Cartas de los congresistas al ‘Niño Santos’

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En una reelección presidencial tan apretada, definida en gran parte por el poder de la maquinaria en las regiones, cada voto contó y los congresistas que los movieron lo saben. Por eso los legisladores más votados, y por ende con más peso político, le madrugarán a diciembre con peticiones para el ‘Niño Santos’.

En una reelección presidencial tan apretada, definida en gran parte por el poder de la maquinaria en las regiones, cada voto contó y los congresistas que los movieron lo saben. Por eso los legisladores más votados, y por ende con más peso político, le madrugarán a diciembre con peticiones para el ‘Niño Santos’.

Cuatro fuentes conocedoras le dijeron a La Silla que no hubo compromisos concretos antes de elecciones con ningún congresista, que después de reelegido el Presidente ha hablado con algunos de ellos pero temas generales y que los cambios grandes comenzarán a verse después de su posesión el 7 de agosto.

Sin que signifique necesariamente que Santos los va a complacer en todo, averiguamos con personas que los conocen y en algunos casos con ellos mismos qué les interesa del Gobierno por estos días a los 15 senadores santistas con más de 85 mil votos y a los únicos dos representantes que alcanzaron más de 100 mil apoyos. Encontramos información de algunos. Estas son sus listas de regalo de antes de Navidad. Ya veremos cuáles de sus deseos serán concedidos.

Bernardo 'Ñoño' Elías

Como lo contó La Silla, el cordobés Bernardo ‘Ñoño’ Elías (uno de los dos senadores santistas más votados del país) quiere ser presidente del Congreso en tres años cuando esa dignidad le vuelva a tocar a su partido La U. Para ello necesita al Gobierno porque éste es un actor clave en la negociación de la coalición mayoritaria que define la conformación de las mesas directivas, tanto en las comisiones como en todo el Senado y la Cámara. Pero además, Ñoño estaría interesado en fortalecer su estructura política en Córdoba con los espacios que deje el también cordobés representante conservador David Barguil, para quien algunos en la Unidad Nacional están pidiendo un castigo en términos burocráticos por haber votado por el uribista Óscar Iván Zuluaga y no por Santos.
Aunque Barguil asegura que las cuotas que le endilgan no son suyas. Un congresista de la Unidad Nacional le dijo a La Silla que el Partido de La U, en donde es un peso pesado Ñoño Elías, aspira a que en sus manos quede uno de los tres ministerios (Hacienda, Agricultura y Ambiente) que tiene actualmente el Partido Conservador, debido a que éste no votó completamente por la reelección del Presidente.

José David Name

La tercera votación del Partido de La U en todo el país (103.215 votos) está reclamando su derecho a ser presidente del Congreso si el asunto lo determina, como a veces lo ha determinado, el número de apoyos.
El senador atlanticese José David Name anunció su aspiración a esa dignidad luego de que Ñoño Elías y Musa Besaile, los dos más votados de La U, declinaran. Compiten con Armando Benedetti y Mauricio Lizcano y es precisamente ahí en donde él espera la ayuda de Santos. Aunque en teoría la presidencia del Congreso es un asunto de la competencia de los congresistas, la realidad es que un guiño del Presidente hace toda la diferencia. Name, que se movió de manera clave para que Santos arrasara en el Atlántico, espera ese empujoncito no sólo del mandatario sino también de sus compañeros de bancada que el próximo 11 de julio elegirán su candidato.
“Santos ganó su presidencia en gran parte por la votación de la Costa Caribe y por eso la región merece tener por primera vez un presidente del Congreso oriundo de acá”, le dijo Name a La Silla. Cuando le dijimos que ese argumento también le sirve al barranquillero Benedetti, quien de hecho ya fue presidente del Congreso, el Senador respondió: “Bueno, lo que pasa es que Benedetti dice que es de la Costa cuando le conviene”. Name también espera que, en su segundo Gobierno, Santos garantice para la Costa la construcción de dos carreteras doble calzada: de Barranquilla a Santa Marta y de Barranquilla a Cartagena y que se defina la suerte del aeropuerto de la capital del Atlántico Ernesto Cortissoz que lleva dos años con su concesión vencida, en manos de la Aerocivil y sin inversiones. Name también es partidario de que a los conservadores se les quite el Ministerio de Agricultura para dárselo a La U.

