La jugada maestra de los Char que termina de fracturar a la casa Gerlein

Silla Caribe

Álex Char, cabeza del grupo Char; Aída Merlano y Roberto Gerlein.

El poderoso clan Gerlein se reventó y la curul del veterano senador Roberto Gerlein quedó en veremos. El charismo se beneficia.

 

La ‘eterna’ curul que hace casi medio siglo tiene en el Senado el conservador Roberto Gerlein está en veremos. Lo está porque su principal aliado y financiador, su hermano el megacontratista Julio Gerlein, respaldará en las próximas legislativas a la actual representante goda por el Atlántico Aída Merlano, quien aspira a ser senadora.

Además de eso y con el visto bueno de Julio, Merlano acaba de hacer un pacto con la poderosa casa Char para llevar informalmente como fórmula a una candidata a la Cámara del partido de ese grupo: Cambio Radical, con lo cual el charismo se convierte en gran ganador del rompimiento del gerleinismo.

La historia

La historia de esta movida del poder en el Caribe arranca hace unos meses, cuando al veterano Roberto Gerlein comenzó a correrle el reloj para decidir si se lanzaba o no al Senado, a pesar de que ya va a cumplir 80 años y está padeciendo quebrantos de salud (como una isquemia cerebral leve que sufrió hace tres años).

En fila para reemplazarlo estaba Aída Merlano, su fórmula al Congreso y quien lleva 20 años militando en el gerleinismo.

Sin embargo, otra cosa querían Roberto y varios de sus seres queridos (entre los que no estaba su hermano Julio), quienes consideraban que era mejor intentar heredarle la curul a un pariente y así garantizar que la cabeza del grupo siguiera siendo un familiar.

El problema que tuvieron es que no encontraron a ese familiar. Barajaron los nombres de Jorge Gerlein Otálora (sobrino del Senador, hijo del difunto exrepresentante Jorge Gerlein Echeverría) y Alberto Borelly (yerno del Senador), pero se dieron cuenta que ninguno de los dos cuenta con la suficiente fuerza política como para ir a lo seguro, pues el primero se alejó de la vida pública desde que salió del Concejo en 2007 y el segundo se ahogó en 2015 al tratar de llegar a esa corporación.

Frente a eso, Roberto Gerlein le propuso a Aída Merlano cederle el cupo a Senado, siempre y cuando él tuviera la posibilidad de poner el nombre del candidato a la Cámara que fuera en fórmula con ella en el Atlántico.

Según una persona que conoce muy bien por dentro el grupo Gerlein, el nombre que propuso el Senador fue el de Roberto Rodríguez, un político y excandidato a la Alcaldía del pueblo de Baranoa al que definen como “el que le carga el maletín” al Congresista.

Pero Merlano no aceptó y, de hecho, manifestó su intención de ir por el Senado y llevar como fórmula a una política amiga suya llamada Adriana Blanco, lo que terminó de marcar su distancia con el Senador.

El rompimiento de la Representante con el Congresista, no obstante, no se trasladó a la relación de ella con el megacontratista Julio Gerlein, con quien tiene una amistad desde hace varios años.

Según dos fuentes conocedoras distintas, aunque el empresario dueño de la empresa Valorcon maneja la versión oficial de que nada podrá generar una ruptura entre su hermano y él, la idea de Merlano de lanzarse a senadora contó con su respaldo desde el día uno.   

Por su parte, y ante la ausencia del heredero familiar, Roberto Gerlein terminó decidiendo regresar al Senado (lo decidió a principios de septiembre y se inscribió de manera oficial el pasado miércoles) y llevar como fórmula al baranoero Roberto Rodríguez.

Esta situación deja en serios aprietos al Senador, quien sacó 127 mil votos en 2014. No sólo debido a que su gran aliado y financiador por décadas (su hermano Julio) respaldará a Congreso a su ahora competencia, Aída Merlano, sino porque la Representante se está empezando a quedar con varios alfiles importantes del gerleinismo.

Por ejemplo, por ahora están más cerca de apoyarla a ella que a Roberto las cuatro credenciales del gerleinismo en el Atlántico: los concejales de Barranquilla Aissar Castro y Juan Carlos Zamora, y los diputados Margarita Balén y Jorge Luis Rangel.

“Si las elecciones fueran hoy, veo ahogado a Roberto, su estructura y su plata las organizaba y ponía su hermano y ahora éste ya anda en campaña con Aída. Aunque igual hay que esperar”, nos comentó al respecto un importante político de Barranquilla, quien pidió que se omitiera su nombre.

Pero la fractura del otrora resistente matrimonio de los hermanos Gerlein también tendrá su efecto (para bien) sobre la poderosa casa Char, gracias a una jugada de sus líderes.

La jugada del charismo

Dos políticos de la entraña de la casa Char, que han estado en las reuniones privadas en las que se han tocado estos temas, nos contaron por aparte que Aída Merlano y Julio Gerlein se sentaron con ese grupo para pactar la siguiente movida electoral:

Merlano irá a Senado por el Partido Conservador, pero no llevará cámara en el Atlántico por esa colectividad, sino que informalmente (por debajo de la mesa, pues podría estar incurriendo en doble militancia) le pondrá votos a la candidata de Cambio Radical Lilibeth Llinás, hermana del diputado vargasllerista Adalberto Llinás.

Sin embargo, la candidata Llinás (y su estructura) no votará por Merlano, sino por la reelección del senador de Cambio Radical Arturo Char, punta de lanza charista en el Congreso.

A cambio de ello, según las dos fuentes conocedoras, Aída Merlano recibirá de los Char ayuda logística el día de las elecciones, financiación y votos de sus aliados en otros departamentos.

La jugada es maestra porque, de esa manera, los Char garantizan más votos para una de sus cámaras y, al tiempo, debilitan la lista a Cámara del Partido Conservador -y por extensión a Roberto Gerlein-, que dejará de recibir los votos de Aída (quien, con 67 mil respaldos, fue en 2014 la segunda cámara goda más votada del país, después del cordobés David Barguil).

Este modus operandi parece ser el establecido por el charismo para jugar el año entrante en las legislativas, pues tienen acuerdos iguales con los candidatos a Senado Miguel Amín de La U y Laureano ‘el Gato Volador’ Acuña del Conservador.

Según lo cuadrado hasta ahora, Amín le pondrá votos al exalcalde de Malambo Víctor Escorcia y el Gato al exalto funcionario de los gobiernos de los Char en Barranquilla y eterno candidato al Congreso del cacique Fuad Char, Modesto Aguilera. Escorcia y Aguilera buscarán ambos cámara por Cambio Radical y respaldarán a Arturo Char a Senado.

Así es que, por ahora, el panorama actual en el Atlántico con miras a las legislativas de 2018 pinta para ocaso de un otrora indestronable Senador azul y para total disparada del cada vez más gigante clan Char.

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