En su primer año al frente de la Alcaldía de Cúcuta, César Rojas dedicó la mayoría de la contratación a vías y alcantarillado, en medio de cuestionamientos reiterados a las condiciones y varios miles de millones entregado 'a dedo'.
César Rojas, alcalde de Cúcuta en la inauguración del mantenimiento de vías.
En su primer año al frente de la Alcaldía de Cúcuta, César Rojas dedicó la mayoría de la contratación a vías y alcantarillado, en medio de cuestionamientos reiterados a las condiciones y varios miles de millones entregado 'a dedo'.
El alcalde de Cúcuta, César Rojas, suscribió en 2016 2.562 contratos por $321 mil millones. Para hacerle seguimiento a esa inversión, La Silla Santandereana revisó los cincuenta contratos de más de mil millones de pesos que entregó, quiénes fueron los principales favorecidos y para qué sirvieron. Estas son las cinco grandes conclusiones de cómo se invirtió la plata de la capital de Norte de Santander el año pasado.
La administración de Rojas abrió 24 procesos de selección por más de mil millones de pesos en su primer año de gobierno, los revisamos en su totalidad, y encontramos que la gran ausente fue la pluralidad de oferentes.
De las 24 sólo dos (una licitación por $2.265 millones para garantizar la conexión a Internet de 150 colegios y una selección abreviada por $1.500 millones para reforestación) cerraron con dos propuestas. En las demás, que incluyeron quince licitaciones, tres subastas, tres concursos de méritos y un proceso de selección abreviada, solo se presentó una oferta.
La Silla revisó los pliegos de condiciones de catorce de esos procesos de selección y encontró que las exigencias eran tan específicas que solicitaban personal con hasta 20 años de experiencia sin ninguna explicación en particular, que los índices financieros (que son los que muestran la rentabilidad y liquidez de las empresas) eran criticados porque no se ajustaban a las realidades del mercado y que exigían que los oferentes certificaran códigos del clasificador de bienes y servicios que no tenían relación con el objeto del contrato.
Aunque esas condiciones fueron advertidas por potenciales oferentes, al final en once procesos la Alcaldía no tuvo en cuenta varias de las observaciones y mantuvo las condiciones que permitieron que solo una empresa llegara al cierre de cada oferta.
Si bien el hecho de que los concursos de contratación cierren con una sola propuesta no es ilegal, ese sí es un indicador con el que se mide la transparencia en la inversión de recursos públicos y el hecho de que cierren con una sola oferta no es un buen síntoma.
Los procesos de contratación directa también fueron protagónicos en la administración de Rojas durante 2016.
Como lo contó La Silla Santandereana, la entrega del millonario contrato de alimentación escolar, que ascendió a los $19 mil millones se hizo bajo esta modalidad en medio de cuestionamientos por presuntos sobrecostos y quedó en manos de una unión temporal en la que uno de los participantes fue la Corporación, Paz y Futuro, que ha sido blanco de críticas por la ejecución irregular de contratos de talleres educativos y entrega de alimentos en el país.
Otros cinco contratos que sumados llegan a los $13 mil millones también fueron entregados directamente por la administración de Rojas en 2016.
De esos cinco, la gran favorecida fue la Corporación Integral de Innovación Social - Innovar-, que se quedó con dos contratos (que suman $2.979 millones). Uno de ellos fue para la atención de más de ocho mil adultos mayores, quienes, como lo contó La Silla, fueron obligados a hacer campaña por el Sí al plebiscito.
Emulando el estilo de Gobierno de Ramiro Suárez, quien, como lo ha contado La Silla Santandereana, manda en cuerpo ajeno en Cúcuta, en su primer año Rojas le apuntó a la generación de empleo.
Por un lado, le dio trabajos de medio tiempo a 3.800 cucuteños por seis meses a través del controvertido contrato con la Corporación Cambari, que terminó en medio de denuncias porque aún le deben plata a algunos de los trabajadores.
Por otro, en un solo proceso, por otros $16 mil millones, entregó la contratación de todo el personal de instituciones educativas públicas (1050 personas), que van desde los encargados de la limpieza y conserjería, hasta profesores y administrativos, a una sola organización: Calidad Total S.A.S., una empresa familiar que se creó en 2003 y que también ha contratado con la Alcaldía de Cúcuta el transporte escolar en zona rural. De ese proceso en particular, hay dos puntos que llaman la atención.
El primero está en que mezcló en un solo contrato la vinculación dos tipos de personal diferente (aseadores y profesionales en varias ramas) y esa sola característica descartó de tajo a empresas que hubieran podido competir por la prestación del servicio de aseo en los colegios si se hubiera lanzado una licitación por aparte.
Por otro lado, la Alcaldía le pidió al potencial contratista tener disponibles profesionales en ingeniería civil, contabilidad o técnicos en áreas de educación, cuando ese tipo de personal normalmente es contratado directamente por la Secretaría de Educación y no a través de un intermediario, lo que en términos prácticos implica que se tercerizó la vinculación de ese personal.
El nombre del presidente de la junta directiva de la Cámara de Comercio de Cúcuta, vicepresidente de la regional de la Cámara Colombiana de Construcción, Camacol, en Norte de Santander, y dueño de la Constructora Yadel -que ha hecho vivienda de interés social- en la capital de ese departamento, Francisco Antonio Yañez Villafañe, fue el más notorio en la contratación de 2016 en la Alcaldía de Rojas.
Entre él y el Grupo Constructor Ingtricon S.A.S, la empresa de su hijo Juan Francisco Yañez Delgado, se quedaron con tres licitaciones que suman $13.125 millones para reparar alcantarillado, construir parques infantiles y la segunda etapa de un centro comercial a cielo abierto. Si bien en número de contratos, Yañez fue el ganador, hay otros nombres reconocidos que también ganaron.
El segundo vicepresidente de la regional de Camacol, Carlos Mauricio Tellez Mogollón, se quedó con una licitación por $13.200 millones para el suministro de cemento que es entregado a comités de trabajo ciudadanos conformados a través de las juntas de acción comunal para que ellos mismos aporten la mano de obra y hagan la pavimentación.
Otro favorecido, aunque con un contrato más pequeño ($1.299 millones), fue Germán Alberto Berbesí Barroso, el supercontratista de la Gobernación de Norte en la era de Edgar Díaz Contreras, quien, como contó La Silla Santandereana, se quedó con cuatro contratos que sumaron $27 mil millones, en los últimos tres meses del entonces saliente Gobernador.
Además de empleo, en lo que más invirtió plata Cesar Rojas en su primer año de Gobierno, fue en el mantenimiento de vías y alcantarillado, otra de las cosas por las que es recordado el exalcalde Ramiro Suárez.
En todo el 2016 Rojas invirtió $9.500 millones en arreglar las vías de barrios tradicionales de la ciudad como El Trigal y Colsag, así como en sectores como el Tierrero y el asentamiento La Esmeralda. También fortaleció el programa de pavimentación de calles con dos contratos que llegan a los $19.100 millones; uno es el de Tellez Mogollón y otro por $6 mil millones para suministrar arena y triturado se lo ganó Víctor Julio Roqueme, uno de los contratistas favorecidos con la mermelada santista en 2014, como lo contó La Silla.