La Ministra de Relaciones Exteriores del gobierno Santos es politóloga de la Universidad de los Andes con especialización en Gestión Pública e Instituciones Administrativas de la misma universidad y posgrado en Diplomacia y Estrategia, en el Centro de Estudios Diplomáticos y Estratégicos (CEDS por su sigla en francés) de París.
Nacida en Bogotá de una familia tradicional de la elite, fue secretaria privada de la Procuraduría General de la Nación cuando el Procurador era Carlos Gustavo Arrieta, y en 1993, durante el gobierno Gaviria, fue la primera secretaria encargada de funciones comerciales de la Embajada de Colombia en Francia. Desde entonces ha tenido una exitosa trayectoria en el servicio diplomático y el manejo de las relaciones exteriores de Colombia.
Con el cambio de gobierno y la llegada de Rodrigo Pardo a la Cancillería en 1994, Holguín pasó a ser jefe de gabinete del Ministerio de Relaciones Exteriores. En 1995 tuvo su primer gran reto: organizar la cumbre del movimiento de Países No Alineados de Cartagena y de ese cargo pasó a ser Secretaria General de ese Ministerio hasta 1997. En 1999, se desempeñó como directora regional para América Latina de Worldview International Foundation, una institución noruega que busca promover la educación a través de la televisión.
En la primera campaña presidencial de Álvaro Uribe coordinó el comité de asuntos internacionales, uno de los cargos de conafianza del entonces candidato, y por ello sonó como Canciller tras la victoria de Uribe. Finalmente ocupó el puesto de embajadora de Colombia en Venezuela de 2002 a 2004, entablando una buena interlocución el Presidente Chávez.
Ese mismo año fue nombrada embajadora ante la ONU, sin embargo en 2006 renunció en protesta por el nombramiento de tres hijos de políticos - Gustavo Dájer Barguil (hijo del político sucreño Gustavo Dájer Chadid, quien fue promotor del referendo reeleccionista), Álvaro Londoño (hijo del político liberal del Valle Luis Fernando Londoño Capurro) y Jorge Hernán Betancur (hijastro de Mario Uribe)- en su embajada, como pago de favores por parte de Uribe.
La distancia que creó esa renuncia se reforzó cuando Uribe le ofreció a Holguín la embajada en Francia, pero ella rechazó la oferta. Eso rompió su relación con Uribe y la convirtió en una de las personas que lo apoyaron en su primer período pero no en el segundo, durante el cual trabajó en la Corporación Andina de Fomento.
Como Canciller de Santos, su mayor reto fueron las relaciones con Venezuela y Ecuador. También le tocó trabajar en consolidar el apoyo internacional a los acuerdos de paz con las FARC y le tocó enfrentar otros retos diplomáticos como el asilo otorgado por Panamá a la ex directora del DAS María del Pilar Hurtado, investigada por las chuzadas a la oposición durante el gobierno de Uribe, la amenaza de boicot en la Cumbre de las Américas de Cartagena en el 2012 por parte de los países del Alba, el fallo de la Corte de la Haya que le quitó a Colombia un pedazo de sus aguas territoriales o las dificiles relaciones con Venezuela durante el segundo periodo de Juan Manuel Santos.
Holguín estuvo en el cargo hasta el 7 de agosto del 2018, año en que terminó el gobierno Santos. Fue reemplazada por Carlos Holmes Trujillo.