Guido Nule nació en Barranquilla hacia 1974. Es hijo del político liberal y exministro Guido Nule Amín, y de la también política y exreina del Carnaval Ginger Marino. Marino fue consejera para la juventud del gobierno de César Gaviria, el mismo en el que su esposo fue ministro de Minas y de Comunicaciones. La hermana de Guido hijo, Katia Nule, también fue reina del Carnaval y está casada con Álex Char, alcalde de Barranquilla e hijo del senador y dueño de Olímpica Fuad Char.
Al graduarse del colegio, viajó a Bogotá para estudiar administración de empresas en la Universidad Javeriana. Ya en Bogotá, se asoció con sus primos Manuel y Miguel Nule Velilla, con quienes creó un grupo económico alrededor de las obras públicas de infraestructura y la administración de servicios públicos. El llamado Grupo Nule creció con una asombrosa velocidad entre fines de los años noventa y el año 2010, inicialmente en Bogotá pero rápidamente expandiéndose a diferentes lugares del país.
Los negocios más importantes de los Nule fueron la realización de obras de infraestructura en Bogotá (como la troncal de Transmilenio de la Calle 26) y en el país (como la doble calzada Bogotá-Girardot), la construcción de parte de la red de gas domiciliario en Bogotá (como contratistas de Gas Natural), las concesiones para administrar los servicios de la empresa de acueducto de Bogotá en una zona de la ciudad y en toda Cúcuta, el manejo del sistema de recaudo de Transmetro en Barranquilla (que obtuvieron pero no alcanzaron a desarrollar) y su participación en Enertolima (a través de Kapital Energy tenían la mitad, por partes iguales, con Vergel y Castellanos). En buena parte de estos negocios participaron con diferentes socios, entres los que se incluyen las compañías de Álex Char. Además, el grupo tuvo negocios en Centroamérica y en Brasil.
Pero el Grupo Nule no las ganó todas. Fracasó en su participación en otros procesos como los de la concesión del Aeropuerto El Dorado y de la Ruta del Sol. En 2009, después de varios años de vertiginoso crecimiento, empezaron a tener problemas de liquidez. El golpe final fue la cesión del contrato de la Calle 26, en Bogotá. Tras la cascada de acusaciones y escándalos, Guido viajó a Italia, donde podría haber permanecido porque tiene la ciudadanía italiana gracias a su ex esposa, la barranquillera de raíces italianas Adriana Mancini.
Aunque es el menor de los primos, mientras estuvo en Colombia Guido fue quizás el que más salió en los medios para celebrar, explicar y finalmente defender los negocios del grupo.
En abril de 2011 regresó al país junto con sus primos Miguel y Manuel. Desde entonces han estado recluidos, primero en el búnker de la Fiscalía y luego en La Picota, mientras avanzan los procesos penales en su contra y negocian con la fiscalía la obtención de beneficios a cambio de la delación de otras personas que participaron del llamado ‘Cartel de la Contratación’.
El 15 de diciembre de 2011, Miguel, Manuel y Guido Nule fueron condenados por peculado, uno de los cinco delitos por los que los acusó la Fiscalía. Aunque la sentencia fue de 15 años, sólo pagarán la mitad porque aceptaron el cargo. Específicamente, la condena es por irregularidades en tres contratos: uno de 2007 en el cual se manejaron irregularmente 45 mil millones de pesos, uno de 2008 en el que la cifra fue de 18 mil millones, y otro del mismo año en el cual se desviaron fondos por una suma de 4 mil millones.
Luego de que la defensa lo solicito, el 22 de marzo de 2012 se conoció que la Fiscalía iba a solicitar el principio de oportunidad para los Nule, lo que significa que se suspendería la acción penal por los otros cuatro delitos pendientes que se les imputan. Sin embargo, en mayo de ese año la Fiscalía retiró el principio de oportunidad al considerar que los testimonios de los Nule no eran reveladores.
El 20 de septiembre del 2015 Guido recibió el beneficio de casa por cárcel, otorgado por un juez en Barranquilla. Según el Juez, Guido padece de un desgaste de articulación en la rodilla que no se puede tratar en la cárcel. En eso quedó el caso de Guido, hasta que en el 2017 la Corte Suprema de Justicia le elevó la pena a 19 años y 5 meses de prisión, por considerar que no se podía aplicar una rebaja de pena cuando los condenados no habían devuelto al menos la mitad de los recursos perdidos.
Precisamente eso fue lo que hizo que en julio del 2018, la Fiscalía ocupara dos apartamentes de los hermanos Nule, valorados en aproximadamente 2 millones de dólares.