La guerra epistolar que desató Santos por Belén de Bajirá

Las últimas dos semanas se desató una pelea epistolar entre los gobernadores de Chocó, Jhoany Palacios y Luis Pérez, de Antioquia, que tienen como remitente al presidente Juan Manuel Santos. Todo por cuenta de la promesa que hizo Santos a los chocoanos luego del paro cívico en agosto de que los acompañaría en su reclamo de recuperar Belén de Bajirá, una pelea limítrofe entre ambos departamentos que ha estado vigente los últimos 16 años.

Belén de Bajirá hoy es un corregimiento de Mutatá (Antioquia) con tierras óptimas para la palma de aceite y yacimientos de oro. Un informe del Agustín Codazzi, que el Congreso pidió este año para definir la pelea, lo volvió a ubicar en el Chocó, pero como municipio. En respuesta, los antioqueños presentaron un proyecto de ley ante el Congreso para que la disputa se defina a través de una consulta popular.

Al proyecto le quedan pocos días de vida, porque tiene que aprobarse en segundo debate antes del 16 de diciembre, el último día de sesiones ordinarias del Congreso.

Y como por ahora, la agenda del Congreso está copada tanto por la reforma tributaria que no ha tenido ni el primer debate y por los proyectos de paz que Santos anunció ayer que radicará la próxima semana, es poco probable que la comisión tenga tiempo para darle trámite al proyecto de Belén de Bajirá.

En medio del afán, el pasado lunes el Gobernador Luis Pérez -que ya se había opuesto a la promesa de Santos públicamente- invitó a desayunar a la Gobernación a la bancada antioqueña en el Congreso. De los 27 congresistas que tiene el departamento asistieron unos 17 (5 senadores y 12 representantes). Y ese mismo día, tras finalizar la reunión, todos los presentes firmaron una carta para pedirle una audiencia al Presidente.

Entre los firmantes aparecen José Obdulio Gaviria y Paola Holguín del Centro Democrático; Luis Fernando Duque del Partido Liberal y Olga Lucía Suárez Mira del Conservador.

“El 16 de diciembre es el último día para resolver el tema, o sino, quedarán en firme el informe del IGAC con sus garrafales errores”, dice la carta, porque, según ellos, no sólo Belén de Bajirá se volverá chocoano, también tres corregimientos de Turbo.

Además, critican al Ministerio del Interior, que según los congresistas paisas es afín a los intereses de los chocoanos.

Curiosamente, ese fue el mismo motivo por el que le protestaron los chocoanos a Santos en otra carta que llegó a su despacho la semana pasada. Según ellos, como el viceministro que quedó encargado del tema de Belén, Luis Ernesto Gómez, es de Medellín, va a favorecer a los paisas en este pleito. Por eso, los líderes del paro cívico también le piden al Presidente que releve al nuevo delegado pues “su imparcialidad podría verse disminuida, es decir que, por sanidad del proceso, debe declararse impedido”.

La última carta en este lío la mandó ayer el gobernador del Chocó, Carlos Alberto Palacios, en respuesta a la de los congresistas antioqueños. Ahí le dice a Santos que también le dé una audiencia para explicarle el tema con más detalle. 

"Se imagina usted, estimado Nobel, la geografía política nacional alterada a diario por la convocatoria de consultas populares para modificar los límites territoriales entre los departamentos y todo el problema social y de estabilidad que trea consigo", le dice Palacios al presidente. 

Mientras las cartas se acumulan en el escritorio de Santos, en el Congreso se va agotando el tiempo para los paisas.