Convertir a Coldeportes en Ministerio es uno de los proyectos que ha avanzado en la lenta agenda del semestre. En privado, Duque no avala el cambio de sede.
MinDeporte en Cali, el inesperado pulso regional entre Congreso y Duque
El presidente Duque en la entrega del pabellón a la selección Colombia de las Olimpiadas Juveniles. Allí dijo que quería ser recordado como el Presidente del deporte. Foto: Presidencia.
Si nada cambia, antes de terminar este semestre la Comisión Primera de la Cámara arrancará el penúltimo debate de la reforma constitucional que convertirá a Coldeportes en Ministerio del Deporte y que incluye su traslado a Cali. Un cambio que llegó a última hora al Congreso, que impulsaron parlamentarios del Pacífico y que cogió por sorpresa al Gobierno.
Sería la primera vez en la historia reciente que un Ministerio no tenga a Bogotá como sede, un cambio que los promotores defienden porque saca al Estado de la capital, y es un primer paso para la descentralización. El Gobierno no está de acuerdo por razones legales, de plata y de conexión con el poder central para llevarlo a cabo.
Un cambio y un pulso inesperados
La transformación de Coldeportes en un Ministerio arrancó en 2012 cuando la entidad comenzó a tener asiento en el Consejo de Ministros. En abril de este año el gobierno Santos 2 radicó una reforma para elevarlo a rango ministerial, pero se hundió por falta de trámite.
Con Iván Duque en Palacio y una promesa de convertir a Coldeportes en Ministerio, el proyecto tuvo su segundo aire. Pero en la versión radicada en julio por el Gobierno, la sede seguía siendo Bogotá (como en el primer proyecto de abril).
Según nos dijo el director de Coldeportes, Ernesto Lucena, el Gobierno no esperaba que el cambio de Cali como sede tuviera acogida dentro del Congreso y que Duque está en contra de ese cambio.
“Al Presidente le parece que jurídicamente es inviable. Públicamente no lo ha dicho porque no le han preguntado. Él me dijo que lo que le interesa es crear el Ministerio, es una promesa de campaña, pero nos parece inconveniente el cambio de sede”, nos dijo Lucena.
Quienes están en contra dicen que hay razones legales y financieras para evitar trasladar todo un Ministerio de ciudad.
“La Constitución dice que la sede de Gobierno es Bogotá. Trasladar todo un Ministerio va en contra de la ley”, nos dijo el senador uribista Santiago Valencia, quien se opuso en los dos debates en Senado.
Lucena también dice tener razones laborales y de plata para no hacer el cambio.
“No es un tema de regionalismos. Tenemos 200 empleados y más de 450 contratistas ¿qué pasaría con ellos? Muchos pondrían demandas por el cambio de domicilio en el contrato. Esto (el cambio de sede) no resiste una tutela”, nos dijo.
También hay, dice, razones deportivas, como que Coldeportes trabaja de la mano con el Comité Olímpico Colombiano -“que me queda a 30 pasos de la oficina hoy”, nos dijo Lucena- en el ciclo olímpico de los deportistas que dura todo el cuatrenio entre olimpiadas.
Es por estas razones que por ejemplo, el presidente del comité, Baltazar Medina, ha sido un férreo opositor del traslado, pero poco ha avanzado el Gobierno en lograr más apoyos dentro del Congreso.
”Al Presidente le parece jurídicamente inviable”
Mientras los que están a favor lo alientan porque sería un primer paso hacia la descentralización estatal.
El senador Luis Fernando Velasco, liberal del Cauca, fue quien impulsó el cambio de sede, que pasó en Comisión Primera (donde se introdujo la reforma) y en Plenaria la semana pasada con una votación de 80-14, incluida toda la bancada del Pacífico (17 senadores) y el líder de la coalición de Gobierno, Álvaro Uribe.
Ante la crítica de que el cambio sería ilegal, Velasco nos dijo que lo propuso basado en una norma que él mismo impulsó hace seis años en el código municipal para la desconcentración estatal, es decir, que ministerios y superintendencias tuvieran su sede fuera de Bogotá.
