Así capitalizaron Simón Gaviria y Álex Char su derrota en la elección del defensor

Si nada extraordinario ocurre, mañana será elegido como nuevo defensor del Pueblo el director de la Federación Nacional de Departamentos, Carlos Camargo, quien, gracias a una negociación al menudeo, ya cuenta con el apoyo de los partidos mayoritarios en la Cámara de Representantes en donde será la votación. Su aspiración contó con un respaldo tardío, pero sorpresivo, que inclinó definitivamente la balanza: el de Simón Gaviria y Álex Char. 

Su apoyo se dio el lunes, pues hasta ese día en la mañana, los delfines Char y Gaviria apoyaban la candidatura de la secretaria de la Comisión Tercera de la Cámara, Elizabeth Martínez.  

Pero tras perder el pulso por su nombre al interior de sus respectivos partidos, convirtieron su derrota en un triunfo personal pues lograron unir a toda la coalición que apoya a Duque detrás del nombre del futuro Defensor.

Las movidas detrás de la coronación

El jueves de la semana pasada, el presidente Iván Duque envió a la Cámara de Representantes su terna para la Defensoría del Pueblo.

Además de Camargo y Martínez, estaba la directora de la Agencia Nacional de Tierras, Myriam Martínez.

Mientras Elizabeth tenía el respaldo del Partido de La U, Myriam no tenía el respaldo claro de algún partido. Esto, pese a ser cercana al Centro Democrático, en especial a la senadora María del Rosario ‘Charo’ Guerra y su esposo el presidente de Fedepalma, Jens Mesa, con quien trabajó por cinco años.

“Por lo menos Elizabeth se movió y llamó a algunos congresistas. De Myriam nunca escuchamos nada. Es como si no hubiera querido estar allí”, nos dijo de su aspiración un congresista uribista.

Para el fin de semana, Elizabeth Martínez tenía el respaldo de La U (25 representantes) y Camargo el de los conservadores (21). En juego estaban los apoyos de Cambio Radical (30), los liberales (35) y el Centro Democrático (32), que son los que más votos tienen en el Congreso y son determinantes a la hora de una elección.

En Cámara, la mayoría se logra con 87 votos y es allí en donde entran a jugar Aléx Char y Simón Gaviria, que como sus padres, son grandes amigos desde hace años.

A pesar de que Camargo, como contamos en La Silla Vacía, venía haciendo lobby con los congresistas y llevaba más de 60 reuniones en Zoom con ellos, Gaviria y Char decidieron respaldar a Elizabeth Martínez.

La razón es que ella es amiga de Simón Gaviria y trabajó con él en sus años de representante por Bogotá, en la Comisión Tercera de la Cámara (2006-2014).

Los dos, uno hijo del expresidente César Gaviria y otro hijo del megaempresario y cacique Fuad Char, comenzaron a llamar a los representantes de sus respectivas bancadas. 

De acuerdo con lo que nos contaron por aparte un congresista de Cambio Radical cercano a los Char, dos congresistas liberales y una persona del círculo de los Gaviria, una vez Álex tuvo a toda su bancada en Cambio Radical alineada, también llamó a varios congresistas liberales para que apoyaran a Elizabeth.

Sin embargo, y pese a la influencia que tiene Simón entre los representantes rojos, varios no atendieron sus llamados y continuaron respaldando a Carlos Camargo, quien, a diferencia de Martínez, había hablado directamente con los congresistas para ganarse su voto; para el domingo en la noche, los liberales estaban divididos.

Al ver el rechazo de los congresistas rojos a Martínez por no hablar directamente con ellos y la fractura del partido de cara a las Convención Nacional Liberal de este fin de semana, Gaviria y Char accedieron a hablar con Camargo el lunes en la mañana. Según nos contó una persona que lo sabe de primera mano, se reunieron los tres en la casa de Gaviria a desayunar.

