero tendrá que ganar el pulso interno con los otros precandidatos uribistas y convencerlos de la consulta interna.
Las otras alternativas que se discuten en el Movimiento son escoger el candidato por encuesta (ganaría Pacho Santos); por mayoría en una Convención en el Movimiento (que dependería de quién define quién pertenece al Centro Democrático); o a dedo de Uribe, como propone José Obdulio Gaviria, en cuyo caso Óscar Iván Zuluaga tendría más chance.