Daniel Coronell es director y vicepresidente de noticias de Univisión, además de ser columnista de Los Danieles.
Nació en Bogotá en 1964, se graduó como Comunicador Social en la Universidad de Externado de Colombia y luego estudió dirección de televisión en Suiza. Cuenta con más de 20 años de experiencia en programas informativos de televisión, y hasta 2011 trabajó como director de Noticias Uno antes de radicarse en Miami.
A su regreso comenzó inmediatamente su carrera como periodista de televisión. Primero trabajó como coordinador general del Noticiero de las 7 y el Noticiero del Mediodía. Pasó a ser jefe de redacción del Noticiero Nacional y director de los programas periodísticos 'Protagonista' y 'Magazín 7:30'.
Coronell ha sido profesor de periodismo en las universidades Externado, Javeriana y Andes, así como investigador y profesor visitante en la Universidad de Stanford.
Coronell ha destapado algunos de los grandes escándalos de los últimos años. Su principal habilidad como investigador es destapar los secretos del poder Ejecutivo.
Durante el gobierno de Virgilio Barco se dio a conocer cuando reveló la noticia de Yair Klein, el mercenario israelí que entrenó ejércitos paramilitares de narcotraficantes en el Magdalena Medio.
Durante el gobierno de César Gaviria, Coronell denunció la negligencia militar para custodiar a Pablo Escobar durante su encarcelamiento.
Durante el gobierno de Ernesto Samper reveló las llamadas que vinculaban al Presidente con la 'Monita Retrechera' (Elizabeth Montoya de Sarria), quien trabajaba para los narcotraficantes Rodríguez Orejuela. Y durante el gobierno de Andrés Pastrana denunció los abusos de las FARC en el Caguán.
Durante el gobierno de Uribe, Coronell fue víctima de múltiples amenazas que lo obligaron al exilio. En el 2002 recibió amenazas después de publicar que, en 1984, un helicóptero del padre del presidente Álvaro Uribe había sido encontrado en un laboratorio de coca en Tranquilanda y el helicóptero había obtenido su licencia cuando Álvaro Uribe era director de la Aeronáutica Civil.
En septiembre de 2005, Coronell tuvo que salir del país y vivir en el exilio durante dos años por amenazas de muerte hechas a él y a su familia. Después de investigar, el periodista descubrió que los correos amenazantes que en parte motivaron su salida habían salido del computador personal de Carlos Nader, ex senador, hacendado de Córdoba y amigo de Álvaro Uribe.
Durante su exilio, Coronell trabajó en la Universidad de Stanford como investigador, conferencista y estudiante.
En 2007 regresó al país y el año pasado recibió el premio de la Fundación Iberoamericana de Periodismo-Cemex por la investigación "Un crimen casi perfecto" sobre el magnicidio en el Palacio de Justicia en 1985, en que revelaba un video que muestra al magistrado Urán saliendo vivo del Palacio aunque después apareció junto a los cadáveres del primer piso.
Coronell continuó destapando escándalos en el gobierno de Uribe. En abril del 2009, el periodista reveló también los vínculos entre los hijos de Uribe y una nueva Zona Franca en Mosquera, Cundinamarca. En el 2018, Coronell reveló que la Corte Suprema de Justicia tenía grabaciones, videos, documentos e interceptaciones telefónicas que indican que el expresidente Uribe estaba presionando a testigos.
Coronell nunca ha participado en política, y aunque apoyó a Noemí Sanín en sus primeros pinitos de la política, incluso con un aporte a su campaña en 2002, dice sentirse ahora decepcionado (entrevista 20 de febrero del 2006) "En 1997 me ilusioné con Noemí Sanín y con la renovación que representaba. En 2002 me decepcioné cuando ella se plegó rápidamente a Uribe, después de su derrota. Su impulso a la primera reelección enterró cualquier afinidad política y enfrió, muchos grados bajo cero, la amistad. Téngalo por seguro que nunca más voy a sumarme a otra campaña para que ella termine de embajadora".
En enero de 2011 se fue de Noticias Uno y se convirtió en director de noticias de Univisión, el canal hispano más grande de Estados Unidos.
En 2019 publicó una columna cuestionando a Semana tras la revelación de La Silla Vacía de que la revista no había publicado una investigación que salió en el New York Times, y que mostraba el germen de un nuevo escándalo de "falsos positivos", el asesinato de civiles inocentes por militares para buscar beneficios, en el Gobierno Duque.
Por ello el fundador de Semana, Felipe López, decidió elimianr su columna, pero pocas semanas después el nuevo socio de López, Gabriel Gilinski, logró que Coronell regresara.