El Pacífico tiene el reto de hacerle frente a las economías ilícitas, sobre todo a los cultivos de coca que están presentes en el pacífico sur y en departamentos como Nariño y Cauca.
También es necesario hacerle frente a la minería ilegal de oro. La minería en el pacífico es una actividad de subsistencia ligada a las poblaciones afro, pero en él los últimos años, desde el 2012, hemos encontrado que la minería de enclave ilegal, como la hemos llamado, a aumentado. En el último censo de UNODC se habla de la existencia de casi noventa mil hectáreas con la huella de explotación de aluvión, que está asociada a contextos ilegales. Esa minería está presente sobre todo en el Chocó aunque también sabemos que en todos los departamentos del pacífico hay una huella minera importante: en el Valle está el caso de Farallones, y de Zaragoza cerca a Buenaventura. En Cauca tenemos problemáticas mineras muy profundas en la zona alta, en Suárez y en Buenos Aires, donde se hace minería criminal, pero también minería de subsistencia ligada a la presencia de consejos comunitarios. También hay un aumento importante en los municipios de Guapi y Timbiquí. Entonces creo que es un primer reto grande que tienen que afrontar el pacífico y creo que es muy importante hacerlo de la mano de la implantación de los Pdets y del Pnis, como una apuesta que se planteó desde los Acuerdos de Paz.
Y creo que ese es un segundo reto: qué está pasando con la implementación, sobre todo de los Pdets, y ponerle mucha atención a lo que está haciendo la implantación en un contexto de un proceso de recrudecimiento de la violencia. Creo que otro un aspecto a tener en consideración: vemos con preocupación el escalamiento de la violencia en los cuatro departamentos del pacífico a profe de la desmovilización de las farc, lo que ha pasado con las disidencias, con la cooptación de espacios por parte del ELN y de otros grupos y creo que es un tercer aspecto que tiene que afrontar la región.
Yo le pondría mucha atención a los procesos de formalización minera. Esta situación es muy preocupante en el pacífico, en general hay afectaciones muy profundas en cuencas como la del Río Quito y río timbiquí. Creo que eso tiene unos efectos muy importantes ambientales, sociales y económicos. La minería también es un combustible para la guerra y la minería crimnal ilegal está siendo manejada por acordes armados para poder financiarse, entonces creo que es un elemento importante que ayudaría a desescalar la guerra en la región, y una cosa que nos muestra este tema también es algo que no se ha podido subsanar en el pacífico y son las brechas tan profundas qué hay en la región. El pacífico siempre se ha visto como una despensa y en general creo que los modelos extractivistas han sido persistentes en la región.
Entonces también creo que hay que ponerle atención a lo que da el pacífico y a lo que recibe. Al ver los desempeños de la básica y de la media en estudiantes, hay resultados muy preocupantes para la región. Entonces hay que ver qué está pasando con las personas en los territorios y en las oportunidades de educación y de trabajo que las poblaciones de esta región pueden tener.
Al mirar las los resultados de las elecciones que acabamos de tener creo que puede haber un resultado interesante por ejemplo para el caso de Guapi o Buenaventura, que nos muestra cómo salen figuras inéditas que pueden contribuir a transformaciones de vida de la gente que está acá. Por ejemplo el caso de Buenaventura valdría la pena mirarlo con detenimiento. Entonces también hay un reto importante para los gobernantes que se posesionan pero también hay un reto muy importante que hay que hacer en granados al gobierno central y lo que puede pasar de cara a la implantación del acuerdo de paz.