La encrucijada en el alma de Roberto Gerlein

El súper poderoso senador godo del Atlántico Roberto Gerlein, el más viejo del Congreso y líder de una de las casas políticas más fuertes del Caribe, tiene en veremos su futuro.

A poco menos de dos meses de que se abran las inscripciones para las legislativas y el veterano congresista de 78 años tenga que decidir si se lanza al que sería su doceavo periodo en el Senado, algo que pone en duda por su edad y los quebrantos de salud que vienen con ella (como la isquemia cerebral leve que sufrió hace tres años), no se vislumbra en el horizonte un ‘heredero’ fuerte que asuma las riendas de su poderosa maquinaria. 

En el seno de la familia Gerlein (en donde la otra cabeza es el hermano del legislador: Julio Gerlein como músculo financiero gracias a la constructora Valorcon, una de las firmas contratistas con más negocios en el país) se barajan los nombres de Jorge Gerlein Otálora, su sobrino, quien es hijo del difunto exrepresentante Jorge Gerlein Echeverría, y Alberto Borelly, su yerno, pero ninguno cuenta con la suficiente fuerza política como para ser una apuesta segura. Uno, por estar alejado de la vida pública desde que salió del Concejo de Barranquilla en 2007, y el otro por su reciente ‘ahogada’ en 2015 al tratar de llegar a esa corporación.

Por eso la opción más fuerte para heredar el capital político Gerlein parece ser la representante conservadora Aida Merlano, que con 67 mil votos fue la Cámara más votada de su partido en las pasadas legislativas.

Pero a pesar de llevar 20 años militando en el gerleinismo, no ser una Gerlein de sangre le pesa a Merlano, como ya pasó con su exesposo y hasta hace un año aliado político, el concejal godo Carlos Rojano, quien se perfilaba como sucesor del Senador pero terminó distanciado de ese grupo y de Merlano porque nunca la dieron la 'bendición'.

A esto se le suma que varias de las figuras clave del conservatismo en el Atlántico (como el propio Rojano) se están moviendo hacia la casa Char con miras a 2018, lo que hace aún más determinante la decisión que tome Gerlein frente a su encrucijada del alma.

Aida, la posible heredera más fuerte

Merlano fue la “solución salomónica” que planteó Julio Gerlein a su hermano en una reciente conversación que tuvieron la semana pasada, como nos lo contó un amigo del empresario barranquillero. La idea: promover la fórmula de Aida Merlano al Senado y Jorge Gerlein Jr a la Cámara.

La Representante tiene la firme intención de lanzarse al Senado, como nos lo aseguraron dos fuentes que hacen parte de su grupo político, y la única forma en que desista es que el senador Roberto vuelva a aspirar.

“Ella no va a aceptar ser fórmula de Cámara ni de Jorge ni de Borelly”, nos dijo un allegado que la conoce de años y ha hecho política con ella.

Merlano ha militado durante años junto a la casa Gerlein a la que llegó gracias a la relación de más de 40 años de amistad que su padre Domingo mantiene con Julio Gerlein, como su coordinadora electoral del senador en el sur de Barranquilla.

Fue ella quien sirvió de puente para que el hoy mandamás del Concejo Distrital, Carlos Rojano, llegara a la toldas del gerleinismo, y por esa vía al Partido Conservador, proveniente del movimiento político que lideraba el exalcalde Bernardo ‘el Cura’ Hoyos.

Pese a no seguir casados, Merlano y Rojano mantuvieron una alianza política y de apoyo a Gerlein durante muchos años, que cosechó triunfos electorales como los 15 mil votos que sacó Rojano al Concejo en 2011 (siendo el más votado en esa elección) y los 39 mil con los que ella llegó a la Asamblea ese mismo año, graduándose como la diputada más votada del Atlántico.

Su cercanía es tal que cuando Merlano dió el salto a Cámara en 2014 Rojano fue su jefe de debate. Sin embargo, en las regionales de 2015, Merlano llevó candidatos propios y comenzó a formar un grupo propio aparte de Rojano y del mismo senador Gerlein.

Hoy ella tiene a dos concejales en Barranquilla con aval conservador, Aissar Castro y Juan Carlos Zamora, que se cobijan bajo el paraguas gerleinista pero cuya jefa política es Merlano. También apoyó en Asamblea a Margarita Balén, viuda de Jorge Gerlein, hermano de Roberto y Julio quien fue la fórmula a Cámara del senador de 1992 al 2006; y a Jorge Rangel, quien era el candidato de Rojano.

Después de esa elección, en la que a Rojano también le fue bien porque aumentó a más del doble su votación (34 mil votos), quien fuera la punta de lanza del gerleinismo en Barranquilla se rebeló contra su casa política tras salir señalado de haber ‘ahogado’ a Alberto Borelly, yerno del senador y de ver que no sería él el heredero bendecido para relevar a Gerlein en el Congreso.

Merlano apoyó entonces a su jefe Gerlein y desde entonces se ha distanciado de Rojano, pero sus años de relación política y personal con él le podrían jugar en contra para obtener, ella sí, la unción para llegar al Senado.

