El empalme de Mauricio no puede ser más Aguilar

Silla Santandereana

Casi todos los encargados de coordinar el empalme del gobernador electo de Santander son del clan de su familia. 

Hace unos días el gobernador electo de Santander, Mauricio Aguilar, dio a conocer los nombres de las cabezas de su empalme.

Aunque con ellas dio la sensación de que personas de diferentes orillas estarían detrás de todo el proceso de recepción de información, encontramos que en realidad está centralizado en perfiles que responden al grupo político de su familia. 

Pese a que hay 130 personas vinculadas al empalme, averiguamos sobre las 19 que, según miembros del mismo comité y funcionarios de la administración actual, son los encargados de estar al frente de la transición entre el gobierno saliente y el entrante. 

Esto fue lo que encontramos del equipo con el que hace su primer acercamiento el tercero del clan Aguilar en llegar al Palacio Amarillo.

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Las caras de mostrar no tienen rol protagónico

Hace 10 días el Gobernador electo presentó a seis personas como cabezas de su comité de empalme: Aída Hernández, abogada de su confianza; Diego Ardila, gerente de Freska Leche; Vanessa Quiroga, Directora de Transferencia de Conocimiento de la UIS; Isnardo Jaimes, excandidato a la Cámara conservador y presidente del directorio departamental de ese partido; Juan Felipe Montoya, gerente de Huevos Kikes, y Juan Camilo Beltrán, presidente de la Cámara de Comercio de Bucaramanga.

Sin embargo, solo Hernández tiene un papel estructural y está al frente de la organización de todo el proceso de recepción de información.

Por un lado, Vanessa Quiroga, Diego Ardila e Isnardo Jaimes, forman parte de una gerencia colegiada y solo se encargan de hacer seguimiento y apreciaciones generales a los informes de cada coordinador.

Y por otro, tanto Montoya como Beltrán solo fueron invitados como garantes del proceso y no toman decisiones.

Es decir, las caras que mostró ante medios para decir que su proceso de integración con el departamento estaría rodeado por varios sectores, ninguna tiene un papel estructural.

En el fondo solo sirven de notarios de lo que reporta el resto del equipo.

 
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La mayoría de los coordinadores son de las entrañas del clan Aguilar

Aunque Aída Hernández le dijo a La Silla que no había coordinadores de empalme, tras hablar con ocho fuentes entre miembros del empalme y secretarios de despacho actuales, encontramos que 13 son las cabezas del empalme por secretarías.

A diferencia de las caras que Mauricio mostró en medios, la gran mayoría de los integrantes del segundo nivel de jerarquía tienen en común que son de la entera confianza de los Aguilar y están repartidos en las tres vertientes de esa casa política. 

El parapolítico Hugo Aguilar, papá de Mauricio, tiene a Carlos Pérez Gélvez y Gustavo Ardila, dos de sus hombres de confianza.

Ellos están al frente del empalme de las secretarías de Interior y General, respectivamente, y Pérez, según nos dijeron tres fuentes que conocen de cerca la movida política de los Aguilar, suena como candidato a Contralor del departamento por parte de ese clan. 

Además, como varios miembros del clan Aguilar trabajan con esa familia desde que Hugo fue gobernador (2003-2007), algunas fichas las comparte con sus hijos. 

Ese es el caso de la encargada del empalme de Vivienda, Eugenia Aguilar, quien hoy es cercana al exgobernador y hoy senador de Cambio Radical, Richard Aguilar; o la exrepresentante del extinto Opción Ciudadana, María Eugenia Triana, quien se hizo en la política con él pero es de las personas de confianza del gobernador electo. 

Por parte de Richard Aguilar están Mery Luz Hernández, quien tiene las carteras de Cultura y Turismo y fue su exsecretaria; su mano derecha Ricardo Flórez con Educación; su exsecretaria Adriana Carreño en la General; Sandra Hernández (viene de la cuerda de Flórez) en Hacienda el Instituto de Desarrollo de Santander, Idesan. 

De la cuerda del Gobernador electo hay cuatro coordinadores. 

En Infraestructura y la Empresa de Servicios de Santander, Esant, está Jaime René Rodríguez, contratista que desde la Gobernación de Hugo Aguilar ha ejecutado obras públicas y es amigo personal de Mauricio. 

En la oficina jurídica está Lilia Aideé Velasco, quien nunca había figurado en el grupo político de los Aguilar pero, según dos fuentes que los conocen, es su amiga personal. En común, tienen que ella fue secretaria general del Acueducto de Bucaramanga, entidad en donde Mauricio y su esposa Genny fueron tesoreros. 

En Salud está Javier Villamizar Suárez, exgerente de varios hospitales de Santander. Aunque Villamizar nos negó relación alguna con Mauricio y en cambio dijo que lo llamaron por su hoja de vida, según nos dijeron cuatro fuentes que los conocen, es uno de sus amigos cercanos. 

A ellos se suma Aída Hernández, quien, como contamos atrás, es la cabeza del empalme y trabajó como unidad de trabajo legislativo de Mauricio cuando fue senador.

El único coordinador del empalme, que según todas las fuentes, es  de entera confianza de los tres Aguilar, es Carlos Millán, encargado de Agricultura. 

