Estoy convencido de la necesidad de asignar subsidios a los más vulnerables y una sociedad que se respete debe procurar los mecanismos para hacerlo, pero ello tiene que ser sostenible.
¿Es sostenible?
Estoy convencido de la necesidad de asignar subsidios a los más vulnerables y una sociedad que se respete debe procurar los mecanismos para hacerlo, pero ello tiene que ser sostenible.
El sistema de aseguramiento en salud reporta hoy 37 millones de colombianos afiliados. De estos, 18.8 millones pertenecen al régimen subsidiado. La relación entre aportantes y beneficiarios (los familiares de quien paga el aseguramiento) es del 32%. Los otros 9 millones de colombianos, no cubiertos por el sistema, o no reciben salud o hacen parte de los llamados “vinculados”.
Es decir, hoy sólo 12 millones de personas, el 26% de todos los habitantes, pagan el costo pleno de su salud y en muchas ocasiones, un poco más. Los demás o no son atendidos o el servicio es subsidiado.
Sin incluir los temas de ineficiencia, corrupción y politiquería que afectan al sector, es claro que un sistema donde el 74% de las personas no pagan el costo pleno tiene serios problemas de viabilidad en el mediano y largo plazo. Por eso no es de extrañar que varios analistas vengan advirtiendo sobre el posible colapso de nuestro sistema de salud. Comparto su juicio y creo que nuestro actual sistema no es sostenible.