El sacerdote católico Carlos Eduardo Osorio Buriticá es el gobernador electo de Quindío.
Teólogo y filósofo, con maestría y doctorado en derecho canónico de la Universidad Javeriana de Bogotá, lleva más de 30 años trabajando en la iglesia.
Ha hecho carrera como párroco en diferentes lugares del Quindío, incluyendo la parroquia de Nuestra Señora de Chiquinquirá en Armenia entre 1992 y 1994. Fue director de Pastoral Social de la Diócesis de Armenia, y de allí pasó a ser subdirector nacional de Pastoral Social.
Ese trabajo lo hizo acercarse a diferentes entidades del Estado y llegar al Gobierno en 1998 como Asesor de la Red de Solidaridad Social. En se cargo, tras el terremoto del Eje Cafetero fue el encargado de coordinar ayudas humanitarias para el Quindío.
Fue capellán de Presidencia durante el período de Andrés Pastrana, quien también lo nombró su delegado en el consejo superior de la Universidad del Quindío.
Actualmente es párroco de El Divino Niño, en el área rural de Calarcá.
Es conocido en la región porque maneja la Fundación Faro, que se dedica a ayudar a personas con problemas de drogadicción, desde 2005. Aunque la Fundación existe desde 1988, ha tenido un crecimiento importante en estos 10 años.
Se lanzó por firmas, y su candidatura estuvo en vela porque el Consejo Nacional Electoral le anuló tal cantidad de firmas que iba a quedar por fuera. Sin embargo, tras una revisión logró quedar con las 50 mil firmas requeridas para seguir adelante.
En la campaña recibió el apoyo de parte del uribismo, pero el Centro Democrático del departamento se partió entre quienes querían apoyarlo a él y los que preferían estar con Sandra Milena Gómez, candidata del grupo de la actual gobernadora, Sandra Paola Hurtado y el novio de ésta, César Augusto Pareja Giraldo o “Toto”.También tiene el apoyo del viejo cacique del Quindío Emilio Valencia “Carriel”, que maneja el partido liberal en el departamento, y de parte del conservatismo quindiano.
Iba en fórmula con Carlos Mario Álvarez, candidato del continuismo de la alcaldesa liberal Luz Piedad Valencia (y del movimiento político que ella heredó de su padre, Emilio Valencia “Carriel”) a la alcaldía de Armenia.
Terminó por ser elegido con el 50 por ciento de los votos, 10 puntos arriba de la candidata del continuismo.