El "sí, pero no" de Vargas se refleja en sus mandatarios cercanos

Silla Caribe

Varios alcaldes y gobernadores vargaslleristas pura sangre están tibios frente al proceso de paz. Al menos en un caso, Vicepresidente ordenó no hacer campaña por el Sí con los liberales. 

Convocada por el gobernador del Atlántico Eduardo Verano, el fin de semana se realizó en Barranquilla una mesa de trabajo para hablar de la pedagogía del proceso de paz con las Farc. La encabezó el mininterior Juan Fernando Cristo, quien escuchó a víctimas, políticos locales y senadores como Álvaro Ashton (liberal) y Efraín ‘Fincho’ Cepeda (conservador) hablar de la importancia de apoyar el Sí en el plebiscito, como lo viene haciendo la Unidad Nacional santista. Pero a la hora del turno del alcalde de la vecina Soledad, el vargasllerista Joao Herrera, el discurso fue otro. El mandatario sugirió que, a la luz de las advertencias de la Procuraduría, los funcionarios deberían ser imparciales y no comprometerse ante los “dos candidatos” que hay: el Sí y el No.

El Ministro intentó tranquilizarlo diciendo que los funcionarios Sí podían estar comprometidos con una de las dos opciones (asunto que ratificó ayer el Presidente en una directiva) y el tema no pasó a mayores. Aunque, al final, la sensación que quedó entre algunos fue la de que Herrera llegó “a poner un palo en la rueda”, como nos dijo un político que estuvo presente.

Más allá de las genuinas prevenciones que pueda tener un funcionario, la escena refleja lo que está pasando con algunos mandatarios de Cambio Radical que, al igual que su jefe natural, el vicepresidente Germán Vargas, le están dando un Sí con reservas a los acuerdos que son la mayor apuesta del actual Gobierno Nacional.

Se trata de vargaslleristas pura sangre en su mayoría porque también hay otros dirigentes del mismo partido que no están tibios por el Sí.

Revisamos y son varios los casos que contrastan con las posiciones jugadas desde hace varios días por el Sí de mandatarios como el gobernador de Bolívar Dumek Turbay (liberal), el alcalde de Santa Marta Rafael Martínez (de la izquierda independiente) o la gobernadora del Valle Dilian Francisca Toro (de La U).

Para empezar, ahí mismo en Barranquilla está el alcalde Álex Char, uno de los principales alfiles del vargasllerismo en todo el país. Aunque en la reunión con Cristo estuvo su delegado Jaime Pumarejo (Char estaba fuera del país), y el mandatario ha dicho en varios escenarios y en redes que apoya totalmente la paz, en realidad esa administración no está haciendo ni hará campaña activa por el Sí.

¿La razón? Es más o menos parecida a la del Alcalde de Soledad, quien por cierto es de la cuerda charista y cuando lo contactamos nos aseguró que sí hará campaña en cabeza de su esposa.

A propósito de las advertencias del procurador Alejandro Ordóñez -quien en las últimas horas criticó la directiva presidencial sobre participación de funcionarios en el plebiscito-, la Administración de Barranquilla “se abstiene” de pronunciarse dentro de esa campaña por las dudas jurídicas que tiene, como nos lo explicó un vocero.

La campaña charista por el Sí queda entonces en cabeza, como lo contó La Silla Caribe, del hermano del Alcalde: el senador de Cambio Arturo Char, quien ya empezó a recorrer pueblos del Atlántico y hasta le compuso y grabó una salsa a la paz.

El asunto ahí es que el peso pesado que lidera esa poderosa casa política y mueve los votos es Álex, como quedó demostrado en las regionales del año pasado, en las que el hoy mandatario Sí se puso la camiseta para impulsar una colonización vargasllerista en el Caribe con varios candidatos fuertes. 

“Lo de Arturo solo no mueve apoyos. En (la Alcaldía de) Barranquilla no está pasando absolutamente nada con el Sí, nada se ha movido ni se va a mover y es por varias particularidades”, según nos contó una fuente que conoce por dentro el movimiento en ese grupo.

Según esa persona, el alcalde barranquillero está sentido con el Gobierno Nacional por el recorte en el presupuesto de 2017 para las obras de los Juegos Centroamericanos que se realizarán en esa ciudad en 2018.

Eso se suma a lo de las dudas jurídicas por lo del Procurador y la posición tibia que Germán Vargas ha asumido frente al proceso de paz todos estos años. “El Vicepresidente no ha dicho que no a los acuerdos, sino que dijo ‘Sí, pero no’. Ponte en el papel de cualquiera de sus mandatarios”, agregó la alta fuente.

Intentamos confirmar el dato de la molestia por lo de los Juegos oficialmente con alguien de la Alcaldía, pero no fue posible hablar con el supersecretario Jaime Pumarejo.

