Tanto los concejales que la citaron, como Rodolfo Hernández pueden sacar provecho de esa decisión y a la vez afectarse.
Con la moción de censura a la Secretaria de Hacienda todos ganan y pierden un poco
Olga Chacón, secretaria de Hacienda de Bucaramanga.
El Concejo con 13 votos a favor aprobó la moción de censura contra la secretaria de Hacienda de Bucaramanga, Olga Chacón, que fue citada por la bancada de oposición en el Concejo.
La decisión se tomó luego de darle trámite a una recusación que presentó la funcionaria en el debate previo por considerar que seis de los concejales estaban impedidos para votar debido a que ella es testigo en la investigación sobre presuntas irregularidades en la aprobación de la restructuración de la Contraloría en 2015.
Si bien eso dilató un par de días la votación finalmente la Comisión de Ética del Concejo -también integrada por cuatro concejales de oposición- no validó sus argumentos.
Más allá del resultado, lo que quedó claro con ese nuevo round es que ni el Alcalde ni a oposición ganaron completamente el pulso.
Eso, sobre todo, porque ambos bandos tienen cómo capitalizar la movida política.
La baja para Hernández, el triunfo para el Concejo
Desde que inició su administración, el discurso de Hernández ha girado entorno a que las anteriores administraciones “saquearon” las arcas públicas y que él llegó a ponerle orden a las finanzas del municipio.
Su mano derecha para emprender el saneamiento financiaro del municipio ha sido Olga Chacón, su secretaria de Hacienda.
Eso no solo porque fue quien destapó el estado financiero en el que dejó Lucho Bohórquez al municipio, sino porque tomó el timón de gastos, renegoció deudas y recaudó plata pada organizar la casa desde adentro.
Su gran logro es haber reducido el déficit que rondaba los $300 mil millones a inicios de su gobierno en un 66 por ciento para marzo de este año.
Y aunque con eso se podría decir que dado que ya cumplió la tarea y que la baja no es sensible, sí lo es por varias razones.
La primera es que ella es del corazón de Hernández y su salida es un golpe político, algo que ha quedado claro con la reacción del Alcalde ante la posibilidad de que la saquen; la segunda, es que ese juicio político sí deja mal parada a Chacón.
Básicamente lo que los concejales denuncian es que la Secretaria cobró irregularmente un impuesto a los contratistas de prestación de servicios, varios meses después no ha devuelto la plata, y encima le habría mentido al Concejo sobre el trámite de esa plata.
Así que este se puede convertir en el primer gran golpe de la oposición a Hernández, y más cuando el mayor efecto político que ha tenido ha sido el de aplicarle plan tortuga a los proyectos de la administración, y encima esta sería la primera moción de censura que prospera en el país localmente.
El triunfo del Concejo, la munición de Hernández
A los concejales les juega en contra que el motivo por el que sacaron a Chacón es muy técnico y por lo mismo poco mediático.
Eso, versus la popularidad de Rodolfo Hernández y su estrategia en redes sociales, les juega en contra más que a favor.
El lunes pasado Hernández inició ‘Hable con el Alcalde’ -su programa semanal en vivo en Facebook- hablando de la moción de censura pero, en lugar de defender a su funcionaria, se fue contra los concejales que la están promoviendo.
“Salta a la vista de que se trata de una retaliación politiquera de los que tenían la ciudad quebrada con esta robadera”, dijo a propósito de la moción.
Eso quedó en evidencia el lunes, cuando el Alcalde se refirió al voto del concejal de la coalición minoritaria de la ASI John Claro, quien estaba a favor de apartar del cargo a Chacón.
“¿Concejal John Claro de qué lado está? (...) ¿Del lado de la ciudadanía hastiada de la corrupción o de la politiquería que acabó con Bucaramanga? (...) ¿Contribuirá usted a este absurdo de la politiquería que se resiste al cambio?”.dijo Hernández en redes sociales.
Así fue como Hernández metió al debate a la ciudadanía que simpatiza con él, e hizo presión.
El episodio escaló el mismo día de la votación en la mañana cuando Hernández agredió al concejal, quien le reclamó porque sentía que le estaba coaccionando el voto.
Aunque el ataque de ira del Alcalde mojó prensa en todo el país y terminó suspendido por la Procuraduría durante tres meses, el respaldo masivo que tuvo en redes sociales dejó claro que el Concejo la tiene cuesta arriba para capitalizar políticamente la salida de Chacón e incluso la sanción de Hernández.
En cambio, eso será algo con lo que podrá jugar a favor el mismo Alcalde.
El otro año los concejales que quieran reelegirse tendrán que lidiar con esa nueva munición que le dieron a Hernández.
Nota de la editora: esta historia fue actualizada después de la votación de la moción de censura.