Aunque son varias las dudas de concejales que no son de oposición, dos en particular hacen difícil que el Concejo la apruebe.
Las críticas a la valorización de Peñalosa son de fondo
Este lunes la gerente del IDU, Yaneth Mantilla, defendió en el Concejo el proyecto del alcalde Enrique Peñalosa para cobrar valorización a más de 400 mil predios de la ciudad para hacer 40 obras puntuales y una gran reparación de las calles de la Zona Industrial. Ese proyecto arrancó con pie izquierdo porque incluso antes de que Peñalosa lo presentara se opusieron los concejales uribistas, que forman parte de su coalición de Gobierno. Desde entonces otras voces se les han sumado.
Al revisar las críticas concretas de los concejales que más se han metido a estudiarlo y que suelen votar con Peñalosa (el uribista Andrés Forero; José David Castellanos, de Cambio Radical; y Emel Rojas, de Libres y quien no es de la coalición pero suele acompañarla) queda claro que hay problemas técnicos que podrían ser mejorados ajustando el texto en el Concejo.
Pero también presentan dos grandes dudas que no se pueden solucionar en el Concejo y que podrían hundirlo: qué sentido tiene cobrar valorización cuando hay obras que se debían hacer por valorizaciones anteriores que siguen sin hacerse, y si los bogotanos siguen teniendo la capacidad para pagarlas.
Por esas dos grandes críticas la Alcaldía requirirá de mucha capacidad de convencimiento para que el Concejo acepte darle más plata para hacer obras (a lo que ya se comprometió indirectamente al aprobar el Plan de Desarrollo que las incluye), esta vez metiéndose directamente con el bolsillo de sus electores en años electorales.
Estas son las críticas, las respuestas del IDU a ellas y la conclusión al enfrentarlas.
¿Se debería cobrar ya?
Crítica: No se debería cobrar mientras haya problemas previos
Andrés Forero
José David Castellanos
Decenas de obras de valorizaciones anteriores no se han terminado, y no tiene sentido cobrarle a los contribuyentes una nueva para otras obras. En algunos casos se trata de obras en el mismo lugar, como el cobro por una cicloruta por la carrera 15, entre calles 100 y 127, donde no se han entregado los andenes por los que se cobró valorización en 2005; en otros zonas donde hay obras que no han iniciado, como la Avenida la Sirena (calle 153) entre carreras 9 y 19, que viene de la valorización de 2005 y no se ha empezado a construir.
Respuesta: Las obras se necesitan ya
Instituto de Desarrollo Urbano
Para cumplir con el plan de obras del Plan de Desarrollo se necesitan diferentes fuentes de recursos, incluida la valorización, como dice el mismo Plan. Esperar hasta finalizar las obras de las valorizaciones anteriores (algunas se deben terminar en 2018 o 2019) no permitiría cumplir con el Plan de Desarrollo.
Explicación
El dilema entre hacer obras que se necesitan y postergarse hasta terminar las anteriores es un tema político más que técnico, pues aunque se puede cobrar, le quita legitimidad entre quienes han pagado una o dos valorizaciones, no han visto las obras y les cobran de nuevo. Aunque eso puede mejorarse si Peñalosa logra entregar las obras pendientes de antes y ejecuta bien las de la nueva valorización (pero si no lo hace puede ahondarse la crisis de credibilidad del Distrito y empeorar aún más su imagen), el problema político se mantiene.
Esta pregunta puede hundir todo el proyecto porque para un alcalde que quiere hacer obras, tiene imagen baja y tiene obsesión por ejecutar, es más importante hacerlo que perder capital político. Pero para los concejales, que tienen aliados que buscarán llegar o reelegirse en el Congreso en marzo (dos meses después de que llegue el cobro) y aspiraciones propias para las elecciones locales de 2019, el costo de apoyarlo puede ser muy alto. Más porque es seguirle dando carta blanca para gastar plata a un alcalde que enfrenta una revocatoria.
Por eso, esta duda no se puede superar en el Concejo con cambios al proyecto.
¿Su administración va a ser muy costosa?
