Aunque el empresario bananero Nicolás Echavarría fue el gerente de la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga, el gobierno Santos se demoró más de seis meses en 'castigar' su cambio de bando.
El castigo santista: más vale tarde que nunca
Aunque el empresario bananero Nicolás Echavarría fue el gerente de la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga, el gobierno Santos se demoró más de seis meses en 'castigar' su cambio de bando.
Hasta el jueves pasado Echavarría fue el representante de Juan Manuel Santos en la junta directiva de Corpourabá, la CAR regional, una muestra de la confianza y cercanía que tuvo con el presidente.
Tanto que hasta comienzos de 2013 era considerado -como contó La Silla- una ficha clave en el equipo de la reelección, tras haber sido el gerente de campaña de Santos en Antioquia en su primera elección, haberle ayudado a recoger fondos en ese departamento (de la mano del ex ministro Jorge Alberto Uribe) y de haberle puesto él mismo 15 millones de pesos. De hecho, alcanzó a organizarle comidas con los cacaos paisas hace un año.
Pero Echavarría, quien fue embajador de Álvaro Uribe en Bélgica y ante la Unión Europea, terminó convirtiéndose en uno de los cacaos antioqueños que se fueron con Zuluaga y se convirtió en su gerente de campaña en medio del escándalo del hacker.
Para el gerente de Banafrut y ex concejal de Medellín era un encargo clave, ya que la corporación autónoma del Urabá es la máxima autoridad ambiental de esa región bananera. También estaba en la junta directiva de la energética estatal Isagen, a la que renunció en febrero, antes de entrar a la campaña de Zuluaga.
A partir de ahora lo reemplazará el también antioqueño Juan Camilo Restrepo Gómez, quien fue viceministro de Interior de Santos I y desde hace un mes dirige el gremio bananero Augura, muy poderoso en Urabá.
Actualización: Después de publicada esta nota, Echavarría le contó a La Silla que envió su carta de renuncia a Corpourabá el 10 de abril y que nunca volvió a la junta, pero que no recibió respuesta ni fue remplazado por el Gobierno hasta hace una semana. De hecho, su nombre sigue apareciendo en la página y muchos documentos de la corporación.