El Alcalde de Cartagena seguirá detenido, mientras el exsenador de La U condenado por corrupción sigue acumulando poder. Le acaban de nombrar a una vieja aliada como Secretaria de Infraestructura.
Manolo no va… pero “el jefe” Juancho García sí
El súper poderoso exsenador de La U, quien fue condenado por corrupción, Juancho García Romero es hermano del exsenador (condenado por la masacre de Macayepo) Álvaro 'el Gordo' García Romero y de la actual senadora del viejo PIN Teresita García Romero. Su esposa es la exsenadora de La U Piedad Zuccardi (en juicio por parapolítica). Foto: tomada de eluniversal.com.co
Por considerar que ayudó a tejer una red de corrupción que redundó en maniobras clientelistas y que estando libre podría afectar el curso de las investigaciones, un juez decidió que Manolo Duque espere en la cárcel a que se resuelva el proceso en su contra por concierto para delinquir, tráfico de influencias y cohecho. Así es que en el sentido contrario del eslogan con el que hizo campaña para llegar a la Alcaldía de Cartagena: Manolo no va… y lo que muchos anticipan es que, de hecho, podría renunciar en los próximos días.
Quien sí se queda con influencia en la Administración es el súper poderoso exsenador de La U Juan José ‘Juancho’ García Romero, a quien Manolo y su hermano de crianza y jefe político José Julián Vásquez (también detenido por los mismos hechos) se refieren como “el jefe” en las grabaciones reveladas por la Fiscalía dentro el caso de los puestos que se feriaron para amañar la elección de la Contralora de la ciudad.
García Romero es visto como el poder a la sombra en la Empresa de Desarrollo Urbano de Bolívar Edurbe, que en los próximos años manejará multimillonarios recursos de los cartageneros. Y además ayer el alcalde encargado, Sergio Londoño Zurek, nombró como secretaria de Infraestructura a una vieja aliada política del exsenador.
Aunque sale mencionado en las grabaciones, Juancho García no tiene vinculación formal al proceso por el que está preso Manolo Duque. El excongresista fue condenado por corrupción en 2007, pese a lo cual ha continuado encabezando la casa política más poderosa de Bolívar, consentida en términos burocráticos no sólo por los gobiernos locales sino por su amigo personal, el presidente Juan Manuel Santos, quien le ha dado ‘caramelos’ como la representación presidencial en el consejo directivo de la corporación autónoma Cardique y la jefatura de la vivienda rural en el Banco Agrario.
En cabeza de su hijo, el senador de La U Andrés García Zuccardi, actual primer vicepresidente del Senado, el grupo de García respaldó en las regionales de 2015 a Manolo Duque, luego de lo cual ese mandatario nombró a una persona a la que identifican como cuota suya a la cabeza de Edurbe.
No se trata de un puesto cualquiera. Edurbe es nada menos que la entidad que ejecutará uno de los proyectos más millonarios y esperados de los últimos años en Cartagena: el plan maestro de drenajes pluviales, que en total tendrá un costo aproximado de 1,5 billones de pesos con aportes de la Nación.
Lo particular es que la potestad para manejar esa plata se la dio a Edurbe Manolo Duque -gracias a unas facultades que le aprobó el Concejo- en diciembre de 2016, a pesar de que se trata de una empresa con problemas financieros y que lleva a cuestas un prontuario de obras inconclusas y mal hechas, y justo tres meses después de que ese Alcalde hubiese nombrado como gerente al funcionario al que relacionan con los García.
Ese funcionario es el ingeniero cartagenero Alfredo Ramón Bula Dumar, quien venía de ser gerente del Fondo Nacional de Desarrollo Fonade con la ‘bendición’ del senador cordobés de La U (hoy detenido por el escándalo de Odebrecht) Bernardo ‘el Ñoño’ Elías.
Para más señas, Bula Dumar es primo de Gabriel Dumar Lora, antiguo aliado del Ñoño y hoy uno de los principales testigos en su contra dentro del caso de las coimas que dio en Colombia la corrupta multinacional Odebrecht.
La cabeza de Edurbe en su momento le negó a La Silla Caribe ser cuota de Juancho García, aunque así nos lo han contado fuentes por separado que lo saben de primera mano porque tienen acceso a altas esferas, y también un congresista importante de la coalición santista.