Crítica: Su administración va a costar lo mismo que todo el sector planeación
Andrés Forero
Según el proyecto, de los 1,27 billones que espera recoger el Distrito, 102 mil millones se irán en administración. En contraste, todo el sector de Hacienda tiene 266 mil millones de pesos para el cuatrienio de Peñalosa, y con esa plata va a recoger 31,5 billones de pesos de impuestos como predial, industria y comercio y vehículos. Por eso, la valorización es muy ineficiente.
Respuesta: El porcentaje es muy bajo
Instituto de Desarrollo Urbano
La comparación hecha por el Concejal no es adecuada. La Secretaría de Hacienda tiene capacidad instalada para el recaudo de los demás tributos distritales, recaudo que se efectúa cada año. El Instituto de Desarrollo Urbano recauda la Contribución Especial de Valorización en promedio cada 4 años y con cada cobro debe financiar el operativo que permita el cobro y la correcta atención a la ciudadanía.
La norma permitiría que usar hasta el 30% del recaudo para administración, está vez será sólo el 8%. Y ese porcentaje se usará para enviar periódicamente las cuentas de cobro de los ciudadanos que decidan pagar en cuotas hasta durante cinco años y las iniciales a los 416 mil contribuyentes, atenderlos en el Cade y los Supercades y tener un equipo técnico para resolver los recursos que pongan los contribuyentes contra esas cuentas, como permite la ley.
Explicación
Aunque es cierto que la ley permite gastar un porcentaje más alto, y por lo tanto la administración podría legalmente incluso cobrar más, eso no quiere decir que la valorización sea eficiente. De hecho, en general un costo de administración del 30 por ciento para un impuesto es alto, y ese es uno de los motivos por los que los cobros de valorización suelen ser criticados en otras ciudades. Por eso, el problema es más de la valorización misma que de este proyecto.
¿Tiene sentido tener en cuenta los estratos?
Crítica: Los estratos están mandados a recoger según Peñalosa, pero ahora los usa
Andrés Forero
La exposición de motivos del proyecto de simplificación tributaria que presentó la administración el año pasado crítica los estratos hasta el punto de decir que "el estrato ya dejó de ser un buen indicador de ingreso y de riqueza". Además, el estudio que presenta la administración para sustentar que los bogotanos sí pueden pagar esta valorización dice que los estratos están tan desactualizados que "en el 2014 el 5% de los hogares de mayor ingreso (decil 10) están en estrato 2, y el 31% pertenecen al estrato 3".
Respuesta: Los estratos no son parte de la fórmula
Instituto de Desarrollo Urbano
El método de distribución denominado distancia-precio hace uso de dos factores: 1.- distancia a la obra más cercana y 2.-avalúo catastral del predio; por lo tanto, no se tiene en cuenta el estrato en la determinación de la contribución. La exclusión de estratos 1, 2 y 3 responde al estudio de capacidad de pago que está basado en la encuesta multipropósito que tiene representatividad a ese nivel y el índice de capacidad de pago se construye con base en la estructura de ingresos y gastos de los hogares. Se equivoca el Concejal al afirmar que se usa el estrato como unidad de medida de riqueza.
Explicación
Efectivamente los estratos no son parte de la fórmula pero la administración sí saca a los dueños de lotes de estrato 3, por lo que sí los tiene en cuenta y le da valor como medida para saber quién tiene capacidad de pago. Por eso sí es contradictorio con los argumentos de la misma administración, y los de la mayoría de técnicos de cuestiones de riquezas, que vienen argumentando que deberían eliminarse para los servicios públicos (que fue para lo que se crearon) y reemplazarlos por medidas que tengan que ver con la riqueza de las personas y no con las condiciones del barrio de sus inmuebles.
El problema es que no hay tiempo ni recursos para tener esos datos y ajustar el proyecto actual en ese sentido.
¿Es acertada la fórmula para definir a quién cobrar y cuánto?
Crítica: La fórmula es muy vaga y se presta para inequidades
Andrés Forero
La valorización se cobra a los dueños de los inmuebles cercanos a las obras, pero en este caso la definición de quiénes son dueños es muy amplia. Según los anexos del proyecto se incluyeron todos los que estuvieran a 1,5 kilómetros o menos de cualquiera de las obras, sin diferenciar si son calles, andenes, parques o ciclorrutas, a pesar de que el efecto sobre el precio es muy distinto.
