Así va la recolección de firmas en Medellín

La ficha uribista de hace cuatro años empezó a recoger firmas a mediados de febrero, y tiene dos estrategias para hacerlo.

La primera consiste en repartirle formularios a amigos, empresarios, ediles y líderes comunales de distintos partidos. En este momento, calcula, son alrededor de 800 personas que le van entregando “de a poquito” las planillas con firmas, según nos dijo.

La segunda se trata de salir todas las semanas a la calle y a pasajes comerciales con un equipo de diez personas, aunque no siempre van todas. A ellos les financia transporte y alimentación, además de seguridad social.

Nos dijo que hasta ahora todos los gastos de la recolección de firmas los ha cubierto él, pero no sabe cuánto va a invertir en este tiempo.

Su meta es tener, para el 20 de mayo, 150 mil firmas.

Pero además está a la espera de posibles coavales, como el del Conservador, o acuerdos programáticos a su alrededor con sectores sociales y políticos.

“Hasta ahora vengo conversando con algunos políticos, pero no tengo nada concreto”, nos contó.

El exfuncionario de Federico Gutiérrez lleva tres semanas recogiendo firmas. Hasta ahora cuenta 20 mil.

Tiene un equipo de 15 personas que lo acompañan a las visitas a las comunas, y que coordina el excandidato a la Cámara por la Alianza Verde, Diego Hernán David.

Los recorridos consisten en visitar los barrios, hacer talleres sobre lo que necesita la comunidad y quedarse a dormir una noche en cada una de esas localidades.

Además, tiene un grupo de aproximadamente 30 personas en cada una de las comunas recogiendo firmas.

El presupuesto de Hernández es de 140 millones de pesos, que va para pagarles a las 15 personas que lo acompañan a los recorridos; para las amanecidas en los barrios, planillas, carpetas, tablas, lapiceros, volantes, transporte, gasolina, camisetas, agua y refrigerios.

Su presupuesto está dividido en un préstamo que hizo y donaciones.

Su meta es recoger 100 mil firmas.

El exdirector del Inder de ‘Fico’ Gutiérrez y primo de Sergio Fajardo comenzó a recoger las firmas el 2 de febrero. Lleva 37 mil de las 150 mil que quiere conseguir de aquí a junio.

Según nos contó, no le paga a ningún voluntario y los gastos son, principalmente, los refrigerios se los fines de semana en los que invierte 350 mil pesos; y vallas y volantes que le han costado 36 millones y medio.

Camilo Monroy, su mano derecha y coordinador de la recolección de firmas, le contó a La Silla Paisa las tres estrategias para recoger las firmas.

La primera son los recorridos con Valderrama. Los realizan de martes a viernes, uno en la mañana, en universidades y estaciones del metro; y otro en la tarde, en diferentes comunas. Alrededor de 20 y 30 voluntarios recogen las firmas.

“Los fines de semana se triplican los voluntarios, en promedio llegan a 140”, nos dijo Monroy.

En su mayoría son universitarios y líderes comunales; el equipo de trabajo es parecido al que hace cuatro años le recogió las firmas al alcalde Gutiérrez, según nos explicó Valderrama.

Otra estrategia es repartirle formularios a los amigos, conocidos y familiares, “ellos nos ayudan en sus trabajos, sus empresas, llevando los formularios e invitando a la gente a firmar”. Con esto esperan conseguir 10 mil firmas.

El otro frente es el de la lista al Concejo de Medellín. Son 21 candidatos y cada uno tiene la meta de conseguir 4 mil firmas, que es lo que deben conseguir en promedio para lograr una curul (más de 80 mil votos).

“Cada uno tiene una estrategia distinta, porque son líderes del sector social, cultural, deportivo, Lgtbi, entonces cada uno tiene un público diferente”, nos dijo Monroy.

Entre ellos están los concejales Daniela Maturana y Daniel Carvalho, quienes eran del movimiento Creemos -con el que llegó Gutiérrez-, pero se adhirieron a la campaña de Valderrama.

El concejal expulsado del uribismo en 2017 por sus discursos polémicos y ataques al Partido y al mismo Álvaro Uribe; se inscribió el 25 de enero por el movimiento “Consenso con sentido social”.

Aunque su meta son 150 mil firmas de aquí a mayo, según nos dijo, lleva más de 50 mil firmas y va a inscribir en las próximas dos semanas una lista al Concejo, “figuras de la cultura de Medellín que no me atrevo a revelar hasta inscribirlas”.

Su estrategia consiste en que salgan grupos de 10 o 15 voluntarios que se paren en las afueras de las estaciones del Metro, a la salida del estadio, en acopios de taxis, en los parques del centro y de los barrios a buscar firmas; y visiten corregimientos.

Entre camisetas, volantes y refrigerios, se ha gastado unos diez millones de pesos; y dice que todos los que trabajan con él son voluntarios.

Nos dijo que “la gente me conoce por todo lo que pasó con Álvaro (Uribe), y me quieren, se toman fotos conmigo”, nos contó.

El exconcejal de la ASI y exsecretario de Inclusión Social del alcalde Federico Gutiérrez está buscando firmas desde el 27 de noviembre, y hasta ahora lleva al menos 40 mil, según nos dijo. La meta son más de 100 mil.

Pero, por otro lado, también está buscando el aval de la Alianza Verde, y nos dijo que si la decisión de los aspirantes alternativos es hacer una consulta interpartidista, “no iríamos por firmas, sino por un partido”.

Hacen recorridos en los barrios y programan otras actividades como bingos.

El presupuesto para la recolección de firmas va hasta ahora en 29 millones de pesos, que van para pagarle a un coordinador de firmas y a la jefe de comunicaciones, también para planillas, kits de recolección de firmas, hidratación y refrigerio en recorridos.

El 12 de abril, cuando el partido Verde decida si participa o no en consulta interpartidista, se sabrá si el precandidato Vélez continúa recogiendo firmas o entra en la carrera Verde por el aval.