Como candidato a la Gobernación de Putumayo en 2015, la Fiscalía lo capturó una semana antes de las votaciones por presuntos nexos con la banda narcotraficante ‘La Constru’.
El reencauche del cuestionado Jorge Coral Rivas
Jorge Coral Rivas, precandidato conservador a la Gobernación de Putumayo.
Jorge Coral Rivas, a quien como candidato conservador en 2015 la Fiscalía capturó una semana antes de las elecciones por presuntos nexos con la banda narcotraficante ‘La Constru’, está pidiendo otra vez el aval de ese partido para lanzarse de nuevo. Pero la tiene cuesta arriba porque aunque quedó en libertad hace dos años, su proceso sigue vivo en la justicia.
Además, en carrera por el apoyo azul hay otros dos precandidatos de la otra línea conservadora del representante a la Cámara Jimmy Díaz, con quien Coral ha sido históricamente distante.
Una candidatura cuestionada
A pesar de que logró que en abril de 2017 un juez le revocara la medida de aseguramiento, Coral Rivas no ha resuelto sus líos con la justicia, y por eso su precandidatura sigue en el ojo del huracán.
Entre las pruebas que la Fiscalía presentó para demostrar su conexión con ‘La Constru’, que como contamos además de controlar el narcotráfico en el casco urbano, financia campañas a la alcaldía y es toda una autoridad en este municipio, están unos videos publicados en 2011 en los que Coral, que en ese entonces era candidato a la Alcaldía de Puerto Asís, aparece reunido con Miguel Bastidas alias ‘la Gárgola’, que según las autoridades era uno de los líderes de esa banda delincuencial.
El escándalo se dio a conocer al país en medio de un debate en el Congreso que hizo el entonces representante de La U, Luis Fernando Ochoa, en el que denunció que Coral Rivas y Adrían Revelo, que era el candidato liberal impulsado por el también representante Guillermo Rivera, se habrían prestado para hacer acuerdos con esa banda a cambio de plata para las campañas y votos.
Ochoa les pidió a las direcciones conservadora y liberal que les quitaran el aval a ambos.
Mientras Revelo renunció a su candidatura, Coral Rivas siguió y ganó con el 50 por ciento de los votos, asegurando que lo del video no era grave porque en el momento en que se grabó, ‘Gárgola’ no era reconocido como un delincuente.
“Al señor Bastidas todo el mundo lo conocía en Puerto Asís como un ganadero, comerciante, registrado en Cámara de Comercio, y todo el mundo le decía Gárgola, todo mundo. El diálogo del video es una finca de propiedad mía y hablamos normal como cualquier ciudadano. De los 26 minutos de video no se habló de plata, y él nunca me ayudó porque dijo que no tenía plata”, dijo Coral en esta entrevista días después de la captura.
Sin embargo ‘Gárgola’ fue detenido en mayo de 2012 acusado de ser una de las cabezas de ‘La Constru’. Un juez le dio casa por cárcel y se escapó meses después. La Policía le siguió el rastro y lo volvió a capturar en enero de 2016 ya con cargos de narcotráfico, homicidio y de nexos con los frentes 42 y 48 de las Farc.
Además del video, la Fiscalía ha dicho que hay testigos que aseguran que Coral se reunía con los de La Constru para entregarles dinero.
Él dice que no es así, que esos testigos se han ido retractando, y que por eso cree que el juicio va a terminar a su favor y con eso puede hacer su campaña a la Gobernación sin temor alguno.
“Ahora yo soy el que está presionando que se hagan las audiencias para que el juez de su fallo. Estoy seguro que voy a salir limpio, porque lo del 2015 fue todo un montaje para quitarme la Gobernación”, le dijo Coral a La Silla Sur.
Pero esa apuesta la tiene cuesta arriba porque aparte de no saber cómo falle el juez del proceso, no cuenta con las mayorías para quedarse con el aval conservador.
Tres por un aval
Aunque Coral parte con la base de los 32 mil votos que sacó en 2015 estando detenido, no tiene asegurado el aval porque detrás de él están dos dirigentes más.
Uno es el ingeniero John Molina, que renunció el año pasado a la gerencia de la Empresa de Energía de Putumayo, cargo al que había llegado en 2014 recomendado por el gobernador de la época, Jimmy Díaz, que ahora es representante a la Cámara.
Molina se ha movido fuerte en los municipios con una campaña que llamó ‘La fuerza del cambio’. Ha invertido en publicidad durante eventos masivos como las regatas que se hacen en los ríos del Putumayo. Ese posicionamiento lo combina con su cercanía con Díaz.
El otro precandidato es Ronald Latorre, que también es cercano al representante Díaz, porque fue su secretario de Desarrollo en el paso por la Gobernación. Además fue el candidato conservador a la Alcaldía de Sibundoy en 2011, y fue la fórmula de Díaz en ese municipio.
Tener a dos de tres en la baraja le permite al representante tener el sartén por el mango, aunque él dice que no.
“Tengo la responsabilidad de entregarle al Putumayo las mejores cartas para que ellos elijan. Que de los tres precandidatos, dos hayan trabajado conmigo pues habla bien de la confianza que me tienen pero debo velar porque los tres tengan garantías y que al final escojamos bien, porque no queremos que nos pase lo mismo que en 2015”, nos comentó Díaz.
Pero esa desventaja interna, Coral la está tratando de voltear de dos maneras.
Por un lado se está acercando al presidente del partido, el exsenador huilense Hernán Andrade.
Con Andrade se reunió esta semana para comentarle de su aspiración. “Él se ha mostrado muy respetuoso de las decisiones locales y nos ha dicho a todos que va a propender por darnos garantías”, nos comentó Coral.
Este acercamiento es clave porque cuando Coral estuvo detenido, Andrade dijo que creía que él era inocente y que su captura se dio “para robarle la Gobernación de Putumayo” y de mantener esa convicción puede ayudarle a que su situación jurídica no sea motivo para negarle el aval.
Y por el otro, se está acercando a las bases del partido y las está poniendo de su lado. Cuenta con el apoyo del exrepresentante Orlando Guerra (que lo tuvo en su UTL durante los últimos dos años), y dirigentes locales como Germán Ortiz que se están moviendo para la Asamblea. A eso le suma guiños que ha mandado al uribismo local porque, como contamos, se la jugó por la campaña de Iván Duque.
Con eso está moviendo la idea de que el mejor mecanismo para resolver al candidato conservador sea una consulta abierta en mayo, propuesta que no le suena mucho al representante Díaz.
“Hay disposición de lo tres de ir a consulta, pero lo ideal es que haya un consenso, un acuerdo. La apuesta es que al final de este mes queden dos precandidatos no más, y antes de que se cierren las inscripciones en el partido (1 de marzo) definamos cómo vamos a escoger”, nos señaló.
Con su salida al ruedo Coral puso de nuevo los reflectores en su nombre, está por verse si esta vez sí llega al día de las elecciones.