Respuesta: La fórmula es la mejor
Instituto de Desarrollo Urbano
El método que se usa, y que se llama "distancia precio", tiene dos factores: la distancia a la obra más cercana y el avalúo catastral del predio. Es más sencillo que el que se usó en las valorizacion anterior y que tenía 5 factores y, según una evaluación de la Procuraduría General en 2011, es el mejor método cuando tiene unos ajustes que se incluyeron en este Acuerdo.
Adicionalmente, si bien la exposición de motivos define 1.5 kilómetros como distancia máxima, en realidad, según el IDU, el 71% de los predios están entre 1 y 500 metros de distancia a la obra más cercana, un 25% adicional entre 500 metros y 1000 metros y el 4% restante entre 1000 y 1500 metros que corresponden a los predios más alejados y cuyas contribuciones son proporcionalmente las más reducidas
Explicación
El método tiene sentido, porque las casas y apartamentos más cercanos a las obras son las que más se benefician de ellas. Pero como efectivamente no distingue el tipo de obra, pueden pagar más plata predios que reciban menos beneficios. Eso se podría ajustar con una fórmula más precisa en el trámite en el Concejo.
¿Hay que actualizar antes el estatuto de valorización?
Crítica: Las reglas generales para cobrar valorización están viejas
José David Castellanos
El estatuto valorización de Bogotá es de 1987 y no se actualiza desde 1991. Eso hace que no incluya el aprendizaje de las tres valorizaciones que se han hecho y que la nueva tenga riesgos como no hacer o no terminar las obras, como ha pasado antes. Por eso habría que ajustarlo antes de pasar una nueva valorización.
Respuesta: No hay que actualizarlo
Instituto de Desarrollo Urbano
Para el IDU el estatuto de valorización es la guía y sí da todos los insumos técnicos (explica el sistema de pago y los métodos para definir el monto) necesarios para estructurar un acuerdo de valorización.
Explicación
Como el estatuto es de antes de la Constitución de 1991, seguramente es deseable actualizarlo. Pero con el actual sí se puede cobrar la valorización actual.
¿El proyecto sí estudia bien la capacidad de pago de los contribuyentes?
Crítica: El estudio que dice que sí se puede cobrar está desactualizado
Andrés Forero
Emel Rojas
El argumento de la Administración para demostrar la capacidad de pago es un estudio que publicó la secretaría de Planeación el año pasado y que hicieron Proes y Teknidata desde 2014, contratados por la administración de Gustavo Petro. El problema es que sus datos están desactualizados, como de hecho muestra su título: "Avances sociales en Bogotá y municipios aledaños entre 2011 y 2014". El estudio parte de una encuesta multipropósito de 2014, que según los concejales seguramente está desactualizada después de la alta inflación del 2016 y la desaceleración económica.
Además, el estudio dice que "el 19.93% de los hogares de la ciudad no cuentan con capacidad de pago para suplir su canasta mínima de bienes básicos para 2014", es decir, que en cuatro de cada cinco hogares sí había capacidad de comprar cosas más allá de lo básico o de ahorrar, pero no necesariamente para pagar hasta cinco millones de pesos por valorización.
Rojas también recuerda que la Corte Constitucional y el Estatuto Nacional de Valorización han dicho que a la hora de cobrar la valorización debe tenerse en cuenta la capacidad de pago, por lo que a su juicio hay que mirar la capacidad de cada contribuyente y no el valor de su inmueble. Por ejemplo, recuerda que una persona de la que no depende nadie y tiene 10 predios de estrato 3 no pagaría valorización, mientras una madre cabeza de familia con varios hijos y un pequeño apartamento de estrato 4 sí tendría que hacerlo.
Respuesta: Sí hay un estudio actual que tiene en cuenta la capacidad de pago
Instituto de Desarrollo Urbano
La Contribución Especial de Valorización es el único tributo en el país que presenta un estudio de capacidad de pago y su monto se define a través del método de distribución que establece la ley. El estudio de capacidad de pago es una herramienta que permite sustentar exclusiones y facilidades de pago para ayudar a los contribuyentes. El IDU hizo un estudio técnico que sí define la capacidad de pago y por eso excluyó de la valorización a los propietarios de estratos 1,2 y 3. Además, es la primera vez que se elabora para Bogotá con reconocimiento en el Distrito, por lo que sí hay sustentos para cobrar.
