Javier Soto Charry

Javier Soto Charry, actualmente candidato del Polo Democrático a la alcaldía de San Vicente del Caguán, es uno de los líderes del movimiento de zonas de reserva campesina y de Marcha Patriótica.

Nació en la vereda de Rovira, en la zona de Balsillas en San Vicente del Caguán (Caquetá), en una familia de colonos huilenses que llegaron al norte del Caquetá huyendo de la violencia.

Hizo una educación técnica en recursos naturales, trabajando tanto el Corpoamazonía -la corporación autónoma de la región amazónica- como en Invías, pero también como presidente de la junta de acción comunal de Rovira.

En los años noventa fue uno de los líderes que impulsó la creación de la zona de reserva campesina de  El Pato – Balsillas, que abarca 68 mil hectáreas de la cuenca del río Pato y el valle de Balsillas donde hoy viven unos 6 mil campesinos. Ese rincón del norte de San Vicente fue una de las pioneras de esa figura, que busca fomentar la economía campesina en el país.

En 2011, tras el primer encuentro de zonas de reserva campesina en Barrancabermeja, se revivió la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina (Anzorc), que había nacido a finales de los noventa pero que estaba inactiva.

Desde entonces Anzorc, que hoy agrupa a las seis zonas de reserva campesinas existentes y a las cinco que están en proceso, se ha convertido en el movimiento de los sectores campesinos identificados con la iniciativa. Su capacidad de movilización social se ha visto en los paros agrarios del 2013 y el que casi arranca en 2014.

Durante varios años Soto formó parte de la junta directiva de Anzorc, junto con César Jerez del Valle del Río Cimitarra, Juan Carlos Quintero del Catatumbo, Héctor Pinzón de El Retorno – Calamar y Ángel Torres de Lozada-Guayabero.

A finales de 2014 renunció a la junta para lanzarse como candidato del movimiento de ZRC y Marcha Patriótica -en alianza y con el aval del Polo- a la alcaldía de San Vicente, que el movimiento de ZRC ya había ganado en 2011 con Domingo Pérez Cuéllar.