Es la primera Gallup Poll después de la detención de Álvaro Uribe y la última antes del fin de la cuarentena.
El ánimo de los colombianos sigue la curva del covid
La Gallup Poll, que mide el ánimo de los colombianos desde hace casi dos décadas, fue publicada ayer. Tiene la particularidad de ser la primera medición después de la detención de Álvaro Uribe y la última que se hace durante la cuarentena. Fue realizada entre el 22 y el 31 de agosto, en las cinco grandes ciudades, por teléfono, y aplicada a 1200 personas con un margen de error del 5 por ciento. Sus resultados muestran que a pesar de que los colombianos le temen muy poco al virus, su ánimo sigue la curva del contagio del covid.
Los colombianos le temen poco al virus y cada vez menos
Uno de los resultados más sorprendentes de la Gallup, teniendo en cuenta que estamos en una pandemia y que los contagios siguen disparados, es que muy pocos consideran que el coronavirus es el peor problema que enfrenta Colombia actualmente. También bajó el número de personas que cree que lo peor está por venir (del 64 al 41 por ciento), y creció el optimismo de quienes creen que seremos capaces de detenerlo (del 23 al 37 por ciento).
Aún así, dos de cada tres estaban de acuerdo con mantener la cuarentena. Aunque ambos resultados pueden parecer aparentemente contradictorios, es un rasgo cultural de los colombianos creer que se pueden encargar de sí mismos y cuidarse pero, a la vez, desconfíar de que los demás hagan lo mismo.
Un teflón de covid para Duque
Durante el período de medición apresaron a su padrino político y jefe de su partido; ocurrieron varias masacres; su gabinete cometió una seguidilla de equivocaciones frente a la extradición de Salvatore Mancuso; y la pobreza y la inseguridad alcanzaron récords de percepción negativa. Sin embargo, la popularidad del Presidente se mantuvo dentro del margen de error de la encuesta. Lo que confirma la tesis de varios analistas que creen que el covid salvó a Duque de la caída en picada en la que se encontraba el año pasado. Puede ayudar que el 23 por ciento de los encuestados dicen haber recibido ayudas estatales durante la pandemia.
El optimismo sigue la curva del virus
Aunque todavía tres de cada cuatro colombianos creen que las cosas están empeorando, el pesimismo cayó diez puntos. En general, casi todas las instituciones y personajes repuntaron en su imagen: desde el ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla y la vicepresidente Martha Lucía Ramírez hasta la Iglesia, las cortes, los militares y la clase empresarial. Las instituciones que no mejoraron se mantuvieron dentro de su margen de error.
Esto coincide con la sensación de que el país ya pasó o está ya atravesando el pico de la enfermedad. Barranquilla es el caso más evidente de esto, pero también Cali, donde el optimismo subió. Por el contrario, en Bucaramanga y Medellín, donde están entrando en el pico, aumentó el pesimismo.
La popularidad de los gobernantes sigue el pico del covid
Uno de los resultados más nítidos de la encuesta es que la favorabilidad de los gobernantes sigue la curva del contagio. En Barranquilla, por ejemplo, el alcalde Jaime Pumarejo se trepó 26 puntos recuperando los niveles de popularidad que traía antes de que la ciudad se viera golpeada por el virus. Ya salió del hoyo, y lo mismo su Alcalde. La misma tendencia beneficia a las gobernadoras del Valle y del Atlántico. En Bogotá, en cambio, Claudia López sigue bajando a la par con el aumento de contagios, al igual que el alcalde de Medellín.
Quintero pierde su cuarto de hora
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, pateó el modelo de gobernanza de la ciudad con su golpe al gobierno corporativo de EPM y de Ruta N, dos entidades claves en el ‘milagro’ paisa. A juzgar por su caída en esta encuesta, no fueron decisiones apreciadas por muchos de sus coterráneos. Tampoco lo beneficia que el contagio, que estaba bajo control durante los primeros meses, se haya disparado.
Récord negativo en seguridad
Salvo que haya un viraje extraordinario, difícilmente el Centro Democrático podrá mantener su bandera de seguridad después del Gobierno de Iván Duque. Esta encuesta muestra la peor percepción en 12 años en el tema del narcotráfico; una percepción negativa de la seguridad solo superada una vez en febrero de 2018 durante el Gobierno Santos; la sensación de que el problema de la guerrilla ha empeorado también es creciente (mientras el 43 por ciento pensaban eso cuando Santos dejó la Casa de Nariño, ahora lo piensan el 64 por ciento). Evidentemente, la seguidilla de masacres, que ocurrieron durante la toma de esta encuesta, puede haber contribuido a empeorar la percepción.
De la Calle, el candidato (?) con mayor favorabilidad
El excandidato presidencial liberal Humberto de la Calle ha dicho que abandonó su ilusión de llegar a la Casa de Nariño. Sin embargo, en los últimos meses ha lanzado varias propuestas y ha estado muy activo en la vida pública. Eso lo ha beneficiado. De todos los presidenciables, es el que tiene la imagen más favorable y el menor negativo: supera a Sergio Fajardo (+43 vs -23); a Gustavo Petro (+34 vs -49); a Marta Lucía Ramírez (+33 vs -45); Alejandro Char (+20 vs -33); Jorge Robledo (+26 vs. -19) y Juan Manuel Galán (+43 vs -16).
La favorabilidad de Uribe mejora preso
Esta encuesta se comenzó a realizar la tercera semana después de que Álvaro Uribe fue detenido, con lo cual recoge los efectos de la medida de la Corte Suprema. Lo que muestra la medición es que el Exsenador está recuperando los niveles de favorabilidad que tuvo durante el primer año de Gobierno de Iván Duque; estos, en todo caso, siguen siendo los más bajos desde que fue Presidente por primera vez y son más los que tienen una mala imagen de él.
La Corte gana adeptos por detener a Uribe
Mientras que la percepción de varias instituciones mejora ligeramente, la Corte Suprema alcanza su mejor favorabilidad en seis años (aunque esta sigue siendo tan solo del 40 por ciento). Esta medición es consistente con otras encuestas que indican que frente a la detención de Uribe, son más los que están del lado de la Corte. También indica que por ahora no le ha hecho mella la campaña de desprestigio que ha emprendido contra la Corte Suprema el Centro Democrático y el Exsenador en las últimas semanas.
La Físcalía General, a donde ha sido remitido el expediente ahora que Uribe renunció al Senado, tiene una imagen negativa del 56 por ciento, percepción que seguramente se verá impactada con las decisiones que tiene que tomar frente al caso en los meses venideros.
El fantasma del castrochavismo, vivito y coleando
Usar a Venezuela como espejo fue una de las estrategias más efectivas del uribismo durante la campaña del 2018 para infundir miedo ante la eventual llegada de Gustavo Petro a la Casa de Nariño. Sin embargo, dos años después, se ha casi duplicado el porcentaje de colombianos que creen que Colombia podría llegar a vivir una situación como la del vecino país. El interrogante es si de mantenerse esta tendencia, beneficiará al uribismo en el 2022 pues se ha agudizado el temor o lo perjudicará porque habrá demostrado que en vez de alejar el fantasma lo ha nutrido.