Más allá de eso, averiguamos y encontramos vasos comunicantes entre Bula y García. Por ejemplo, Manuel Ramón Bula Bula, padre del ingeniero Bula Dumar, fue uno de los candidatos de la casa García a la Asamblea de Bolívar. Aunque avalado por el Partido Liberal, en el departamento Bula Bula era visto como candidato de Juan José García.
Además, Bula Dumar y los García venían de tener relaciones empresariales. En 2013, el hoy gerente de Edurbe fue el representante legal de una unión temporal de la que hizo parte la firma cartagenera Promotora El Campín S.A., de los García Zuccardi.
La posición que respecto a Edurbe han asumido los gremios de la ciudad, Fenalco, y entidades como la Fundación Cívico Social Pro Cartagena Funcicar es la de pedirle al alcalde encargado Londoño que reconsidere la decisión (que tomó Manolo Duque) de encargar el millonario megaproyecto pluvial a una empresa con un largo historial de incumplimientos, que además tiene problemas económicos, y que le haga a la entidad una reestructuración.
El Consejo Gremial de Bolívar le escribió una carta en ese sentido a Londoño el pasado 22 de agosto.
El mandatario (e), que ha hecho varios cambios al gabinete que dejó Manolo antes de ser capturado, le dijo a La Silla Caribe que la reestructuración está contemplada y que la permanencia o no de Alfredo Ramón Bula Dumar en la gerencia será decidida por la asamblea de accionistas el próximo 11 de septiembre.
Mientras, se está a la espera también de los diseños de la obra, que comprende en total la intervención de 200 kilómetros en 176 canales, que fueron encargados por Edurbe a la Universidad de Cartagena, para poder empezar a estructurar el proceso licitatorio.
Por ahora, la Alcaldía tiene proyectada una primera fase, que costará unos 300 mil millones de pesos del Sistema General de Participaciones de agua potable y saneamiento básico y que ejecutará Edurbe vía convenio interadministrativo. Con esa plata deben hacerse diseños hasta la fase III, construcción, afectación predial e interventoría de 29 kilómetros que corresponden a los 26 canales pluviales más neurálgicos de la ciudad.
Pero este no es el único espacio de la Administración cartagenera en el que se siente la sombra de Juancho García porque la nueva secretaria de Infraestructura de la ciudad, anunciada ayer por Londoño, viene de tener fuertes lazos políticos con el cuestionado exsenador.
Se trata de la ingeniera Clara Calderón, sobre cuyo nombramiento Sergio Londoño nos dijo que nada tiene que ver con política sino que lo hizo porque la considera una profesional brillante.
Calderón, no obstante, fue candidata al Concejo con aval de la ASI y luego directora de Valorización Distrital durante el gobierno del fallecido Campo Elías Terán con el respaldo de la casa García, como lo habíamos contado en 2013 en La Silla.
Ese año revelamos que el alcalde encargado que reemplazó a Campo Elías cuando éste se enfermó (el también fallecido Carlos Otero) y Calderón como directora de Valorización estaban dando vistos buenos a Alianzas Público Privadas para millonarios proyectos de la ciudad, a última hora cuando Otero estaba a punto de dejar el cargo porque ya se iba a posesionar el mandatario elegido en propiedad Dionisio Vélez.
Al igual que Clara Calderón, Otero era visto en la Cartagena política como aliado de Juancho García. Una de las iniciativas que estaban empujando por APP ellos era, justamente, el plan maestro de drenajes pluviales, pero la movida no se concretó.
En ese momento, el empresario cartagenero William Murra denunció públicamente que Clara Calderón se había reunido con Juancho García para "orientar" ese proyecto. “En enero fui a visitar a Campo Elías a su apartamento y estando allá escuché que su esposa (Nereida de Terán) recibió una llamada de Clara Calderón en la que ésta le decía que se había reunido con Juan José García para hablar del plan maestro de drenajes pluviajes”, fueron las palabras textuales de Murra hace cuatro años sobre la hoy Secretaria de Infraestructura.
Así es como todo indica que, a pesar de que Manolo y su hermano José Julián permanecerán tras las rejas hasta que haya un fallo, uno de los poderes cuestionados que los llevó al Palacio de la Aduana seguirá rondando los intereses de los cartageneros: el del cuestionado Juancho García Romero. O "el jefe", como ellos lo llamaban en privado.