Además, las facturas llegarían en enero de 2018 y habría 8 meses para hacer el primer pago (agosto de 2018), lo que le deja tiempo a los dueños para ahorrar.
Encima, podrán pagar por cuotas hasta por 5 años sin intereses, o tendrán una disminución del 10% por pronto pago.
Explicación
La crítica tiene dos argumentos de peso que se sostienen.
Uno es la necesidad de mirar la capacidad de pago de los dueños de cada predio para que éste sea equitativo. Al respecto mismo proyecto reconoce que hay un problema, pues en su exposición de motivos dice que no hay cómo medirlo en detalle y que hacerlo sería muy costoso, y que por eso lo que se hacen son "aproximaciones aceptables a la capacidad de pago", que pueden ser estadísticamente sólidas pero dejan lugar a margen de error.
El segundo es el de la desactualización del estudio, que es real pero que tiene como contrapeso que es el más reciente.
Tener unos datos más detallados y actuales requeriría invertir más plata en la administración de la valorización, algo muy difícil de lograr. Pero como la duda queda, y seguramente habrá casos en los que los dueños de inmuebles no tienen con qué pagar, las críticas sí señalan un problema real.
Por eso, esta crítica es otra que no se puede eliminar en el trámite del proyecto en el Concejo.
¿Todavía pueden cambiar las obras?
Crítica: El proyecto permite al alcalde cambiar elementos de la valorización en el futuro
Emel Rojas
Deja dudas sobre si todas las obras están bien proyectadas, porque Peñalosa pide facultades extraordinarias para poder modificar por Decreto todo lo que sea aprobado por el Concejo. Es decir que la Administración podría modificar las zonas o áreas de influencia, la cantidad de plata que piensa recoger o las obras a financiar.
Respuesta: Los cambios posibles son marginales
Instituto de Desarrollo Urbano
El proyecto sí permite a la administración hacer cambios pero no en cuánto va a cobrar ni en qué obras están incluidas en la valorización. El cambio es para modificar detalles menores, como el material o ubicación de una reja, y es normal porque los proyectos hoy no tienen estudios de diseños y al conocerlos pueden cambiar sus detalles de ese tipo.
Explicación
Las obras sí pueden cambiar en su contenido pero no es su descripción general. Por ejemplo, la construcción del parque sobre el Canal Boyacá entre la calle 26 y la Avenida la Esperanza se debe hacer, pero se puede construir una plazoleta con juegos infantiles o no.
También se puede cambiar el costo de las obras pero no el "monto distribuible", es decir, el valor total de la bolsa de todas las obras. Eso quiere decir que una obra en concreto puede pasar a valer más (o menos) pero la plata que falte (o sobre) debe venir de otra obra del paquete (o ir).
Al final, sí hay un margen importante de cambio pero las obras en general están definidas. así que la crítica es exagerada. Y, en todo caso, si hay alguna duda el Concejo podría ajustar la redsdacción del artículo o incluso reducir el margen de cambios en el futuro.
¿Impacta a la economía por motivos psicológicos?
Crítica: Un nuevo tributo en vacas flacas es una mala señal
José David Castellanos
Más allá del costo efectivo de la valorización, anunciar que viene una cuando los hogares ya están dando señales de gastar menos puede afectar toda la economía de la ciudad, porque se suma a otros como la inflación o al crecimiento reducido para que los bogotanos sientan que hay que medirse mucho. Y sin consumo la economía no crece.
Respuesta: No impacta porque el cobro es limitado
Instituto de Desarrollo Urbano
No hay que perder de vista que esta Contribución recae únicamente sobre los propietarios de predios de la ciudad y hoy solamente cerca del 48% de los hogares de la ciudad son dueños de todos los predios de Bogotá, es decir, 52% de los hogares no se verían afectados.
Explicación
Esta crítica es difícil de medir, porque el impacto puede variar entre hogares.
Sin embargo, sí es cierto que el aviso de nuevos tributos puede empeorar el panorama económico, aunque estudios como los de Charles Steindel muestran que el impacto se siente más a la hora del pago que a la hora del anuncio del impuesto. En todo caso, es difícil medir su impacto preciso, y compensarlo con el aumento en la economía cuando el Distrito contrató las obras (lo que igual se demora varios meses)
En todo caso, esta crítica no se puede aliminar en el trámite en el Concejo.