“Lo más lógico que la Superintendencia de Puertos esté en los puertos; que el Ministerio de Ambiente esté en el macizo, el Ica en un departamento ganadero; con Cali hay una oportunidad porque tiene experiencia en eventos deportivos, tiene la Escuela del deporte, fue elegida capital mundial deportiva. Es comenzar a pensar en desconcentrar el poder”, nos dijo.
Sobre los empleados, nos dijo que el Gobierno podría revisar el traslado de los funcionarios y contratistas e incluso “la calidad y costo de vida de Cali es más barata que en Bogotá”.
”Lo más lógico es desconcentrar al Estado de Bogotá”
“Para la vida económica de pequeñas ciudades que llegue una entidad es importantísimo. Que funcione aquí en Bogotá mueve la economía pero no es igual de importante a que lleguen (los ministerios) a ciudades pequeñas como Quibdó o Valledupar”, nos dijo el Senador.
Lucena nos dijo que si al final se da el cambio tendrían que despedir a los funcionarios y contratar nuevos en Cali.
Más allá de las consideraciones legales y financieras (Coldeportes no sabe aún cuánto costará el traslado), cambiar de sede también tendría posibilidad latente de que la entidad se convierta en un fortín político local, en una región donde el deporte ha sido usado electoralmente.
¿Otro fortín electoral?
Como hemos contado el manejo de escenarios deportivos y la contratación de entrenadores y educadores en barrios de Cali y Valle ha sido una forma de lograr réditos políticos y electorales. Así ocurrió en época del plebiscito con Indeportes del Valle o con la Secretaría del Deporte de Cali, que era un “fortín de los concejales”, según una alta fuente de la Alcaldía de esa ciudad.
“Tendría que ser muy ingenuo para pensar que no hay una posibilidad de que el Ministerio se vuelva un fortín político”, nos dijo un alto funcionario del Gobierno que conoce de la movida pero que nos pidió no citar su nombre.
”¿Qué pasaría con los 650 empleados que trabajan en la sede de Bogotá?”
Y Valle ha sido beneficiado localmente por Coldeportes, como mostramos durante la administración de la anterior directora Clara Luz Roldán, hoy candidata a la Gobernación para reemplazar a su amiga, Dilian Francisca Toro.
En el ámbito más local, un alto funcionario de la Alcaldía nos dijo que con o sin Ministerio en la capital del Valle, hay temor con la asignación de recursos para el deporte para los próximos años porque, con la designación de Cali como distrito deportivo, al menos el 10 por ciento será manejado por los nuevos alcaldes locales lo que podría volverse un botín político.
No obstante, el senador Velasco y otros tres congresistas de la bancada valluna rivales de la gobernadora Toro nos negaron que la poderosa baronesa electoral esté haciendo lobby por la sede caleña.
“Espero que todos los gobernadores nos ayuden, pero con ella ni he hablado”, nos dijo Velasco.
“Eso (la politización) dependerá más del Presidente, si quiere nombrar un Ministro para que haga política perversa y que efectivamente la politice”, nos dijo el representante valluno liberal Juan Fernando Reyes Kuri, quien será el ponente de la reforma en Cámara.
”Politizar la entidad dependerá del Presidente”
Para nuestro experto de la Red Pacífico, Jorge Mario Escobar, el problema no es que el próximo Ministerio se vuelva fortín político si aterriza en Cali, sino que Coldeportes no tiene aún una política territorial clara. “El tema funcional le imposibilitaría trabajar desde Cali”, nos dijo.
En menos de tres semanas el debate continuará en la Comisión Primera de Cámara.
El Gobierno, nos dijo Lucena, apelará a convencer a los representantes, que muchas veces se oponen al ‘centralismo bogotano’, de no mover la sede, con argumentos legales o con conceptos del departamento para la Función Pública.
Todo un reto en ciernes teniendo en cuenta que, como ha pasado con las reformas más importantes a las que le apuesta el Gobierno no tiene mayorías suficientes para aprobarlas, por lo que este es un pulso que se le creció a Duque y que tendrá que enfrentar.