Empresas cuestionadas, una licitación que va a ser denunciada y miles de millones de recursos hacen parte del negocio de la alimentación escolar para los niños más vulnerables en Santander.
La empresa que está detrás del cuestionado contrato de alimentación escolar
100 mil ni?os del departamento serían los beneficiados con el contrato.
Las irregularidades sobre la contratación y entrega de los refrigerios escolares volvieron a sonar en todo el país, y Santander no fue la excepción.
Mientras que Vanguardia daba a conocer que los alimentos estaban llegando en malas condiciones y los padres de familia mostraban las frutas en estado de descomposición que estaban siendo repartidas por el operador Surcolombiana de Inversiones a los niños, la Gobernación de Didier Tavera cerró ayer una licitación para adjudicar la entrega de los alimentos a 100 mil niños del departamento por $23 mil millones. Tal como se temía cuando se denunció que el pliego de condiciones estaba estructurado con nombre propio, solo un proponente se presentó y en efecto, el ganador es el mismo que hoy tiene el contrato: Surcolombiana de Inversiones.
La Silla rastreó qué hay detrás de esa empresa.
Las relaciones con los Torrado
Surcolombiana de Inversiones es una empresa que desde 2011 ha ocupado titulares de prensa porque, según denuncias hechas en el Congreso de la República, guarda relaciones con el grupo de los hermanos Torrado (Efraín, el exsenador de La U y Édgar, exconcejal de Bogotá), políticos que están siendo investigados por haber sido parte del carrusel de contratación de Samuel Moreno en Bogotá.
El eslabón que los une, según testigos que han declarado en Bogotá y una fuente de adentro del esquema de la contratación de los refrigerios escolares en el país que habló con La Silla para esta historia, es Germán Trujillo, un empresario que fue denominado por medios de comunicación como el ‘zar de la contratación de los alimentos’ en el país.
La historia de Trujillo con Surcolombiana de Inversiones data de varios años.
Germán Trujillo, esposo de la exgobernadora del Huila Cielo González, destituida por irregularidades en el manejo de recursos públicos, se dio a conocer por Alimentación Familiar - Alfaba-, empresa de su propiedad que salió a relucir en medio de las denuncias que fueron hechas en el Congreso sobre un presunto cartel de contratación en el Icbf.
La relación con los Torrado se remitía, según las denuncias publicadas por El Tiempo, El Espectador y Semana, a que aparecía en consorcios con Surcolombiana de Inversiones, empresa que fue señalada de ser una de las más fuertes del emporio de los Torrado en el país.
Nosotros no tenemos ni hemos tenido relación alguna con los Torrado.
“Nosotros no tenemos ni hemos tenido relación alguna con los Torrado. Si Alexander Torrado alguna vez dio declaraciones en nombre de Surcolombiana lo hizo porque yo le di un poder como abogado para que me representara en una audiencia en Medellín. Él no es ni ha sido parte de Surcolombiana nunca”, le dijo a La Silla Luisa Flórez, representante legal de Surcolombiana.
En la otra esquina, en noviembre de 2011, Trujillo, a quien en 2012 le caducaron Alfaba (la sancionaron con 5 años de inhabilidad para contratar) por entregar alimentos en estado de descomposición en Medellín, le dio una entrevista a El Tiempo y dijo que su empresa y Surcolombiana no tenían relación alguna, y que si había un vínculo era gremial.
No obstante, después de poco más de cuatro años de las declaraciones que le entregó a El Tiempo, el vínculo entre Trujillo y Surcolombiana se decantó en Santander a través de la licitación que ayer fue cerrada por la Gobernación de Didier Tavera.
"Germán Trujillo es el dueño del contrato"
En los papeles de Surcolombiana de Inversiones no figura de ninguna manera Germán Trujilo; sin embargo, dos empresarios de la industria de los alimentos que hablaron con La Silla dijeron que era vox populi en el gremio que el empresario es quien “maneja la empresa”.
“Cualquiera que se mueva un poquito en esta industria sabe que Germán Trujillo es quien maneja Surcolombiana. Él siempre ha estado detrás de ella y eso lo sabemos, porque si buscamos un consorcio tenemos que hablar con él no con la persona que aparece como representante legal”, le dijo a La Silla uno de los empresarios.
Cualquiera que se mueva un poquito en esta industria sabe que Germán Trujillo es quien maneja Surcolombiana.
Mientras La Silla realizaba la reportería para esta historia habló con Sergio Delgado, representante legal de MCD, uno de los socios actuales de Surcolombiana en Santander, quien en medio de las explicaciones sobre su relación con esa empresa señaló que se había “asociado con Germán” para ejecutar el contrato por la trayectoria de Surcolombiana.
Sin embargo, cuando La Silla le preguntó si hacía referencia a Germán Trujillo, dijo que había señalado el nombre porque lo conoce de hace muchos años y aseguró que no era muy importante en la empresa.
Cuando le insistimos sobre el papel de Trujillo cambió la versión y dijo que sabía que el empresario sí era muy conocido en Surcolombiana pero que no sabía cuál era el cargo que desempeñaba en esa empresa porque “desconocía el organigrama”.