Por último está Jaime Vargas Mendoza que es más un aliado que un miembro de las entrañas del grupo.

Es el hermano del destituido exalcalde de Bucaramanga, Fernando Vargas, pero desde las elecciones locales de 2015 donde fue candidato a la Alcaldía por la ASI (no llegó a las urnas) es aliado directo de Hugo Aguilar. 

 
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Hay varios que fueron candidatos con sello Aguilar

Salvo Isnardo Jaimes que se lanzó a la Cámara por los conservadores en 2018, todos los que han sido candidatos (quemados o electos), han tenido el respaldo de la estructura de los Aguilar. 

La más representativa es la exrepresentante Maria Eugenia Triana

Antes de ser congresista, su única experiencia en la política electoral había sido como alcaldesa de Pinchote, cargo al que llegó con poco más de 2 mil votos. Sin embargo, en 2014 cuando se lanzó a la Cámara por el extinto Opción Ciudadana como fórmula de Mauricio al Senado, sacó casi 50 mil apoyos con la estructura de esa casa política.

Un caso similar es el de Ricardo Flórez. Aunque él sí tenía una estructura propia en Bucaramanga, en 2014 salió electo con el impulso de la maquinaria de la administración de Richard Aguilar, también con el aval del extinto Opción Ciudadana y con 47 mil votos. 

Por su parte, Carlos Fernando Pérez, incursionó en la política santandereana como candidato al Concejo de Bucaramanga por La U en 2011. 

En ese entonces contaba con el respaldo de la comunidad cristiana y de Hugo Aguilar, aunque se quemó con 2.510 votos, tras la derrota fue nombrado en la secretario general de la Contraloría departamental, como cuota de ese grupo. 

Por último, Jaime Vargas, quien en 2015 fue candidato a la Alcaldía de Bucaramanga por la ASI, inicialmente fue la ficha de la estructura de Hugo Aguilar, que para esas elecciones tuvo el poder de dar avales de ese partido. Sin embargo, su aspiración nunca despegó, y tanto él como Aguilar se fueron con el entonces  candidato de La U, Jhan Carlos Alvernia, quien se quemó.

 
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No todos tienen conocimientos sobre lo que están recibiendo

Según su profesión y posgrados, hay cinco coordinadores cuyos estudios no tienen ninguna relación con el despacho que tienen a cargo. 

Ricardo Flórez, coordinador de Educación, aunque es conocido por ser fundador del instituto tecnológico Fitec y fue docente, de profesión es ingeniero de sistemas. 

María Eugenia Triana, quien está a cargo de la Secretaría de Desarrollo, estudió Gestión Empresarial y es especialista en Gerencia pública y de Empresas. 

Eugenia Aguilar, de vivienda, es abogada y tiene cinco especializaciones pero ninguna relacionada con esa área. 

Mery Luz Hernández de Cultura y Turismo, es economista y administradora de empresas, también tiene cinco especializaciones pero tampoco tienen relación con ese despacho. 

Y Jaime Vargas, que está coordinando la Secretaría de las TIC, si bien fue secretario de esa cartera en Bucaramanga, es ingeniero metalúrgico con especialización en Gerencia de Empresas y maestría en Educación. 

En cuanto a la experiencia, dos están estrenándose en su área. 

Aída Hernández, cuya única experiencia es como UTL de Mauricio, y Adriana Carreño, que si bien fue secretaria privada de Richard, no le encontramos experiencia alguna en la administración pública, que corresponde a la Secretaría General.

 
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Otros visibles en el empalme

Aunque no ocupan cargos como coordinadores, hay otros miembros del clan Aguilar bien conocidos en los círculos políticos de Santander que están en el empalme. 

En la primera reunión de presentación del equipo, figuraron en primera fila Carlos Fernando Sánchez y Jhonny Peñaloza. 

El primero fue director de la Corporación Panachi, excandidato a la Gobernación de Santander apadrinado por la línea de Hugo y Mauricio y fue uno de los que rodearon al gobernador electo durante su campaña; el segundo es exalcalde de Oiba, excandidato a la Cámara por Cambio Radical (era de la línea Aguilar pero terminó retirándose) y amigo personal de Mauricio Aguilar.

Ese día también estuvo Gilberto López Díaz, cercano a Hugo Aguilar y representante de Soluciones Geomáticas Ltda, empresa que contrata estudios de proyectos de vivienda  y consultorías de cartografía en Santander, en la reunión del comité de la Secretaría de Planeación. 

Y en la reunión de la Secretaría de Agricultura apareció Jhan Carlos Alvernia, excandidato a la Alcaldía de Bucaramanga en 2015 (se quemó con casi 54 mil votos) y 2019 (desistió).

Además, al frente del empalme del Instituto de Deportes de Santander, Indersantander, está Pedro Belén Carrillo, quien viene de ser director de Bienestar Institucional en las Unidades Tecnológicas de Santander, UTS, cargo en el que se convirtió en uno de los hombres de confianza del rector Omar Lengerke, quien a su vez se hizo con el respaldo de Richard Aguilar y llegó al cargo con su bendición. 

 
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