Clanes políticos que hace cuatro años jugaban en el PIN -ahora convertido en Opción Ciudadana- ahora están trabajando para acrecentar el caudal liberal en el Valle del Cauca y Santander.
Lo que perdió el PIN, lo recogen los liberales
Clanes políticos que hace cuatro años jugaban en el PIN -ahora convertido en Opción Ciudadana- ahora están trabajando para acrecentar el caudal liberal en el Valle del Cauca y Santander, los dos fortines del PIN.
Hace unos días Las 2 Orillas contó que la cabeza de la lista liberal al Senado, el cacique rojo Horacio Serpa, había aceptado el apoyo de Juan Carlos Abadía, ex gobernador del Valle y otrora capataz del antiguo PIN en el Valle del Cauca.
Días después en una emisora local de Bucaramanga Serpa no lo negó. Dijo que sí había conversado con Abadía, quien le manifestó que “sectores amigos” querían acompañar su candidatura porque se consideraban liberales y Serpa, según dijo él mismo, lo recibió sin ningún inconveniente. Este es un giro radical frente a 2011, cuando el liberalismo dirigido por Rafael Pardo no dejó que el grupo de Abadía se ‘reencauchara’ dentro del Partido Liberal en las elecciones locales.
También en el Valle, el grupo político del representante Juan Carlos Salazar, quien en 2010 ganó una curul en la Cámara con 24.785 votos por el PIN, ahora compite en el liberalismo con la hermana de Salazar, María Elena, de candidata.
Finalmente, el representante del PIN por Santander, Didier Tavera - excandidato a la gobernación de ese departamento en 2007 por Convergencia Ciudadana, cuando Horacio Serpa ganó, y quien no busca la reelección -, le dijo a La Silla que le ha pedido a sus amigos que acompañen las candidaturas de Horacio Serpa, Jaime Durán y Honorio Galvis, tres santandereanos aspirantes al Senado por el Partido Liberal.
Tavera dice que aunque cometió “errores en el pasado, de pronto por juventud”, haciendo referencia a su paso por el antiguo PIN, sus primeros pasos fueron de trapo rojo en el nuevo liberalismo de Luis Carlos Galán. En los corrillos locales Tavera suena como el más seguro candidato del liberalismo para recuperar la gobernación de Santander, hoy en manos de Richard Aguilar (hijo del parapolítico Hugo Aguilar, a su vez padrino electoral de Tavera hasta hace unos años).