La fuerza que tomó la versión de que el Gobernador tendrá candidato propio a la Cámara en 2018, realineó la fórmula de 2014.
El ‘Chicharrón’ de Tavera que revivió la fórmula Durán - 'El Pote'
Jaime Durán, senador liberal, y Didier Tavera, gobernador de Santander.
Aunque desde hace meses en el Santander político corrió la versión de que el gobernador de Santander, Didier Tavera, tendría candidato propio a la Cámara para 2018 y que el ungido sería su exasesor Alexander ‘Chicharrón’ Vargas, quien renunció a su cargo para no inhabilitarse en la carrera electoral, no fue sino hasta esta semana que esa posibilidad revolcó los cimientos del Partido Liberal en el departamento y de paso puso a tambalear todos los acuerdos que desde marzo se habían concretado.
En el fondo de la pelea está la avanzada de los Tavera en los espacios de poder dentro de los rojos en la región, algo que además de que tiene fracturadas las toldas rojas locales, puso a hacer sumas y restas a un sector de los actuales congresistas que quieren reelegirse y además tiene ad portas de revivir la fórmula Jaime Durán - Édgar 'El Pote' Gómez.
El 'Chicharrón'
Luego de que las aguas se calmaran en el Partido Liberal en Santander a mediados de marzo, cuando Jaime Durán decidió bajarse a la Cámara y ser fórmula de Horacio Serpa y con eso recompuso el panorama de esa lista, que se había desbarajustado con el anuncio de Miguel Ángel Pinto de saltar al Senado, el panorama de ese partido se volvió a enredar.
El detonante tuvo lugar esta semana cuando en el departamento cogió fuerza la versión de que Alexander ‘Chicharrón’ Vargas, hijo de José Henry Vargas, dueño de Henry Taxis, una de las empresas que tiene el monopolio de los taxis en Bucaramanga y quien según cuatro fuentes liberales fue uno de los financistas de la campaña de Didier Tavera, buscaría la Cámara el próximo año y lo haría como el candidato del Gobernador.
Si bien esa posibilidad no era nueva, y de hecho, como lo había contado La Silla, Vargas fue uno de los que renunció a su cargo para quedar libre de cualquier inhabilidad con miras a las legislativas del próximo año, entre los rojos locales su eventual figuración había quedado dormida por varias razones.
La primera porque con la bajada de Durán a la Cámara se habían calmado los ánimos en el partido y las fuerzas estaban a gusto con la reacomodada, la segunda porque no creían que Tavera considerara meter una ficha debido a que eso caldearía los ánimos, y la tercera porque Vargas no es liberal.
Precisamente por eso fue que la revivida de la versión de su candidatura generó una revuelta.
Durán fue el primero en confirmarla cuando esta semana dijo en una entrevista en Radio Melodía que si Vargas era el candidato del Gobernador él buscaría nuevamente el Senado.
Su posición, que volvió a poner sobre el tablero toda la reacomodada de las fichas liberales para las legislativas, tenía dos argumentos de fondo.
El primero está relacionado con las posibilidades que tendría de llegar a la Cámara compitiendo en la misma lista con un candidato impulsado por toda la maquinaria de los Tavera, y con Nubia López, la esposa del actual representante de Opción Ciudadana, Fredy Anaya, quien tiene de fortín a la Cdmb y, al igual que la familia del Gobernador, plata para meterle a la campaña.
“Este es un tema de maquinaria política. Usted con dinero impone al que sea, que es lo que va a tratar de hacer el Gobernador. Es complicado sacar tres cámaras y por la plata el que más tiene probabilidades de quemarse es Jaime”, le dijo a La Silla un político liberal del grupo de Durán.
Sin embargo, aspirando al Senado con las condiciones como estaban Durán se ponía en el mismo dilema que bajándose a la Cámara debido a que con su nombre nuevamente en la carrera el número de candidatos volvería a repartir en cuatro la torta de votos en Santander (además de él están Miguel Ángel Pinto, Horacio Serpa y Édgar ‘el Pote’ Gómez) y era poco probable que les alcanzara a los rojos para sacar esas curules en Santander.
El segundo argumento de Durán viene de atrás y tiene que ver con la manera en la que Tavera viene rompiendo el liberalismo desde que se posesionó.
El renacimiento de la alianza
Como lo ha contado La Silla, desde que Didier Tavera llegó a dirigir el ‘Palacio Amarillo’, desconoció a la mayoría de sectores del liberalismo que lo impulsaron en campaña.
