Al menos tres veces, Santos nombró en Cartagena alcaldes encargados que beneficiaron al grupo de su amigo, el corrupto exsenador Juancho García.
La vergüenza que siente Santos por Cartagena no pasa por los García
En lo que fue su última visita al Caribe como presidente, la semana pasada Juan Manuel Santos anunció en un evento en Cartagena que no nombrará otro alcalde encargado en La Heroica antes de irse, sino que le dejará esta tarea al próximo Gobierno, porque ya le da “vergüenza” seguir designando encargados en esa ciudad.
“Ya me da es vergüenza. ¿Ustedes saben cuántos decretos he firmado en estos siete años nombrando alcaldes en Cartagena? ¡14!, es una vergüenza”, dijo Santos.
Enseguida, medios locales y nacionales replicaron en titulares sus palabras, que fueron en referencia a la crisis institucional que padece Cartagena, que en 2018 sumó 10 mandatarios, entre titulares y encargados, en ocho años.
Lo que Santos -ni nadie- mencionó es que, a lo largo de sus ocho años en el poder, al menos en tres ocasiones nombró en Cartagena alcaldes encargados que beneficiaron políticamente al grupo de su amigo, el exsenador de La U condenado por corrupción, Juan José ‘Juancho’ García Romero.
Esas movidas han ayudado a engordar y fortalecer el clan que García y su esposa (la exsenadora Piedad Zuccardi, en juicio por parapolítica) lideran.
Justamente con esa gasolina, ese grupo ha impulsado a varios de los alcaldes cuestionados que han llevado a la debacle a la ciudad.
En este tiempo, Santos, además, ha consentido a la pareja García Zuccardi con puestos en el Gobierno Nacional y su amistad con ellos es tan cercana, que ha asistido a sancochos y parrandas en su casa en Cartagena.
El primer ejemplo de que ahi en La Heroica ha puesto a gente que les conviene a sus amigos los García es el del fallecido exmandatario encargado Carlos Otero.
Santos lo nombró en 2012, cuando el mandatario electo Campo Elías Terán (hoy también fallecido) enfermó y la Administración cayó en interinidad.
Como lo hemos contado en La Silla, Otero entregó a cercanos a los García 13 de las 19 secretarías del Distrito.
De aquel entonces es recordado en Cartagena un episodio en el que se denunció que ese exmandatario y la entonces directora de Valorización Distrital, llamada Clara Calderón, también vista como cercana a los García, estaban dando vistos buenos a Alianzas Público Privadas para millonarios proyectos de la ciudad, a última hora cuando Otero estaba a punto de dejar el cargo porque ya se iba a posesionar el mandatario elegido en propiedad Dionisio Vélez.
En ese momento, el empresario cartagenero William Murra denunció públicamente que Clara Calderón se había reunido con Juancho García para "orientar" ese proyecto. “En enero fui a visitar a Campo Elías a su apartamento y estando allá escuché que su esposa (Nereida de Terán) recibió una llamada de Clara Calderón en la que ésta le decía que se había reunido con Juan José García para hablar del plan maestro de drenajes pluviajes”, fueron las palabras textuales de Murra en ese momento.
El segundo ejemplo es el del director de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional, Sergio Londoño Zurek, encargado por Santos de la Administración de Cartagena a lo largo de un año (de mayo de 2017 a mayo de 2018, con una interrupción de un mes), cuando cayó suspendido y luego preso el titular Manolo Duque, quien llegó respaldado por los García y aún está detenido por presunta corrupción.
Como lo contamos en La Silla Caribe, cuando se presentó la ausencia de Manolo, Juancho García se movió en Presidencia para que le dieran ese encargo a un aliado suyo.
Al final, sin embargo, Santos designó a Londoño, quien no era una ficha de los García, sino más bien un alfil de la entraña del Primer Mandatario.
Londoño, de hecho, fue clave para sacar de una empresa importante del Distrito, de la cual él como mandatario (e) era parte de su junta directiva, a un exfuncionario que tenía vasos comunicantes y era visto como de Juancho García: a Alfredo Bula Dumar, exdirector de la Empresa de Desarrollo Urbano de Bolívar Edurbe.
Pero, también, casi al momento de lo de Bula, ese Alcalde llevó al gabinete a una vieja aliada de la casa García Zuccardi: a Clara Calderón, la exdirectora de Valorización Distrital de la época de Campo Elías Terán, a quien nombró como su secretaria de Infraestructura.
En su momento, Sergio Londoño nos aseguró que el nombramiento de Calderón nada tenía que ver con política, sino que lo hizo porque la considera una profesional brillante.
Esa funcionaria, no obstante, está tan conectada con los García, que no sólo fue su ficha en los gobiernos de Campo Elías y Carlos Otero, sino que también fue candidata al Concejo con aval de la ASI y el respaldo de ese clan.
Y el tercer, y más reciente, ejemplo es el de la mandataria encargada actual, Yolanda Wong, nombrada por el Presidente en junio pasado, tras la suspensión temporal del titular Quinto Guerra, dentro de un proceso de demanda de nulidad electoral interpuesta por la Procuraduría.
El cuestionado Quinto, sobre quien el Ministerio Público asegura que estaba inhabilitado cuando se inscribió como candidato, también llegó apoyado por la casa García.
Como también lo contamos, la versión oficial en el alto Gobierno es que Yolanda Wong -quien venía de ser secretaria de despacho de Sergio Londoño- fue recomendada para el encargo justamente por Londoño, quien la considera una buena funcionaria.
Más allá de eso, Wong tiene estrechos vínculos con Juancho García.
Se hicieron cercanos políticamente en la Administración de Manolo Duque, que ambos respaldaron, y este año el lazo se evidenció aún más cuando en las legislativas del pasado 11 de marzo ella prefirió votar por el hijo y heredero político de Juancho al Senado (el senador de La U Andrés García Zuccardi) que por la saliente senadora Sandra Villadiego, esposa de su otrora mentor: el exsenador condenado por parapolítica Miguel Rangel.
Cuando Santos la designó, una fuente dateada de Cartagena nos aseguró: “Yolanda no es del bolsillo de Juancho García, ella tiene un peso propio, de hecho Sergio (Londoño) la nombra Secretaria por su peso y su trabajo, pero Juancho, que sigue controlando la Alcaldía, sí la considera una aliada firme”.
Dado que Santos pidió al Partido Conservador (que avaló al suspendido Quinto Guerra) que, como es su derecho por ley, presente una terna para escoger de ahí a un designado, y anunció que le dejaría esa tarea al próximo Gobierno, lo más probable es que Wong salga ahora que se posesione el presidente electo Iván Duque.
Habrá que ver si, con Duque, los García siguen teniendo tanta suerte con los encargos que hoy avergüenzan a Santos.