Los nexos políticos de los comités que quieren revocar a Manolo

Si el 2016 fue un año regular para el alcalde cartagenero Manolo Duque Vásquez, este que acaba de empezar pinta peor para él. Además del comité que se inscribió la primera semana de enero para promover su revocatoria, hay dos grupos más que adelantan reuniones para buscar el mismo objetivo e inscribirse ante la Registraduría antes de que termine el mes.

“¡Porque la ciudad manda!” ya se inscribió

El primer grupo en inscribirse ante la Registraduría es precisamente el que habíamos referenciado en octubre, cuando contamos la mala racha que vivió el año pasado el alcalde cartagenero por sus salidas desparpajadas en los medios de comunicación y algunas medidas impopulares que tomó.

Ese comité se llama “¡Porque la ciudad manda!” y tiene detrás a un grupo de líderes cívicos que, aunque estuvieron en las regionales de 2015 de frente con la campaña política del candidato a la Alcaldía del movimiento Cartagena Confirma, Andrés Betancourt, dicen que no tiene a un político a la sombra.

El líder del grupo es Roberto Pérez y durante la inscripción del comité lo acompañaron los otros miembros activos: Juan Manuel Mariaca Duque, Yubeida Julio, Adolfo Vanegas, Sobeida Julio y José Luis Calvo.

Este grupo, según nos contó Pérez, empezó a organizarse desde mediados del año pasado con la creación de un grupo en Whatsapp desde el cual coordinaron reuniones privadas en las tres localidades de Cartagena.

Dos miembros del grupo hicieron parte del movimiento de Betancourt: Sobeida Julio, quien fue miembro activo de su campaña y además es su amiga, y el mismo Roberto Pérez que también acompañó al excandidato.

Pese a esa relación, Andrés Betancourt le dijo a La Silla que él se opone a la idea de la revocatoria: “Es más dañino una revocatoria que un gobierno ineficiente, porque un proceso como este lleva más hasta un año y además de eso, quien llegue a gobernar en atipicidad traerá un nuevo plan de desarrollo y eso corta lo poco se ha avanzado hasta ahora”.

Agregó que antes de ese mecanismo, existe el cabildo abierto y la figura de consejos distritales de participación ciudadana.  

“Creo que se debe echar mano de eso como primera instancia”, dijo Betancourt.

Sobeida Julio también dijo que no hay políticos detrás de su idea. “Somos un movimiento netamente cívico y comunal, sin ningún color político”, nos dijo.

Los otros dos grupos pro-revocatoria

Luego de la inscripción del primer comité que quiere tumbar a Duque, el mandatario salió a decir en una entrevista que le hizo El Universal sobre esa iniciativa que “eso no va para ningún lado”.

Pero lejos de conseguir con esa entrevista que la idea de sacarlo del primer cargo de la ciudad saliera de la agenda, ese fin se afianza cada vez. La prueba de ello es la existencia de otros dos comités cuyos líderes hablaron por aparte con La Silla Caribe y coincidieron en que no darán su brazo a torcer.

Esos dos movimientos también tienen vasos comunicantes con políticos derrotados en las pasadas elecciones.

Uno es liderado por el político Libardo Díaz, quien fue candidato al Concejo en las pasadas regionales avalado por el Partido Conservador y respaldando al candidato azul a la alcaldía Antonio Quinto Guerra.

Pese a esa relación y a la amistad que tanto Quinto como Díaz reconocen, ambos niegan estar juntos en este movimiento.

Sin embargo, el excandidato nos dijo que está “analizando a cuál grupo apoyar” y descartó la creación de otro, por lo que en la Cartagena política lo ven como eventual respaldo del comité de su amigo.

El grupo de Díaz, según nos contó, está conformado por unas 66 personas y ya cuenta con una junta directiva.

“Vamos a inscribir en la Cámara de Comercio la Fundación Por Cartagena y después inscribimos el comité”, expresó, a la vez que no descartó unirse a otro grupo que busque revocar al Alcalde.

En la otra orilla, están fuerzas de izquierda que han decidido hacer rancho aparte para adelantar el proceso de revocatoria porque no ven en el grupo que ya se inscribió “una figura fuerte que le de seriedad al movimiento”, como nos dijo uno de sus miembros.

Ese otro grupo de ciudadanos se reunió por primera vez ayer jueves y es tal vez el que menos ha avanzado en este proceso, porque aún no tiene un nombre ni se han hecho públicos los líderes del mismo.  Pero La Caribe estableció que detrás hay dirigentes del Polo Democrático, de la Alianza Verde y otros políticos locales.

Aunque por ahora van separados, los tres movimientos tienen en común las razones para impedir que el alcalde Manolo Duque termine su mandato: el inconformismo ciudadano y la inseguridad.

Las razones para revocar

Los dos argumentos centrales de los interesados en tumbar al Alcalde de Cartagena tienen su respaldo en cifras.

Porque, además de que es evidente en las redes sociales, en los foros de los medios de comunicación locales y hasta en las calles, las encuestas dan cuenta de la desfavorabilidad que tiene el mandatario.

En el último sondeo de Cifras & Conceptos -que mide la opinión de los líderes del país sobre varios temas- Manolo Duque fue el peor calificado.

En el tema de seguridad, aunque los homicidios y robos bajaron en 2016 respecto a 2015, las cifras siguen siendo altas: más de 170 asesinatos, lo que equivale a una tasa de 17 homicidiis por cada 100 mil habitantes, y más de 1100 hurtos.

A esto se suma que muchas de sus medidas para controlar la inseguridad son leídas como excluyentes, como es el caso de la restricción de la circulación de motos con parrilleros, pero sólo en sectores estrato alto como Bocagrande, Castillogrande, Manga entre otras zonas del norte de la ciudad.

Eso en respuesta a una seguidilla de hechos violentos que se presentaron en la ciudad en el mes de septiembre y que tuvieron como escenario, precisamente, estas zonas donde más se mueven los turistas.

A nivel nacional, nunca ha prosperado un proceso de revocatoria de un mandatario. Sin embargo, esta idea de quitar a Manolo de la silla de alcalde tiene una particularidad y es que sería el primer proceso que se da en la ciudad tras la aprobación de la nueva Ley 1757 de 2015 que hizo este mecanismo más flexible.

Por ejemplo, ya el tope de firmas que se necesitan para empezar la revocatoria es del 30 por ciento de los votos con los que fue elegido el funcionario que buscan revocar y no el 40 por ciento. Es decir que necesitan 50.976 rúbricas en el caso de Duque.

Los políticos cercanos a los grupos sacaron en total 148.901 votos (48.543 votos Betancourt y 100.358 Quinto Guerra). Son estas cifras lo que hace que el 2017 sea un año que empieza empantanado para el alcalde Manolo Duque y su gobierno.