Sin embargo, un congresista costeño de Cambio Radical nos aseguró -pidiendo no ser citado para evitarse líos- que la molestia con el Gobierno Nacional Sí existe y también se extiende a la vargasllerista Gobernación del Magdalena, en donde tampoco están haciendo hoy campaña activa por el SÍ.

Dudas en el Magdalena

En lo que fue considerado el primer gran acto público político por el Sí en el Magdalena, el pasado viernes el expresidente liberal César Gaviria (designado jefe del SÍ desde el Gobierno) lideró en el parque de los Novios de Santa Marta una manifestación en la que estuvieron espontáneos y políticos locales conservadores, liberales, de La U, del Polo, de los verdes, de la UP, de Cambio Radical y de Fuerza Ciudadana, el movimiento del actual alcalde samario Rafael Martínez. También estuvieron voceros nacionales verdes como Antonio Sanguino.

Aunque el acto era esencialmente liberal y de Fuerza Ciudadana, la cúpula local de Cambio Radical, que en ese departamento es timoneado por el exgobernador de ese partido Luis Miguel ‘el Mello’ Cotes, no asistió.

Ni él ni su tía, la actual gobernadora Rosa Cotes, estuvieron presentes, a pesar de que fueron invitados por el exmagistrado Jota Vives (excandidato liberal a la Gobernación, quien ayudó a organizar el evento).

Vives llamó al Mello a pedirle que le ayudara a convocar los actos y, según nos contó el propio exmagistrado, el exgobernador dijo que Sí inicialmente. Pero luego se excusó: "Explicó que había recibido una llamada de Germán Vargas pidiéndole no asistir al evento con Gaviria", nos dijo Vives.

Ese día, en lo que puede ser leído como un desafío a las advertencias de Ordóñez (aún no había salido la directriz presidencial), el alcalde Martínez, micrófono en mano, hizo campaña por el Sí: “Hay que ir a las urnas a respaldar esta iniciativa de paz”, pidió.

En contraste, a pesar de que en varios escenarios y en redes Rosa ha dicho que respalda la paz e incluso propuso firmar el Acuerdo Final en la Quinta de San Pedro Alejandrino, un vocero oficial de la Gobernación nos dijo ayer que por ahora no están en la campaña debido a que se encuentran revisando “el tema de la Procuraduría” y resolviendo todas las dudas jurídicas. 

Detrás de esa declaración oficial, un político importante del grupo del Mello y otra fuente conocedora nos contaron por aparte que la posición podría tener que ver además con “cierta molestia” en ese movimiento en el que sienten que el Gobierno no los ha apoyado en la polémica por la construcción de la Vía de La Prosperidad.

Ese fue el proyecto bandera de la Administración del Mello y ha estado salpicado de ruidos por retrasos y presuntas irregularidades, criticadas hasta por Vargas Lleras que ha salido a pedir explicaciones.

Intentamos comunicarnos con la Gobernadora y con el Mello para preguntarles al respecto, pero no fue posible.

Una de esas dos fuentes nos detalló que lo que sucede es que en Cambio Radical no están dispuestos a hacer campaña por el Sí bajo el paraguas de los liberales, como de hecho ya lo ha dicho el director del Partido Rodrigo Lara, quien anunció que su colectividad buscará respaldos para el SÍ en el plebiscito “de manera autónoma e independiente”.

“Lo que se ha hablado desde Bogotá es que se comiencen a hacer cosas, pero por ningún motivo cerca de los liberales ni tampoco convirtiéndonos en los adalides del Sí, porque Vargas jamás lo ha sido. Mejor dicho: ni mucho que queme al santo ni tan poco que no lo alumbre”, detalló el político sobre una supuesta directriz que ratifica que esta campaña anticipa la puja por las presidenciales de 2018.

Además de Barranquilla y el Magdalena, en La Guajira el gobernador (e) Jorge Enrique Vélez, también de Cambio Radical, ordenó a su Administración adelantar pedagogía del proceso “sin hacer campaña por ninguna de las dos opciones”.

Él le explicó a La Silla que esa decisión es motu proprio y no obedece a ninguna directriz de su partido. “Mi orden es autónoma porque no dejo que nadie se meta y además me parece que hay que sacar este tema por fuera de los asuntos partidistas, y que la gente decida con la mayor participación”.

Hace unos días, Vélez nombró como su secretaria de Gobierno a Débora Barros, una abogada wayuu líder de la organización Mujeres Tejiendo Paz, que es símbolo de las víctimas de la masacre paramilitar de Bahía Portete, y la encargó enseguida del tema de la pedagogía de los acuerdos.

Fuera del Caribe

El Caribe es hoy uno de los fortines de Cambio Radical, pero en otras regiones la ambigüedad vargasllerista también se siente.

