Los parques nacionales ya no dependen del Ministerio de Minas
Hasta el momento casi todos los análisis de la caída del Código Minero se han centrado en sus efectos negativos. Sin embargo, hay un posible efecto que ha pasado desapercibido y que ha generado cierto optimismo entre los ambientalistas: al entrar de nuevo en vigencia el viejo código de minas del 2001 en dos semanas, se caería también el trámite que debe hacer el Ministerio de Ambiente con su par de Minas antes de declarar cualquier parque natural o humedal con categoría Ramsar.
El punto no es tanto que fuera obligatorio consultar a la cartera de Federico Renjifo, sino que ésta se estaba demorando hasta dos años en emitir su concepto previo que no era vinculante. Eso frenó importantes proyectos como la protección de la Estrella Fluvial del Inírida, que se demoró dos años.
El primer beneficiario podría ser el Parque Nacional Chiribiquete, cuya área quiere duplicar el Ministerio de Ambiente hasta los 27.808 kilómetros cuadrados. Con ese cambio el mayor parque nacional de Colombia quedaría del tamaño de Haití, y pasaría a convertirse en el segundo parque natural más grande de toda la Amazonía, superado por los 38.874 kilómetros cuadrados de Tumucumaque en la frontera de Brasil con Surinam y Guayana Francesa.