Luis Camilo Osorio Isaza

Luis Camilo Osorio Isaza es abogado de la Universidad Javeriana con especialización en economía pública en la Universidad de Bonn. Ejerció como abogado litigante durante quince años y se ha desempeñado como profesor de derecho en las Universidades Javeriana, Externado y de los Andes de Bogotá, Universidad Libre seccional Barranquilla y Universidad de Medellín.

Este abogado conservador nació en Medellín y ha ocupado varios cargos en el sector público. Es muy cercano al ex presidente Andrés Pastrana, con quien tiene una amistad de años.

A principios de los años setenta trabajó en Planeación Nacional, dilpomático en alemania y concejal de Bogotá.

En 1983, a su regreso de Alemania y durante el gobierno de Belisario Betancur, fue viceministro de Educación del también conservador Jaime Arias Ramírez.

Luego de 1990 a 1994, durante el gobierno de César Gaviria, fue Registrador Nacional, cargo que dejó con buena nota tras las elecciones de 1994. Un año después llegó a la Sala de Consulta y Servicio Civil del Consejo de Estado, en donde fue magistrado hasta el año 2001.

En julio de 2001 la Corte Suprema lo eligió fiscal general con 17 de los 22 votos, en reemplazo de Alfonso Gómez Méndez, y tras ser ternado por el entonces presidente Pastrana, junto con Patricia Murcia y Jorge Pinzón. Allí duró hasta 2005, cuando Álvaro Uribe lo nombró embajador en Italia, cargo en el que estuvo por un año.

Su paso por la Fiscalía estuvo salpicado de acusaciones en su contra por una supuesta alianza con los paramilitares. Muchas de sus decisiones fueron cuestionadas, como por ejemplo que archivara las investigaciones que hasta entonces se habían llevado a cabo contra el general Rito Alejo del Río, a quien la Fiscalía en 2011 acusó de participar en el asesinato de un líder campesino en el Chocó; que las primeras averiguaciones contra el ex gobernador de Sucre, Salvador Arana, por masacres de las AUC terminaran en un auto inhibitorio; o que se desmantelara la Unidad de Derechos Humanos. Muchos de los fiscales durante su período salieron de la entidad o terminaron en el exilio, y a su jefa de Físcalías en Cúcuta, Ana María Flórez, se le probó nexos con paramilitares al servicio de Salvatore Mancuso.

De la embajada en Italia, Álvaro Uribe lo trasladó a México, en donde lo nombró embajador en 2006. Senadores de la oposición de izquierda exigieron su renuncia, alegando alianzas con el narcotráfico e injerencia en asuntos internos del país. Al parecer Osorio no quería regresar a Colombia por asuntos de seguridad. En la embajada de Italia fue reemplazado por Sabas Pretelt de la Vega.

Con el cambio de gobierno, Juan Manuel Santos nombró a José Gabriel Ortiz como su reemplazo en la embajada de México.

En marzo de 2012 la Comisión de Acusaciones abrió formalmente una investigación contra Osorio por nexos con paramilitares, luego de tomar en consideración el testimonio de Magally Moreno Vera, quien era asistente de la fiscal Ana María Flórez en Cúcuta y era considerada 'ficha' de las AUC en Norte de Santander. Moreno, que permaneció prófuga de la justicia hasta que fue capturada en Venezuela y deportada, aseguró que sí hubo vínculos entre el ex fiscal y los paramilitares. También contó que Flórez y Osorio eran muy cercanos, y que la ex jefe de Fiscalías le "hablaba al oído".

Osorio se defendió diciendo que nunca tuvo contacto ni con paramilitares ni con Magally Moreno. También negó su cercanía con Ana María Flórez. El reconocido abogado Jaime Granados es quien actualmente defiende al ex fiscal.