En Vaupés, por ejemplo, dos fuentes le confirmaron por aparte a La Silla que el gobernador Jesús María Vásquez, que es de Cambio Radical, no se ha movido para hacerle campaña al Sí.

“Aquí ha sido una lucha porque el Gobernador dice de dientes para afuera que está con el Sí, pero no ha hecho el primer evento para apoyarlo”, nos dijo el representante liberal Norbey Marulanda Muñoz.

Según él, el trabajo de pedagogía lo están haciendo ellos “con las uñas”, casa por casa, explicándole a la gente los acuerdos y “lo que pasaría Sí gana el No”, dice el representante.

Como esa versión podría ser también por la rivalidad que hay entre el Partido Liberal y Cambio Radical por la campaña al plebiscito, la confirmamos con otra fuente y nos dijo lo mismo. “Aquí no se ha movido nada sobre el tema de la paz. Está totalmente quieto y el Gobernador no ha dicho una sola palabra sobre eso”, nos dijo un diputado de Vaupés que prefirió no ser citado.

En Antioquia, el gobernador Luis Pérez, que llegó al cargo con el aval del Partido Liberal y de Cambio, le dijo a La Silla que más que una campaña de tarima y visitar pueblos, su aporte es llevar programas a los municipios donde las Farc dejará de hacer presencia con armas.

“Es una mirada muy recortada quedarse en el Sí o en el No. Lo mío es fabricar paz llevando carreteras, distritos de riego, programas. Ese es mi aporte”, nos dijo sin concretar con cuál de las dos opciones está.

“Yo apoyo el proceso de paz con orden y disciplina porque es que al final de la fiesta y de la firma, el que le responde a la gente es el Gobernador y a mí me preocupa que los municipios que va dejar las Farc en Antioquia terminen en manos del Eln y las bandas criminales”, agregó.

Pero una fuente que se conoce la movida política en Antioquia nos dijo que Pérez debería moverse mucho más para ser un Gobernador que llegó a ese cargo con las banderas de las Unidad Nacional.

Explicó que había recibido una llamada de Germán Vargas pidiéndole no asistir al evento con Gaviria

Jota Vives sobre el Mello Cotes

“Pérez es la representación del puro vargasllerismo: Sí, pero no. Si gana el Sí, va a cobrar los réditos del posconflicto, y si gana el No, va a decir que desde siempre tuvo reparos”, nos dijo.

Sin embargo, hay varios mandatarios de Cambio que no reflejan esa ambigüedad.

Los que sí van por el SÍ con toda

También hay mandatarios, no tan de las entrañas de Vargas, que aunque avalados por CR Sí están buscando votos para el Sí. En el Caribe, los alcaldes vargaslleristas de ciudades intermedias Edgardo ‘el Nene’ Pérez (de Ciénaga, Magdalena, de línea independiente) y Pedro Alí (de Magangué, Bolívar, cercano al gobernador liberal Dumek Turbay), llevan varios días en campaña por el Sí, no sólo en redes sino en eventos públicos consiguiendo apoyos para esa opción. En las mismas está el gobernador de Sucre Édgar Martínez, quien apenas entró a Cambio en las regionales pasadas.

Carlos Julio González, gobernador del Huila por CR, ha liderado ya tres foros que se llaman “El Huila camina hacia la paz” en Neiva, La Plata y Pitalito, en los que invita a la gente a “apoyar el proceso”, aunque no dice explícitamente irse con el Sí.

Además hace parte del Consejo Directivo de la Federación Nacional de Gobernadores y desde ahí, según nos detalló un periodista de la región, lo han llamado a promover los temas de la paz y él ha dicho que Sí.

Otro gobernador que parece jugado es Jorge Rey, de Cundinamarca. Según el representante Jorge Rozo, de su mismo partido, desde hace un mes largo Rey deja libre su agenda desde los jueves hasta el domingo para visitar municipios y hacer reuniones de plaza pública apoyando el Sí de frente.

La misma línea que parece seguir la bancada de senadores y representantes de Cambio Radical, que justamente ayer al mediodía almorzaron con el exministro Miguel Peñaloza, encargado por el Gobierno del día de la votación del plebiscito, “para coordinar cómo va ser el trabajo en los municipios apoyando el Sí”, según nos contaron tres congresistas.

Uno de ellos nos aseguró que “no hay ninguna directriz” que tenga algunos mandatarios nadando en aguas tibias frente a los acuerdos de paz.  

Mientras, una alta fuente de Presidencia nos dijo al respecto que “seguramente” algunos alcaldes y gobernadores “estaban asustados con el Procurador, pero ahora que salió la directiva presidencial y está perfectamente clara la reglamentación los veremos en unos días activos al 100”.

En unos días sabremos Sí este panorama cambia.

 

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