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De los 11 militares que sacó el Ministro de Defensa, cinco tenían relación con el escándalo de las Carpetas Secretas. Otros no parecen vinculados, y hay otros militares mencionados por Semana e investigados por la Corte o la Procuraduría que siguen activos.
Mañana el Ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, la Ministra del Interior, Alicia Arango, y la cúpula militar, tendrán que responder ante el Congreso en un debate de control político por el escándalo de ‘Las carpetas secretas’ en el Ejército reveladas por la revista Semana hace unos días.
El Ministro no ha querido explicar por qué fueron estos 11 militares llamados a calificar servicios y tampoco si su salida está relacionada con el escándalo revelado por la revista Semana.
Tras investigar sus perfiles, parece claro que de los 11 que salieron, cinco tenían relación con el escándalo de las Carpetas Secretas. Otros que salieron no parecen vinculados, y hay otros militares mencionados por Semana e investigados por la Corte o la Procuraduría que siguen activos.
Varios de los involucrados habían sido ascendidos meses, o incluso días antes de que estallara el primer escándalo en diciembre de 2019. Desde entonces, más de uno había sido relocalizado a puestos de menor visibilidad.
El general Nicacio Martínez, quien lideraba el Ejército cuando estos escándalos sucedieron, luego de presentar su renuncia en diciembre “por motivos personales” a raíz de las denuncias de Semana, no solo recibió un sentido homenaje de despedida del presidente Duque sino que fue nombrado como agregado militar en la Otan, un codiciado cargo diplomático ante la organización militar más importante del mundo.
Solo cuando la revista publicó la nueva portada de “Las Carpetas Secretas”, que involucraba el perfilamiento durante su comandancia de corresponsales estadounidenses en Colombia, incluido el del The New York Times, el Gobierno reversó su nombramiento. Y la Fiscalía lo llamó a interrogatorio.
Estos son los relacionados con el escándalo que llamaron a calificar servicios; los que salieron y no tenían un aparente vínculo con las Carpetas; y algunos de los mencionados que siguen activos:
General Eduardo Quirós
Quién es:
Con 35 años de trayectoria en la Fuerza Pública, Quirós fue nombrado por el general Nicacio Martínez en diciembre de 2018 como Jefe del Comando de Apoyo de Combate de Contrainteligencia Militar del Ejército.
Cuál es su rol en las Carpetas Secretas
Quirós se queda en la jefatura de ese Comando hasta julio de 2019. Es decir, dura seis meses en uno de los cargos clave señalados en ‘Las Carpetas Secretas’ de perfilar, entre febrero del año pasado y diciembre, a 130 ciudadanos, entre periodistas, corresponsales extranjeros y políticos, entre otros.
Qué le sucedió desde que arrancó el escándalo
Quirós aparece salpicado por primera vez en dos portadas que Semana sacó a raíz de la investigación publicada en mayo de 2019 por el periodista Nick Casey en The New York Times sobre la directiva del Ejército que creaba incentivos similares a los que desencadenaron los falsos positivos.
Una fue ‘Operación Silencio’, en la que contaba cómo oficiales y suboficiales de Contrainteligencia, que dependían de Quirós, entrevistaron con polígrafo a 14 militares para saber quiénes le habían contado a los medios sobre esas directrices que exigían doblar los resultados en el Ejército; la otra fue ‘Ovejas Negras’, en la que fuentes militares aseguraron que Quirós ofreció recompensas de 100 millones de pesos a “el que me traiga quiénes son los que están filtrando la información de lo que está saliendo en prensa”, decía una fuente militar.
Después de aparecer salpicado en ambas portadas, en julio de 2019, Martínez lo trasladó a un cargo de escritorio y de bajo perfil en el CEDE3, que es un departamento encargado, en palabras del Ejército, de “asesorar y mantener informado al comandante del Ejército y al jefe de Estado Mayor en todo lo relacionado con las operaciones militares que se adelantan en el territorio nacional”.
“No lo botaron cuando ya había demasiado ruido a su alrededor y lo nombraron ahí para protegerlo”, dijo a La Silla una fuente que conoce el caso por dentro y que nos explicó que desde ahí Quirós siguió teniendo acceso a la inteligencia militar por su cargo.
En ese puesto se quedó, pese a que la Procuraduría lo llamó a juicio disciplinario en agosto, un mes después de que llegara al CEDE3, por su posible extralimitación en sus labores de inteligencia relacionadas con las denuncias publicadas por Semana.
