De polo a Polo en Valledupar
En época de avales irse de un extremo a otro pareciera ser parte de la dinámica política. Así lo demuestra el ganadero Pedro Castro Araújo, quien después de haber militado en el Centro Democrático y ser cónsul en Italia durante el segundo gobierno de Álvaro Uribe Vélez, es hoy uno de los tres inscritos por el aval del Polo Democrático Alternativo a la Alcaldía de Valledupar.
Castro Araújo formalizó su solicitud el viernes pasado, tras un mes de conversaciones con esa colectividad, le dijo a La Silla el presidente del Polo en el Cesar Juan Carlos Prieto. Entra así a disputarles el aval polista al exconcejal de La U Pedro Acuña y a la bacterióloga Lina María De Armas.
Sin embargo, de no darse las cosas con el partido de izquierda, Castro Araújo se inscribiría por el movimiento Energía Vallenata con el que recoge firmas desde febrero. Con ese colectivo inclusive ofrece servicio a domicilio: mediante una cuña radial, el grupo significativo da un número telefónico al que los interesados pueden llamar, decir su dirección y esperar en sus casas a que simpatizantes de Castro Araújo busquen las firmas.
Una de las primeras puertas que el ganadero tocó en su aspiración a la Alcaldía de Valledupar fue la del expresidente Álvaro Uribe Veléz. El exmandatario es amigo personal del padre del aspirante: el exgobernador del Cesar y exsenador José Guillermo ‘Pepe’ Castro, quien como patriarca liberal del Cesar es uno de los políticos más tradicionales de ese departamento y sobreviviente de dos atentados de la guerrilla del ELN.
Una fuente de las entrañas del Centro Democrático le contó a La Silla que en una reunión celebrada en enero pasado en la finca El Ubérrimo, propiedad del expresidente, Castro Araújo le propuso al hoy senador delante de unas 200 personas que lo apoyara en su aspiración a la Alcaldía. Le pidió que lo dejara postularse por firmas y no con el aval del Centro Democrático porque así tendría más opciones. Uribe le dijo, nos contó la fuente, que comenzara a recoger firmas, pero sin su respaldo porque su partido no necesitaba “miembros vergonzantes”.
No es el único caso de cambio extremo en la capital del Cesar. La exjefe de la Oficina de Gestión Social de Valledupar Darling Guevara, aspirante a la Alcaldía hasta el fin de semana pasado, también tocó las puertas del Polo, después de haber sido la primera carta del alcalde Fredys Socarrás para que el vargasllerismo proclamara como candidata de Cambio Radical.
Ante el aterrizaje en el Polo de estos dos nombres opuestos a la ideología de izquierda, el director de esa colectividad en el Cesar le explicó a La Silla que su partido encuentra afinidades con ellos porque comparten “preocupaciones de la realidad vallenata” como la privatización de los servicios de aseo y alumbrado público.
El Polo definirá esta semana el aval, pero no descarta más adelante ir en coalición por la Alcaldía de Valledupar con la Alianza Verde.