Tras ese encuentro, que según la fuente duró cerca de unos 40 minutos, los dos decidieron respaldar a Camargo. Fue así como casi al mediodía de ese lunes el Partido Liberal publicó un comunicado en el que anunció su apoyo en bancada.  

Le preguntamos a Carlos Camargo por su desayuno con Gaviria y Char y su apoyo, y nos contestó que “no estaba enterado”. 

Esto dejó en varios congresistas del partido la sensación de haberle ganado una puja a Simón Gaviria y a Álex Char.

“En últimas, lo que hicimos fue mandar un mensaje de independencia. Elizabeth creía que hablando con los caciques iba a mandar a los indios y no. Nosotros no nos dejamos mandar por terceros”, nos dijo al respecto un congresista liberal. 

“La mayoría de nosotros quería a Carlos Camargo y, por eso, quedó”, nos dijo otro.

Tener una relación directa con el director de una entidad como la Defensoría, que tiene sedes en todos los departamentos del país, es clave para un político porque puede negociar con él directamente y no depender de lo que decida el jefe político de turno. 

En la Defensoría, trabajan cinco mil contratistas y su presupuesto es de casi 600 mil millones de pesos para este año; un botín deseado por muchos políticos tradicionales.

Luego de conocerse la decisión de los liberales, la campaña de Elizabeth Martínez empezó a derrumbarse y a quedarse sin apoyos.

El efecto dominó

Cambio Radical, que se había reunido el día anterior (el domingo) sin llegar a una conclusión definitiva, decidió que, en bancada, también apoyarían al Director de la Federación de Departamentos y lo anunció el lunes en la tarde.

“Acá las cosas estaban divididas. Había unos que querían a Camargo y otros que querían a Elizabeth. Vargas nos dijo que él apoyaba a Camargo, pero que nos dejaba en libertad para que decidiéramos en bancada. Lo único que pidió es que si nos íbamos con uno que fuera con el ganador”, nos dijo un representante de ese partido.

A esto se sumaron el Centro Democrático que ya estaba inclinado hacia Camargo, e incluso 14 representantes de La U que, en la tarde, enviaron una carta al Partido anunciando su respaldo al Director de la Federación de Departamentos.

Esto llevó a que ese lunes en la tarde Martínez renunciara a su candidatura aduciendo “razones de índole personal y otras”. Pero la verdad es que su candidatura se había quedado sin oxígeno.

Con la renuncia de Martínez, la terna fue devuelta. El martes, Duque envió una nueva, que incluía en vez de Elizabeth Martínez al abogado (también de la Sergio Arboleda) Luis Andrés Fajardo. 

Esto no cambia el panorama, porque fuera de ser un desconocido en el Congreso pues el máximo cargo que ha ocupado es como magistrado auxiliar de Cristina Pardo en la Corte Constitucional, Fajardo en estos dos días no tiene cómo inclinar la balanza.

Camargo tiene, por lo menos, 132 de los 87 votos que necesita para ser el nuevo defensor.

Y, paradójicamente dado que al principio intentaron atravesarse en el camino, Char y Gaviria pueden sacar pecho por su triunfo pues luego de darle su apoyo se despejó su camino a la Defensoría. 

Este episodio también es otra señal de una alianza que se está cocinando entre los dos delfines con miras a las presidenciales en 2022 en las cuales, como hemos contado, los Char aspiran a poner candidato propio.

Esta alianza tuvo sus pinitos en las elecciones locales del año pasado en las que los liberales respaldaron a los candidatos charistas en Barranquilla y el Atlántico (Jaime Pumarejo a la Alcaldía y Elsa Noguera a la Gobernación); y en las que los candidatos charistas que no pudieron ir con el aval de Cambio Radical lo hicieron ondenado el trapo rojo.

“Aquí lo que hay es una alianza que se está fraguando y que no va a parar acá. Esto le está apuntando al 2022”, nos dijo una persona cercana a Char y a Gaviria.