1 consejo + 1 decisión del Procurador = 6.852 votos

El 2 de diciembre de 2013, cuando el liberal Carlos Roberto Ávila se posesionó como alcalde de Floridablanca, Santander, la presencia de un congresista foráneo puso a hablar a los corrillos políticos de dicha región. El senador conservador Carlos Eduardo Enríquez Maya, oriundo de Nariño, estaba en segunda fila. Sin tener ningún vinculo visible con Floridablanca, Enríquez Maya era invitado de honor porque meses antes le había dado una manito al ahora Alcalde, quien hasta julio de 2013 estaba inhabilitado para ejercer cargos públicos.

Ávila, que antes había sido concejal, llegó a la Alcaldía de Floridablanca - el tercer municipio más importante de Santander - después de unas elecciones atípicas, a raíz de la perdida de investidura del conservador Néstor Díaz Barrera.

Pudo participar en las elecciones gracias a que la Procuraduría General revocó la sanción que ella misma había impuesto a Ávila y 18 compañeros suyos en el concejo de Floridablanca. Ávila y sus otrora colegas fueron destituidos en 2012, en primera y en segunda instancia, por aprobar en 2008 una prima técnica que incrementó el sueldo del alcalde de entonces en un 50 por ciento.

Sin embargo, en julio de 2013 el Procurador General Alejandro Ordóñez revocó directamente la decisión (algo muy excepcional, le dijo a La Silla un abogado experto en derecho disciplinario, ya que una revocatoria directa implica que la entidad admite que se equivocó en la decisión que ya había tomado en dos instancias) y modificó la sanción a una suspensión de apenas 10 meses, que para entonces ya habían cumplido los implicados. Esa reducción se dio porque Ordóñez decidió que los concejales habían cometido una falta grave y no una falta gravísima.

Así, no sólo el hoy alcalde volvía a la vida pública sino que muchos concejales que habían sido elegidos en 2011 y habían salido con las decisiones de 2012 podían recuperar sus curules.

Según le contó a La Silla un político de la región, en Floridablanca era vox populi que detrás de la resurrección de los concejales estaba el senador Enríquez Maya. "En las cafeterías y los mentideros políticos de Floridablanca se hablaba del 'Pacto de Lalito' " le dijo a La Silla esta fuente local.

'Lalo' es como le dicen al Procurador sus coterráneos santandereanos.

El director del diario El Frente (donde Enríquez Maya publicó varias columnas antes de las elecciones) y dirigente conservador Rafael Serrano Prada, le dijo a La Silla que lo que hubo fue un cambalache de votos a cambio de "alta cancillería ante la Procuraduría" en favor de los concejales sancionados. Serrano Prada asegura que eso se dijo públicamente en la campaña del Senador.

La Silla no pudo confirmar que Enríquez Maya hubiera hablado con el Procurador para interceder por los concejales. En varias ocasiones intentamos comunicarnos con Ordóñez pero no fue posible. Y el Senador le aseguró a La Silla que "el Procurador no es de pedirle favores así no más" y que él jamás intervino ante el Ministerio Público, "ni ante el Procurador y muchos menos ante sus subalternos", para ayudarle a los concejales de Floridablanca.

Sin embargo, sí pudimos corroborar que muchos de los concejales beneficiados por la inusual revocatoria de la sanción apoyaron a Enríquez Maya en las elecciones y que él los asesoró para defenderse en la Procuraduría. Además, que en cuatro años logró convertirse con 3.880 votos en el segundo elector más importante de Floridablanca, sólo por detrás del hermano del gobernador de Santander. En 2010 Enríquez Maya había sacado apenas 60 votos en ese municipio.

Uno de los concejales que fue destituido y después restituido por el Procurador, y que le hizo campaña a Enríquez Maya fue el conservador César Sánchez. Sánchez le dijo a La Silla que había apoyado a Enríquez Maya, un foráneo, porque los candidatos santandereanos no reconocen el trabajo político de los concejales y aseguró que nunca había tocado el tema del proceso en la Procuraduría con el congresista nariñense.

No obstante, Oliverio Solano, otro concejal azul salvado por Ordóñez y que le hizo campaña a Enríquez Maya no sólo en Floridablanca sino en todo Santander, le dijo a La Silla que el senador Nariñense sí les ayudó con "una asesoría sobre el mecanismo" para tumbar la decisión.

Incluso, el propio Senador le confirmó a La Silla que tres concejales conservadores y varios de otros partidos, como el verde el Luis Alfonso Buitrago, el hoy alcalde liberal Carlos Roberto Ávila o José Uribe del Polo Democrático, estuvieron en su oficina tratando el tema de la sanción disciplinaria. Según Enríquez Maya, todo empezó un día entre el Capitolio y las oficinas cuando caminando se le acercaron algunos de los concejales a pedirle asesoría espontáneamente.

De acuerdo al Senador, él les recomendó, a manera de consejo, que pidieran la revocatoria directa porque el fallo era injusto. Y dice que lo hizo porque no le niega un concepto a nadie y menos a unos políticos conservadores.

Negar la discusión con Enríquez Maya sobre el fallo disciplinario no fue la única mentira que el concejal César Sánchez le dijo a La Silla. También aseguró que desconocía si otros concejales, no conservadores, beneficiados por la sanción habían apoyado al Senador. Pero en una foto de campaña con el hijo de Enríquez Maya, sale abrazado con el concejal del Polo José Uribe.

En todo caso, muchos de los concejales amparados por la revocatoria proferida por la Procuraduría, fueron, sin distingo partidista, los caballitos de batalla de Enríquez Maya para sacar votos en Santander.  Así lo demuestran mensajes y fotos de la campaña, y sobre todo la votación que en Floridablanca se multiplicó 64 veces y en Santander pasó de 851 a 6.852 votos. Incluso el grupo político del alcalde de Floridablanca, a través de su papá (hasta este año un liberal serpista), terminó apoyando la campaña del senador nariñense.

La gratitud de los concejales y exconcejales con el senador Enríquez Maya se resume en el siguiente mensaje que publicó en su facebook el exconcejal José Merchán, uno de los involcurados, días antes de las elecciones del pasado 9 de Marzo.

El senador le confirmó a La Silla el apoyo de parte de los concejales sancionados durante su campaña, pero anotó que “si fuera verdad que intercedí ante el Procurador, con 19 concejales, hubiera sacado muchos más votos”.

De cualquier manera, el consejo jurídico de Enríquez Maya a los concejales florideños sí resultó en 6 mil votos santandereanos con los que no contaba en 2010.