Esa investigación, según nos confirmaron en la Procuraduría, está en práctica de pruebas pero se encuentra suspendida por el coronavirus.
Con la llegada del general Eduardo Enrique Zapateiro a finales de diciembre del año pasado, Quirós mantuvo su cargo de escritorio, hasta que, a raíz de este nuevo escándalo, lo llamaron a calificar servicios.
Gonzalo Ernesto García Luna
Quién es:
El general García Luna llevaba más de treinta años en el Ejército.
Un dato de su vida que ha salido a flote ahora es que pasó por el Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, justo cuando el organismo de inteligencia fue el epicentro de las famosas chuzadas durante el Gobierno Uribe. En concreto, García fue director de Inteligencia del DAS entre enero y noviembre de 2003, como contó El Espectador. Llegó ahí por una comisión de servicios del comando general del Ejército, en esa época dirigido por el general Carlos Ospina Ovalle.
En enero de 2019, fue nombrado por Nicacio Martínez como jefe de Inteligencia hasta junio de 2019. Luego pasó a ser jefe de Inteligencia y Contrainteligencia y ahí se queda hasta diciembre de 2019, cuando pasa a ser el Jefe del Departamento Conjunto de Inteligencia y Contrainteligencia del comando general de las Fuerzas Militares.
Es decir, sale de la línea de mando del nuevo comandante del Ejército, Eduardo Enrique Zapateiro, y pasa a depender directamente del comandante general de las Fuerzas, el general Luis Fernando Navarro.
Cuál es su rol en las carpetas secretas:
Al ser jefe de Inteligencia del Ejército entre enero y junio de 2019 y luego jefe de Inteligencia y Contrainteligencia en reemplazo de Quirós, García pasó por los dos cargos claves en todo el escándalo de las carpetas, pues desde los batallones que le reportaban a estos departamentos es que se hicieron los perfilamientos.
Aunque no tiene ninguna investigación en su contra, tuvo, como mínimo, una falla de control de sus subalternos.
Qué le sucedió desde que arrancó el escándalo
García nunca fue mencionado en los escándalos. Sin embargo, según la investigación de Semana, los perfilamientos comenzaron en febrero de 2019 cuando él era el Jefe de Inteligencia, con mando sobre el batallón responsable de estos seguimientos ilegales.
Cuando el nombre del general Quirós salió salpicado en junio de 2019, Nicacio Martínez le asignó a García Luna la responsabilidad adicional de reemplazarlo, convirtiéndose también Jefe de Contrainteligencia.
Ahí se queda hasta diciembre de 2019, cuando después del escándalo de Semana, pasa a ser el Jefe del Departamento Conjunto de Inteligencia y Contrainteligencia del comando general de las Fuerzas Militares, que es un cargo administrativo, de bajo perfil para pasar la tormenta.
Coronel Milton Eugenio Rozo
Quién es:
Rozo era el comandante del Batallón de Ciberinteligencia 1 y quien atendió la diligencia cuando la Corte Suprema de Justicia allanó ese batallón a finales de diciembre en Facatativá para establecer si había relación entre el expresidente y senador Álvaro Uribe y las actividades ilegales del hacker Andrés Sepúlveda.
En dicho allanamiento, según reveló Semana, se llevaron varias memorias y discos duros en los que había perfilamientos y celulares, incluído el de Rozo, que entregó primero su celular de trabajo y al final lograron agarrarle el celular personal. En ese allanamiento, La Silla supo que encontraron una gran parte de las Carpetas Secretas del último escándalo.
Cuál es su rol en las Carpetas Secretas
Según Semana, “Rozo fue uno de los encargados de pagarle a un supuesto periodista muy conocido por tener procesos judiciales por golpear mujeres, para que publicara cosas falsas, amañadas, sacadas de estos perfiles”.
Gustavo Rugeles, el bloguero investigado penalmente por golpear a su pareja, y director de ElExpediente.com, sacó un comunicado negando haber recibido pago alguno de agentes de inteligencia para perjudicar a terceros.
Qué le sucedió desde que arrancó el escándalo
Rozo fue mencionado en un escándalo por primera vez en la carátula de las Carpetas Secretas. Once días antes del allanamiento al ciberbatallón en diciembre, Rozo había sido ascendido a coronel el 7 de diciembre, estando Martínez de comandante.
