Diaz-Granados se refuerza en la U

El ex viceministro de Turismo de Sergio Diaz-Granados, Óscar Rueda García, fue nombrado ayer como secretario general del Partido de La U. Esa decisión muestra que Díaz-Granados, el ex ministro de Comercio, ex jefe de Rueda y nuevo presidente del partido, tiene la sartén por el mango para las elecciones.

Rueda fue un aliado clave de Díaz-Granados para sacar adelante la ley de turismo, que es una de las banderas del ex ministro. De hecho, Rueda venía de dirigir la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo (Anato) antes de llegar al ministerio y había reemplazado en ese cargo a Díaz- Granados. Y ahora vuelve a ocupar un cargo que tuvo Díaz Granados, quien fue secretario general del partido durante las elecciones de 2010. 

Ahora Rueda va a ser uno de los seis miembros del comité político-estratégico del partido, que es el comité asesor de Díaz Granados para definir la estrategia para las elecciones.

Además, la semana pasada se definió quiénes van a llenar las dos vacantes que hay en la dirección del partido, la de las mujeres y la de los diputados.

Uno de esos nombramientos es otra muestra del poder de Díaz-Granados. La silla de las mujeres será para la diputada casanareña Sonia Shirley Bernal Sánchez, quien ya estaba en la dirección en representación de los diputados. Ella ahora salta a la de mujeres, a la que renunció la ex senadora caldense Adriana Gutiérrez que se fue al uribismo y es del grupo político de Óscar Iván Zuluaga.

El que llega nuevo al cupo para los diputados es el magdalenense Humberto Alfonso Díaz Costa, quien desde julio preside el directorio departamental de La U. Diaz es aliado político del representante Eduardo Díaz Granados, quien a su vez es primo y miembro de la misma casa política del presidente del partido.

Por eso, la llegada de Díaz le da más poder al sector de La U del Magdalena que lidera el Díaz-Granados y que aspira a crecer políticamente: el representante Díaz Granados, que es el único congresista de La U del Magdalena, quiere dar el salto al Senado y arrastrar a dos representantes a la Cámara.