Las muestras han sido varias. Aunque le dio participación burocrática a los congresistas, el manejo fue más en el papel que en la práctica porque centralizó todas las decisiones gruesas de cada despacho y con eso cerró el juego político, a la par dejó de atender a los recomendados de la bancada, y de paso no volvió a contestar las llamadas de varios de los políticos que lo impulsaron y que fueron claves en su aspiración.
Esas movidas generaron la sensación dentro del liberalismo de que a lo que le está apuntando Tavera es a quedarse con el manejo del partido y a que en esa cruzada está utilizando una aplanadora en la que podría llevarse a más de uno por delante.
Por esa razón, una vez Durán encendió la mecha de la pelea con el anuncio de que volvería al Senado, empezó a buscar aliados.
El primero con el que habló fue Serpa, a quien le pidió que intercediera y le dijera al Gobernador que desistiera de la posibilidad de lanzar candidato propio, pero, según le dijeron a La Silla dos fuentes que lo supieron de primera mano, prefirió mantenerse al margen de la pelea.
Eso propició que Durán se acercara al 'Pote', quien fue su fórmula en 2014 y de quien se había distanciado porque para 2018 iría al Senado y le competiría votos.
Tres fuentes de los dos grupos le dijeron a La Silla que una de las opciones que empezaron a barajar estuvo en que ambos se lanzaran al Senado pero que ninguno tuviera fórmula a la Cámara para que Tavera se quedara solo con la responsabilidad de arrastrar la lista.
Sin embargo, esa opción no convencía a una parte del liberalismo porque por un lado no era tan claro que Tavera se afectara debido a que su maquinaria es, además de la Gobernación, la plata de su familia; y por otro, porque dejar vacantes espacios de poder necesariamente le abría la puerta a que otros grupos se los quedaran y eso a largo plazo era contraproducente para el partido.
Con ese telón de fondo este sábado en la noche se reunieron los grupos de Durán y Gómez para seguir mirando opciones y en esa conversación tomó fuerza la idea de que volvieran a ir unidos el próximo año.
Dos fuentes del grupo de Durán le dijeron a La Silla que lo que se acordó fue replicar la fórmula: que Durán buscara el Senado y Gómez la Cámara.
Aunque esa posibilidad ya la habían barajado y estaba descartada porque el grupo de Durán prefería la alianza con Serpa, como Serpa les dio la espalda al negarse a decirle a Tavera que desistiera de lanzar a Vargas, se abonó el terreno para volver con el 'Pote'.
"La idea es que los dos se refuercen y que se mantengan en el Congreso contra la dictadura que quiere imponer Tavera", le dijo a La Silla una de las fuentes que estuvo en la reunión.
Y es que mientras eso toma forma, lo que está en la mira de los liberales es la jefatura del partido en Santander, porque Tavera se está moviendo en momentos en los que se avecina un relevo de poder entre los rojos locales.
Como están las cosas en Santander, ‘el Pote’ Gómez, Durán y Serpa ya van de salida, los dos primeros están buscando la pensión y el tercero tendría complicado volver al Congreso en 2022 por su edad.
En contrapartida, en el caso de los Tavera la avanzada de poder ha sido mucha. Además de que coronaron la Gobernación, pusieron a Claudia López (la esposa de Pinto y la tía de Tavera) a dirigir el directorio de Bucaramanga, lograron que Pinto llegara a la Presidencia de la Cámara y le dieron plataforma para el Senado, y ahora pondrían Cámara directamente de su cuerda si al final concretan la candidatura de Vargas.
“El clan de Tavera quiere mandar, y el problema no es que lo haga, el problema es cómo lo hace. El papel del gobernador era actuar como el jefe natural del partido y con lo que ha hecho en la Gobernación ha sido el enemigo. Todo está concentrado en su grupo y eso no puede ser”, le dijo a La Silla un político liberal.
Así que con la reacomodada de Durán y el Pote, que si nada cambia será anunciada oficialmente las próximas semanas, los liberales de vieja data están enviándole a Tavera el mensaje de que no se la van a dejar fácil para seguir avanzando.
Por lo que si algo está sobre seguro es que aún con la realineada de Durán y Gómez, si Tavera decide llevar a 'Chicharrón' Vargas como su candidato a la Cámara, la ruptura roja se concretará y en la puja por las legislativas del próximo año los liberales irán a las urnas en medio de una guerra interna.