Coroneles Juan Pablo Prado y Hugo Armando Díaz Hernández
Quiénes son:
Ambos hacían parte del Batallón de Ciberinteligencia.
Cuál es su rol en las Carpetas Secretas:
Desde sus batallones también se construyeron los perfilamientos.
Qué les sucedió desde que arrancó el escándalo:
Ni Prado ni Díaz fueron mencionados en el escándalo de Semana de los perfilamientos que ocurrieron entre febrero y diciembre del año pasado. En diciembre de 2019, Díaz Hernández había sido ascendido a coronel, días antes de la salida de Nicacio Martínez que coincidió con la publicación de Semana. Y cuatro meses después, terminó su carrera cuando lo llamaron a calificar servicios la semana pasada.
Coronel Juan Esteban Zapata
Quién es:
Era agregado militar en la embajada de Colombia en Washington y antes de eso fue comandante de la Brigada de Inteligencia Militar 1, que es una de las unidades que habría estado involucrada en los perfilamientos.
El Tiempo contó que el 3 de mayo le notificaron que se daba por terminada su comisión diplomática y fue llamado a calificar servicios, aunque no aparece entre los once que inicialmente salieron.
Cuál es su rol en las Carpetas Secretas
Antes de ser enviado a Washington, fue comandante de la Brigada de Inteligencia Militar 1, que es una de las unidades que presuntamente habría estado involucrada en los perfilamientos.
Qué le sucedió desde que arrancó el escándalo
El 11 de enero de 2019, estando Nicacio Martínez de comandante y antes de que arrancara el escándalo de las carpetas, el presidente Iván Duque le dio la orden de Boyacá.
Después de ser comandante de la cuestionada brigada de inteligencia, lo premiaron con la agregaduría en Washington.
Entre los que fueron llamados a calificar servicios, hay cuatro que, según cuatro fuentes consultadas por La Silla, no parecieran tener relación con las Carpetas Secretas. Hay dos mayores y dos coroneles. Uno es el coronel Helmont René Ramos, que era oficial de inteliencia de la Fuerza de Tarea Vulcano, que cubre la región del Catatumbo y quien estuvo a punto de salir del Ejército en noviembre de 2018 por investigaciones en su contra diferentes a los seguimientos ilegales y perfilamientos. Pero cuando llegó la nueva cúpula militar, comandada por Martínez, revisaron su caso, como lo muestra este documento.
Al final, fue reintegrado al Ejército en mayo de 2019, pero según una fuente que lo sabe de primera mano Ramos no estaría metido en el escándalo, pese a que sí tenía investigaciones por otras cosas, como la de 2018, por la que casi sale, pero no por perfilamientos. El otro coronel es Julio Tobías López Cuadros, pero La Silla no pudo obtener información detallada sobre este coronel porque las tres fuentes que consultamos nos dijeron que nunca lo habían oído mencionar y que por eso, dudaban que tuviera que ver con el escándalo de las carpetas, que ellos sí conocen bien.
Luego de haber allanado el 18 de diciembre las instalaciones del Batallón de Ciberinteligencia, la Corte Suprema citó a versión a varios militares. De esos, sólo hay dos que coinciden con los recién retirados por el ministro de Defensa: el coronel Milton Rozo (el señalado por Semana de pagar por historias periodísticas) y el mayor Eduardo de la Torre.
De resto, hay otros cuatro tenientes coroneles, tres capitanes y cuatro sargentos citados a versión ante la Corte que por ahora el Gobierno no ha tocado. Falta ver si entrarán en las decisiones que Min Defensa ha anunciado que tomará porque el Gobierno aún no ha llegado al fondo del asunto.
Según dijo a La Silla una fuente que conoce por dentro el caso, faltarían las cabezas de por lo menos dos coroneles más para seguir desenredando la pita.
Entre los militares mencionados en el escándalo y que siguen activos está:
Coronel William Roberto Medina
Quién es: Él era el segundo al mando del CACIM, después del general Quirós y de hecho fue citado junto a su entonces jefe a juicio disciplinario en la Procuraduría en agosto del año pasado, por el mismo escándalo.
En el Ejército nos confirmaron oficialmente que Medina ahora está en el CEDE2, que es un departamento encargado de hacerle seguimiento a operativos militares en terreno.
También confirmamos que Medina entró en la ola de ascensos de Martínez y pasó de ser teniente coronel a coronel en diciembre del año pasado -días antes de que Martínez- saliera, como lo prueba este documento.
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