Los hilos que unen a Trujillo con Surcolombiana son más. Luisa Flórez, representante legal de Surcolombiana aseguró que el papel de Trujillo se remitía al de ser asesor en temas financieros, y aseguró que esa relación data de al menos siete años. Es decir, en el momento en que Trujillo le negó a El Tiempo relación alguna con esa empresa, sí era asesor de ella.
La interventoría ya solicitó multa
Surcolombiana de Inversiones apareció en Santander este año, cuando bajo la figura de urgencia manifiesta, la secretaria de Educación de Santander, Ana de Dios Tarazona, hizo una convocatoria exprés para garantizar el suministro de alimentos a los niños desde los primeros días de clase.
El contrato, que ascendía a los $11.425 millones, tenía como fin entregar el complemento alimenticio para 100 mil niños del departamento que estudian en colegios públicos de 82 de los 87 municipios de Santander y tenía un plazo de ejecución de dos meses y ocho días.
Para esa convocatoria, la Gobernación invitó a participar a cuatro empresas: Petrocasinos, Ecoservir, Surcolombiana de Inversiones y MCD S.A.
Al cierre solo llegó una propuesta. Fue una unión temporal entre Surcolombiana de Inversiones y MCD, esta última empresa también guarda relaciones con los Torrado. Sergio Delgado, su representante legal, le dijo a La Silla que la familia Torrado y su familia son cercanas y que guardan estrechas relaciones personales.
La multa fue solicitada porque la inteventoría comprobó que algunos productos entregados no cumplían las condiciones
Aunque cuando La Silla le preguntó si había tenido algún tipo de relación laboral con Internacional de Negocios (empresa de los Torrado) lo negó inicialmente. Más adelante reconoció que la había asesorado en “temas financieros”.
El 8 de febrero inició la ejecución del contrato, que desde esa fecha ha tenido cuestionamientos.
Además de las denuncias que han salido en medios de comunicación, La Silla habló con la representante de una de las firmas interventoras del contrato, Luz Dennis Ayala, quien dijo que el consorcio ya le radicó a la Gobernación de Santander una solicitud formal para que multe a Surcolombiana y MCD por incosistencias en la entrega de la alimentación escolar.
“La multa fue solicitada porque la inteventoría comprobó que algunos productos entregados no cumplían las condiciones de calorías inicialmente solicitadas, por la entrega de frutas sobremaduradas y porque, entre otros temas, identificamos que arrancaron a operar sin tener todas las manipuladoras”, aseguró Ayala.
Luisa Flórez, la representante de Surcolombiana, respondió que desconoce la solicitud de la interventoría.
“Sé que radicaron unos papeles pero no me han llegado a mí. Estamos en desacuerdo con lo que dice la interventoría, porque venimos haciendo una labor dura en el departamento y hemos cumplido, cuando ha existido algún contratiempo hemos llegado hasta allá para reemplazar lo que sea necesario y responder como debe ser”, concluyó Flórez.
Surcolombiana, el único oferente
La licitación estuvo cuestionada desde que se formuló.
Las condiciones, según las denuncias que se hicieron por Transparencia por Santander y por varios de los interesados en ofertar, fueron tan específicas y en algunos casos “exageradas” que sacaron de tajo a las demás empresas interesadas en competir.
Específicamente, tanto los contratistas como Transparencia hicieron referencia al elevado capital de trabajo que solicitaron (la mitad del presupuesto oficial) y a la clasificación en el RUP de códigos que “no tenían que ver directamente con la entrega de refrigerios”.
Dos representantes legales de empresas que podrían haber participado en el proceso le dijeron a La Silla que desde que inició, la licitación “estaba inclinada” para Surcolombiana.
“Por esa razón no nos presentamos. Las condiciones daban para beneficiar al contratista actual”, le dijo a La Silla uno de los contratistas.
Por su parte, Transparencia por Santander indicó: “El cierre es muestra de que tal y como lo denunciamos, la Gobernación redactó un pliego que no daba garantías a todos los proponentes para presentarse. Elevaremos las denuncias a la Procuraduría y a la Superintendencia de Industria y Comercio por lo que puede ser una práctica anticompetitiva en la Gobernación.
Puede ser una práctica anticompetitiva en la Gobernación
En una visita que hizo La Silla a la bodega de Surcolombiana para corroborar las condiciones en las que están almacenando los alimentos, habló con funcionarios de Surcolombiana, quienes en medio de la conversación señalaron que ya tenían “todo listo y el plan de ejecución para el nuevo contrato que empieza desde el 18”, cuando hasta ayer fue el cierre, y aún falta que desde la Gobernación evalúen la propuesta.
La Silla intentó conocer la versión de Ana de Dios Tarazona, secretaria de Educación de Santander, sobre los señalamientos, pero no obtuvo respuesta.
La propuesta de Surcolombiana para entregar la alimentación fue entregada por Germán Trujillo.
En medio de las denuncias, las relaciones políticas y la contratación cuestionada, sigue estando la alimentación escolar de los niños más vulnerables de Santander.