Mañana los conservadores definirán las reglas de juego para las presidenciales. Afuera del partido, Pastrana designa delegados para negociar alianza con Uribe.
Las dos movidas que aclaran el camino a Marta Lucía
En dos decisiones aparte, políticos conservadores dentro y fuera del partido impulsan decisiones que podrían aclarar el panorama para las aspiración presidencial la ex ministra Marta Lucía Ramírez . Y la primera de ellas podría definirse mañana.
Se trata de la propuesta de un grupo de miembros del directorio conservador, incluyendo a Blanca Cardona, del grupo del precandidato y ex gobernador del Valle Ubeimar Delgado, y la ficha de Ramírez allá, Juan Camilo Ostos, para que el partido defina no solo tener candidato propio sino que decida si lo va a escoger por consulta interna, encuesta o convención.
Aunque la dirección del partido (de mayoría santista) viene pensando en esa decisión desde inicios de año, solo mañana a las 7:30am el directorio va a discutirla.
Si sale humo blanco, Ramírez tendría claro el camino para que su aspiración se convierta en una candidatura oficial de un partido, sobre todo porque el único otro precandidato es Delgado, que no tiene mucha fuerza en el partido (para una convención) ni mayor reconocimiento entre la opinión (para una encuesta o una consulta).
Eso le ayuda cuando los demás aspirantes en la derecha van a más atrás en sus campañas: los cuatro precandidatos del Centro Democrático esperan el mecanismo para elegir el candidato; Alejandro Ordóñez renunció al Partido Conservador y apenas va a iniciar su recolección de firmas para lanzarse sin aval; y Luis Alfredo Ramos sigue esperando que termine su juicio en la Corte Suprema.
Pero justamente en relación con ellos arrancó en forma un proceso que le despeja el paso siguiente a Ramírez: la búsqueda de un candidato único de esas vertientes, a lo que necesitaría llegar con el aval de su partido y mucha fuerza para tener chances frente a un Ordoñez que le está apostando al creciente conservatismo religioso de base, y a un candidato del Centro Democrático que tenga el poderoso apoyo del dedazo de Uribe.
El ala conservadora del expresidente Andrés Pastrana, que se oponen a que el partido siga en la coalición santista, designó a Camilo Gómez para negociar una alianza con el uribismo. En esa labor lo apoya Fernando Araújo Perdomo, ex Canciller de Álvaro Uribe y padre del senador uribista Fernando Nicolás Araújo.
Su objetivo, según nos dijo el excanciller, es definir “una agenda programática que vaya más allá del rechazo de los acuerdos” con las Farc y definir las reglas de juego para una alianza en la que él cuenta a Ramírez, Ordóñez el candidato del Centro Democrático y “sectores independientes y grupos cristianos”.
Que Pastrana haya elegido a Gómez y Araújo muestra su afinidad con Ramírez, pues ambos fueron finalistas para ser fórmula vicepresidencial de ella en 2014 (el elegido fue Gómez); y si los conservadores deciden mañana arrancar su proceso para elegir candidato, Ramírez tendría el camino más claro para seguir su gira por 100 municipios y ganar apoyos en la maquinaria de su partido.