El Centro Democrático ha sido débil en el principal puerto en el Pacífico.
Con la alcaldesa (e), Duque le abrió espacio al uribismo en Buenaventura
Maby Viera (de centro de azul) en la entrevista con el Presidente el viernes pasado. Foto: Efraín Herrera, Presidencia de la República.
Al designar ayer a Maby Viera como alcaldesa encargada de Buenaventura, el presidente Iván Duque puso fin a seis meses de crisis institucional en el principal puerto del Pacífico, tras el arresto del mandatario Eliécer Arboleda de La U. Con eso le abrió un espacio al uribismo que hasta ahora no había tenido, porque políticamente la ciudad era controlada por la gobernadora Dilian Francisca Toro y sus aliados.
La designación de la comunicadora cristiana con especialización en gerencia llegó luego de que la Casa de Nariño devolviera una primera terna debido a que todos sus integrantes tenían lazos con el detenido mandatario enjuiciado por el desfalco del único hospital público de Buenaventura.
Luego el Partido de La U, que avaló a Arboleda, envió una terna con personas con nexos con la gobernadora Toro y en la que Viera era “la de relleno”, según nos confirmó un político bonaverense que supo de la movida.
José Pablo Castillo, otro de los ternados, fue gerente de la campaña de Dilian a la Gobernación en 2015; el tercero, Diego Luis Hurtado, es el gerente administrativo de la Gobernación para el Puerto.
Por su parte, Viera venía de ser la secretaria de Asuntos Étnicos de Dilian, cargo al que, según informó en su momento El País de Cali, llegó como cuota de su padre, Oswaldo Viera Cuero, un reconocido periodista y político del puerto con vasos comunicantes con el uribismo y el conservatismo.
Desde sus programas radiales y de televisión, Viera Cuero impulsó las candidaturas presidenciales de Álvaro Uribe en 2002 y 2006; fue candidato a la Alcaldía en 2007 por la ASI (se quemó con 4.800 votos); fue miembro de la junta directiva de la Sociedad Portuaria de Buenaventura entre 2010 y 2011; y en la última campaña presidencial hizo campaña por Duque, según nos contaron por aparte cuatro políticos y periodistas del puerto.
A Maby Viera también la impulsaron desde el uribismo regional. Según nos confirmó el representante uribista, Milton Angulo, único congresista del Puerto, en el alto Gobierno le preguntaron por referencias de Viera, aunque no nos dijo quién lo hizo.
“Tomé la decisión de generar (en el Gobierno) todos los buenos comentarios sobre ella porque creo que es la persona que necesita el Puerto”, nos dijo Angulo.
Según un Concejal que no hace parte de ese grupo político, la elección de la nueva alcaldesa estaba cantada desde hace al menos 15 días, precisamente por esa cercanía con el uribismo y porque el Gobierno no quería un alcalde encargado con nexos con la política local.
De hecho en el grupo de Arboleda acusan al Ejecutivo de ‘vetar’ la primera terna.
Más allá de eso, según una persona que estuvo presente en las entrevistas que hizo el Presidente con los ternados el viernes anterior, Viera fue la que mejor respondió el cuestionario de 20 preguntas, en su mayoría técnicas y de conocimiento de Buenaventura.
La designación le abre nuevos espacios al uribismo en esta ciudad, precisamente en un año electoral, y cuando en las elecciones de 2015 su candidata, Elvia Lucy Abonce, quedó de cuarta con 13 mil votos; y en las elecciones al Congreso de este año salió elegido Angulo con solo 5 mil de sus 19 mil votos en el Puerto.
A eso se suma que Buenaventura fue uno de los epicentros del crecimiento del voto alternativo, en parte por el apoyo del poderoso Comité del Paro Cívico al senador del Polo Alexander López y a Gustavo Petro, quien triplicó en votos a Duque en segunda vuelta (62 mil sobre 23 mil).
Por esto, tener una Alcaldía puede ayudar al uribismo a crecer donde no ha podido ser tan fuerte, más si logra resultados visibles.
“Lo que pretendemos como partido es que se generen las garantías para las elecciones y qué mejor garantía que una Alcaldesa comprometida con la ciudad que no participe en política”, nos dijo Angulo.
Viera se posesionará en los próximos días. Arrancará en el cargo con un compromiso firmado ante Duque para combatir la corrupción en el Puerto y enfrentando una delicada situación de orden público, además de la labor de hacer seguimiento a los compromisos locales y nacionales con el Paro Cívico.
Todavía queda un año para saber si el empujón de Duque al uribismo en Buenaventura sirvió para las regionales de 2019.