Los concejales vargaslleristas, inconformes con su representación en el gabinete, cuestionarán hoy la gestión de Astrid Álvarez, funcionaria que le habla al oído al Alcalde.
Cambio Radical le da un campanazo a Peñalosa
Hoy está programado un debate en el Concejo sobre la gestión de la Empresa de Energía de Bogotá (EEB), una discusión que podría ser de trámite si no fuera porque cuestionarán a la presidenta de esa empresa, Astrid Álvarez, uno de los funcionarios más cercanos al alcalde Enrique Peñalosa, y las preguntas incómodas no las hará la oposición, sino los partidos de la coalición peñalosista, especialmente Cambio Radical (CR).
En el Concejo ya es común que oposición y oficialismo les den duro a funcionarios como Alexandra Rojas, gerente de Transmilenio, o a Juan Pablo Bocarejo, secretario de Movilidad. La semana pasada hubo también un debate muy fuerte cuestionando la gestión de la alimentación escolar en la Secretaría de Educación, a cargo de María Victoria Angulo.
Pero poner contra las cuerdas a Álvarez es una forma de cómo CR puede escalar a la hora de mostrarle los dientes al alcalde, a quien ese partido, por más que le reitere constantemente su apoyo, le ha pedido más representación en el gabinete.
Un cuestionario particular
Astrid Álvarez, una superpoderosa de Bogotá, es una funcionaria clave de la administración porque está al frente de un grupo empresarial que en 2016 reportó $1,3 billones de utilidades; ella, además, lidera la venta del 20 por ciento de las acciones que el Distrito tiene en la EEB, una operación que dejaría $3,5 billones con los que Peñalosa pretende apalancar su plan de vías.
Pero más allá de eso, conoce bien al alcalde y le habla al oído.
Fue su gerente del Acueducto en la primera administración (1998-2000) e hizo parte del equipo directivo de sus últimas cinco campañas políticas.
En su actual cargo no ha sido objeto de mayores polémicas, y justo ayer el diario La República le dedicó una portada muy positiva:
Astrid Álvarez, presidenta del @GrupoEnergiaBog, hoy en la portada de LR. La entrevista completa en https://t.co/aSnKxDz4sW pic.twitter.com/pMKMBmIVCN
— Diario La República (@larepublica_co) 22 de marzo de 2017
Hoy, sin embargo, se enfrentará a un escenario más hostil.
El debate lo citan cinco concejales apoyados por sus bancadas, que son todas las de la coalición de gobierno.
Por Cambio Radical, Yefer Vega; por los liberales, María Victoria Vargas; de los verdes, Hosman Martínez; del Centro Democrático, Javier Santiesteban, y por La U, Rubén Torrado.
Entre los cuestionarios que le enviaron a Álvarez los cinco partidos citantes, llama la atención el de Cambio Radical, pues no pregunta por las cifras globales de la empresa sino por unas denuncias que recibió el concejal Vega sobre aspectos particulares de las reformas internas, nombramientos y despidos que ha hecho ella desde que llegó a la EEB en enero de 2016.
En su respuesta, que conoció La Silla, la EEB niega cualquier irregularidad y se abstiene de entregar información en algunos puntos recordando que sus documentos son de carácter privado (es una empresa mixta en la que el Distrito tiene el 76 por ciento y el resto es de privados).
No entregó, por ejemplo, la relación de contratos ni lo que se ha gastado en indemnizaciones por despidos sin justa causa, aunque admite que sí ha habido ese tipo de salidas para llenar las vacantes con "gente idónea".
Entre las preguntas que le formulan está el nombramiento de Vevle Elinor Vikoeren, una noruega que ha hecho parte de Baliza, la empresa consultora de Álvarez y de su esposo, Óscar Moreno Tibavisco.
La EEB responde que Vikoeren fue contratada pero no es representante legal de Baliza. No aclara si es o fue socia de la empresa, como pide el cuestionario.
También le preguntan por el nombramiento del abogado Alejandro Botero Valencia como Director Jurídico del Negocio, cuestionando su experiencia y que haya sido socio de la vicepresidenta jurídica, Diana Margarita Vivas Munar, en la empresa VivasBotero & Asociados.
Para la EEB, Botero sí tiene la experiencia requerida, y considera que no hay problema en que pertenezca a la misma firma de Vivas porque ésta no opera desde hace tres años.
Los concejales también cuestionan que la EEB le hubiera otorgado a una empresa de William Vélez la construcción de un tramo de la línea de transmisión de energía Tesalia-Alférez (entre el Huila y el Valle), a pesar de que él “no ha pagado por las acciones que tiene en Trecsa”, filial de la EEB en Guatemala.
La EEB no niega que Vélez tenga esa deuda, pero asegura que la contratación cumplió los requisitos.
Álvarez le respondió a La Silla, por medio de su oficina de prensa, que desconoce “las motivaciones políticas” de algunos concejales al formularle tales preguntas, aunque considera que es normal y se mostró dispuesta a resolver más inquietudes durante el debate.
El ruido que hacen los concejales vasgaslleristas al traer estos asuntos a colación, de todas formas, no solo le pueden hacer pasar un mal rato a Álvarez, sino que se convierten en reparos al alcalde que ayudaron a elegir.
Y, así no hagan parte del debate, recuerdan las molestias que traen con Peñalosa de tiempo atrás.
Los reclamos de Cambio
Para Yefer Vega, el cuestionario es parte de su labor como concejal. “No es presión, sino tratar de corroborar la información que llegó a mi despacho”, dice.
José David Castellanos y Julio César Acosta, de la misma bancada de CR, coinciden en que no por ser oficialistas dejarán de hacer control político, sobre todo porque sienten la necesidad de reclamar resultados después de que le aprobaron a Peñalosa la venta de la ETB y de un porcentaje de la EEB, así como el cupo de endeudamiento, para que tuviera plata con qué ejecutar.
La Silla, no obstante, habló con más concejales de la bancada y tres de ellos aseguraron off the record que aunque lo de hoy no tiene que ver con puestos, sí hay molestias porque no se sienten suficientemente representados en el gabinete.
“Peñalosa no reconoce que Cambio Radical le dio 370 mil votos (lo que sacó la lista al Concejo), lo que le faltó para ganar la alcaldía en otras elecciones”, explicó uno.
Otro más recordó que a Cambio le corresponde el sector Hábitat, y muestra de ello es que María Carolina Castillo, secretaria de Hábitat, llegó como cuota del partido desde el Ministerio de Vivienda, que controla Germán Vargas Lleras, pero no sienten que les dé mayor cabida.
Y con Germán Bahamón, gerente de la Caja de la Vivienda que es de la cuerda del representante por Bogotá Rodrigo Lara, los concejales no se identifican.
“Nos dan porteros”, dice otro, para dar a entender que los cargos que les han entregado son de bajo rango y presupuesto.
Ellos apartan de esos reparos el debate de hoy a la presidenta de la EEB. Pero, por tratarse de una mano derecha de Peñalosa, lo terminan tocando y le dan un campanazo justo cuando él está nadando contra la corriente, con una revocatoria en marcha y con unos resultados malos en las encuestas.