La razón es que Rojano decidió retirarse para llevar a su hija (de otro matrimonio) Karina a la Cámara por Cambio Radical, bajo el paraguas de la casa Char. Eso significa que su gran caudal de votos ya no será azul sino vargasllerista. En la casa Gerlein no descartan que, en cualquier momento, lo mismo les pueda hacer Aida debido a que no es familiar.

Pero nadie hoy en la familia Gerlein tiene los mismos bríos con los que Roberto y Jorge hicieron política por casi medio siglo, ni con los que Julio hace negocios, por lo que ahí no hay un claro heredero.

El llamado a continuar con el legado político de su familia sería Jorge Gerlein Otálora, hijo del fallecido exrepresentante Jorge Gerlein Echeverría quien ya pasó por el Concejo entre 2004 y 2007 con aval del Movimiento Conservatismo Independiente.

Sin embargo, desde su paso por el Concejo Jorge no ha vuelto a incursionar en política y más bien se ha dedicado a impulsar proyectos independientes. Dos gerleinistas que consultamos nos dijeron por aparte que ven a Jorge "falto de las aptitudes necesarias para liderar un proyecto político ganador".

Caso similar pasa con Alberto Borelly, a quien definieron las mismas fuentes definieron como “nombrable pero no elegible”.

Administrador de empresas de profesión, él es esposo de Alexandra Gerlein, hija única del senador Roberto. Fue director del liquidado Damab, que era la autoridad ambiental del Distrito, durante la administración del exalcalde Guillermo Hoenigsberg. También fue secretario general durante la primera Gobernación de Eduardo Verano.

Borelly era la carta fuerte de Gerlein para el Concejo en las pasadas regionales, algo que fue visto en la Barranquilla política como una jugada para desmarcarse de Rojano, quien crecía como súper poderoso del Concejo y era cada vez más cercano a Char.

En esa elección fallida contaba con todo el respaldo del senador Gerlein, las representantes conservadoras Inés López y Aida Merlano y la diputada Margarita Balen (Partido Conservador), sin embargo solo le alcanzó para obtener poco más de 6.500 votos, quedando de noveno en una lista azul que logró elegir siete concejales.

De la campaña salió señalado por pecar de confiado y no hacer el trabajo en los barrios con la dedicación necesaria, como nos dijo un miembro de su partido que sí logró elegirse. Su derrota en las locales hoy le juega en contra para recibir el voto de confianza de una aspiración al Congreso.

Anque, de todas maneras la historia política del país y del Caribe ha demostrado que maquinarias como las de Gerlein, cimentadas en años de construir clientelismo y amiguismo, son perfectamente heredables incluso a personas sin el mismo carisma o fuerza que sus antecesores.

Pero este no es el único problema de Gerlein para 2018.

Los godos, cuesta arriba en el Atlántico por causa de los Char

A la real posibilidad de que se vaya Gerlein y su casa política quede en manos de una persona ajena a su familia o de parientes sin peso político, se suma que en el Partido Conservador las cuentas para la lista a la Cámara en el Atlántico no dan para mantener las tres curules que hoy tienen en el Congreso e incluso ponen en duda que puedan elegir ahí a más de un representante.

La proyección de la cifra repartidora para estas elecciones a Cámara ronda los 90 mil votos en ese departamento, algo que para  los conservadores esta vez no será tan fácil debido a que sus fichas fuertes se está moviendo hacia la casa Char.

Los azules, y más en concreto la casa Gerlein, perdieron dos pesos pesados para las venideras elecciones: además de Carlos Rojano (34 mil votos), el exalcalde de Ciénaga (Magdalena) Antonio Zabaraín, quien es el esposo y jefe político de la representante conservadora Inés López (63 mil votos).

Rojano lanzará a su hija por Cambio Radical y Zabaraín se lanzará al Senado también con aval de ese partido. De hecho, su fórmula será la hija de Rojano. Su esposa Inés no repetirá como representante, lo que quiere decir que sus votos se pasan al vargasllerismo.

Además de esto, el senador azul Laureano ‘el Gato volador’ Acuña, otro exgerleinista, se reelegirá por el conservatismo pero él hace rato tiene una llave con los Char y en ese grupo nos contaron que llevará una Cámara informalmente por Cambio Radical.

Puntualmente, como lo hemos contado, ‘el Gato’ sería la fuerza detrás de la aspiración de Modesto Aguilera, una de las cartas de Cambio Radical para la Cámara de Representantes.

En La Silla Caribe intentamos hablar con Gerlein pero no respondió nuestros mensajes. Sin embargo logramos conversar con su yerno Borelly y nos dijo que todavía no hay un pronunciamiento definitivo por parte del Senador sobre su continuidad.

Así que esta novela tendrá un nuevo capítulo cuando Gerlein defina a quién intentará heredarle su veterana curul, como si las sillas en el Congreso fueran propiedad privada, o si volverá él mismo por un periodo más al legislativo, desde el que ha visto pasar a 11 presidentes de la República.  

Su decisión no será menor para su partido y la poderosa casa política que lidera.