José Alfredo Gnecco

La familia de este senador cesarense es una de las grandes ganadoras de las elecciones este año. En las legislativas logró subirlo a él de Cámara a Senado pasando de 16 mil a 97 mil votos en cuatro años y acuerdos con las cuatro cámaras del César. En las presidenciales barrieron con Santos en ese departamento y le ayudaron a sacar 100 mil votos más que en la primera vuelta. Todo eso, más tener la Gobernación en cabeza de Luis Alberto Monsalvo Gnecco, los ratifica como los más súper poderosos de su región.
Los Gnecco contaron con la buena estrella de que uno de sus principales rivales políticos, el liberal Pedro Muvdi que aspiraba a saltar también de la Cámara al Senado, fue capturado por presunta parapolítica en plena campaña. Precisamente, ellos aspiran ahora a engordar aún más sus estructuras políticas heredando las direcciones territoriales en el Cesar que, según fuentes que conocen la región, estaban en poder de Muvdi. Por ejemplo, la dirección regional de Invías que hoy está en cabeza de la cuota liberal Layonel Arenas y la oficina del Trabajo que dirige en el departamento Antonio Junieles. Dos fuentes confirmaron que ambos entes los maneja el movimiento de Muvdi y además así aparece en la denuncia uribista de la mermelada. Los Gnecco ya tienen el SENA, cuyo director regional es Orlando Saavedra, quien pasó de ser secretario departamental de Minas de la Gobernación de los Gnecco a ese cargo, y el DPS, entre otros entes territoriales.

Efraín Cepeda

El segundo senador más votado del Partido Conservador en todo el país (98.588 votos), hombre clave en el triunfo de Santos en el Atlántico, ha asumido la vocería de los congresistas azules que no votaron por el Presidente pero ahora quieren estar en su Unidad Nacional.
La semana pasada en la reunión que los godos santistas tuvieron con Santos para reclamar su parte en el triunfo de la reelección, Cepeda tomó la palabra para hablar de las bondades de que todo el partido unido pudiera entrar la coalición de Gobierno y mantener ahí su representación. Por eso él es el símbolo de los deseos de los conservadores: mantener los tres ministerios que tienen (Ambiente, Hacienda y Agricultura), la presidencia del Congreso en alguno de los próximos cuatro años e incluso una alta consejería o viceministerio.

Yamina Pestana

En Córdoba todo el mundo sabe que el principal interés de esta senadora primípara, que siendo una total desconocida en política sacó 85 mil votos, es la EPS que maneja su hermano, el indígena parapolítico Pedro Pestana, precisamente el negocio que soporta un movimiento político que tiene además tres alcaldes en Córdoba y una diputada en Sucre. Se trata de la EPS indígena Manexca, que opera en Córdoba y Sucre y tiene más de 200 mil afiliados, y es según varias fuentes de la región el proyecto que genera los recursos para financiar a sus políticos incluyendo a Yamina que sacó la quinta votación del Partido Conservador en el país.
Los Pestana, en cabeza de la senadora electa, adhirieron a Santos y hasta se tomaron foto con él y La Silla supo que están interesados en que el Presidente firme un decreto que les permita a las comunidades indígenas recibir los recursos del Estado para salud, educación, agua y saneamiento básico directamente sin que éstos tengan que pasar primero por los entes territoriales, como sucede actualmente. La Silla averiguó y ese decreto ya se redactó y está para la firma del Presidente, aunque su estructuración se había planeado desde enero como parte de una negociación más grande con los pueblos indígenas.

Yahir Acuña

Como lo ha contado La Silla, el mayor elector de Sucre (su lista a la Cámara, en la que sólo él era conocido, sacó 126 mil votos) fue de lejos el congresista santista que más se movió en ese departamento por la reelección aunque ni siquiera hace parte oficial de la Unidad Nacional. Aunque pedirá más recursos nacionales (la llamada mermelada, en la denuncia uribista aparece con 11 mil millones de pesos en cupos indicativos) para invertir en los municipios en los que tiene alcaldes, como Coveñas, Tolú, San Onofre y San Pedro, y tiene sus ojos puestos en un proyecto millonario de la Nación para recuperar la zona costanera de Sucre, su empresa inmediata es la Alcaldía de Sincelejo.
Por estos días, Acuña es el principal promotor de la revocatoria al alcalde de Sincelejo Jairo Fernández, con quien tuvo una amistad política y hasta cuotas en la Administración, pero de quien luego se separó en medio de una pelea pública. El Representante prometió que será el primer proceso de este tipo exitoso en el país y para lograrlo moverá toda su maquinaria que no es poca. Al Gobierno Nacional lo necesita en este caso porque Acuña quiere quedarse con la Alcaldía (ya tiene parte en la Gobernación, luego de haberle puesto los votos que eligieron senador al hijo del gobernador Julio Guerra) y, si la revocatoria prospera, el Partido de La U será el que ponga la terna para el nuevo alcalde mientras hay elecciones. Si La U, el partido de Santos, hace una terna a su medida y la Gobernación de Sucre escoge luego mandatario local al candidato de su preferencia, Yahir se coronaría amo y señor de todo el departamento. En este caso en esa colectividad ya se comprometieron a concederle su deseo.

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