En la misma foto de apoyos al aspirante a la Alcaldía estarán el grupo de la gobernadora Dilian Francisca Toro, Gustavo Petro, la izquierda y los liberales. Antiuribismo, cuotas políticas y discursos de paz, la clave del teflón.
El todo vale de Jorge Iván le da el empujón final en Cali
Foto: Twitter Jorge Iván Ospina.
Con el aterrizaje del grupo de la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro (que anticipamos), a su campaña, el candidato verde a la Alcaldía de Cali, Jorge Iván Ospina, logró consolidar una alianza que tiene en la misma foto a Gustavo Petro, parte del Polo, un partido afro y grupos tradicionales como los liberales, La U.
Este todo vale para volver a la Alcaldía le da impulso a Ospina para desmarcarse de su más cercano competidor Roberto ‘Chontico’ Ortíz, quien se quedó con los partidos de la derecha: Centro Democrático, Mira, Partido Conservador y la mayoría de Cambio Radical.
Esto y que a seis semanas de elecciones no haya a la vista una tercería consolidada vía el fajardista Alejandro Eder, configuran el panorama para Ospina, en una mezcla de apoyos populares, petristas y de maquinarias.
Amigos, paz, antiuribismo y cuotas, claves en el todo vale
En menos de cuatro meses, Ospina recogió a toda La U, los liberales y los afrosantistas del partido Colombia Renaciente, en movidas que combinaron que conocía a políticos de esos partidos desde que gobernó en 2007, puntos en común como la paz y el antiuribismo y acuerdos políticos a futuro.
”nos une emancipar a Cali, consolidar el acuerdo de paz, y una política alejada del miedo”
Jugó a su favor que otros candidatos no eran tan atractivos para esos partidos.
A ‘Chontico’ Ortíz, su cercanía con el uribismo los ahuyentó en una región donde al Centro Democrático no le ha ido bien en las locales.
Y a Alejandro Eder, aspirante fajardista, nunca fue atractivo porque rechazó a las colectividades y éstas lo veían como “el candidato del Club Colombia”, en referencia a estar apoyado por los cacaos caleños y no calar en estratos medios y bajos que son los que más votan en en octubre.
El apoyo más reciente que aterrizó con Ospina fue el de Nueva Generación (el grupo de Dilian) en un evento de esta semana con 3.500 personas en un coliseo caleño.
Es la facción de La U más fuerte en Valle con bancada propia de cinco congresistas, tres de ellos con votación fuerte en Cali (Roosevelt Rodríguez, Norma Hurtado y Jorge Tamayo), cuatro concejales y una aceitada maquinaria burocrática.
Tenía aliados como el representante Tamayo; y allí pesó que apoyar a ‘Chontico’ -respaldado por el uribismo que apoyó el No-, era un riesgo político.
Sobre todo para la aspiración de su principal apuesta: Clara Luz Roldán como gobernadora.
“Analizamos y en la elección pasada nos partimos: unos nos fuimos con Armitage, y otros con Angelino, eso fue una equivocación. Dijimos que no nos podíamos volver a equivocar”, nos dijo el representante Tamayo.
”Ospina puede ver en qué somos buenos y dar gobernabilidad”
En la campaña de Ospina ven la adhesión como “un pulso que le ganamos al uribismo”, como nos dijo el coordinador municipal de la campaña y miembro de la dirección verde, Jaime Sierra.
“(Con La U) nos une la necesidad de emancipar a Cali, consolidar el acuerdo de paz, y una manera de hacer política alejada de la política del miedo”, nos dijo Ospina, en referencia a la campaña de ‘Chontico’ a la que acusó de “falsear datos” con el video falso que circuló en redes sobre una posible alianza del candidato con las Farc.
Impedir que ganara el uribismo en Cali, una ciudad de voto alternativo y de izquierda, fue la razón por la que ya antes había llegado el grupo del senador Roy Barreras.
“El otro candidato es el del uribismo y no le da garantías a Cali como capital del posconflicto. Cali no es negocio, ni una empresa que se administre como un juego de azar”, nos dijo el senador Barreras en relación a ‘Chontico’, quien es empresario del chance.
Una razón similar ocurrió con Colombia Renaciente, el partido afro santista que no inscribió candidatura y cuyas cabezas son cercanas a Dilian, vía el congresista John Arley Murillo y a Roy, vía su hijo, el directivo Roy Alejandro Barreras.
”La idea es que gobiernen con nosotros”
Con los Liberales, que llegaron en julio, Ospina ya tenía cercanía desde su primera Alcaldía con políticos con votos propios y maquinarias fuertes como como Fabio Arroyave, Juan Manuel Chicango, Clementina Vélez y Carlos Pinilla.
Y se sumó el papayazo de que los liberales no apostaron a la Alcaldía y ‘Chontico’ renunció al partido e inscribió su candidatura con 300 mil firmas.
Además del antiuribismo, la paz y los papayazos, están las promesas de que esos partidos tengan tajada en la Alcaldía.
“No tenemos acordado en específico ninguna secretaría o instituto del Estado, tenemos acordadas líneas programáticas y sí, efectivamente la idea es que gobiernen con nosotros, que sean gobiernos de pluralidad”, nos dijo Ospina.
“Les ha dicho a todos: no se preocupe que va a haber espacio. Las fuerzas que están con él han confiado en que habrá espacio”, nos dijo Roy Alejandro Barreras; “hay campos donde somos buenos como en deporte y salud. Jorge Iván puede ver eso y darnos gobernabilidad. Así funciona la política en todo el mundo”, nos dijo Tamayo; “no puede ser desconocido en el tema del gobierno”, nos dijo el liberal Arroyave.
Y no es nuevo que haga acuerdos con varios sectores para llegar a la Alcaldía. En su primera administración hizo acuerdos con el Polo, la ASI, el sector del exgobernador Angelino Garzón, con el hoy destituido exgobernador Juan Carlos Abadía y con el exsenador parapolítico Juan Carlos Martínez Sinisterra.
Lograr montar a todas estas estructuras a su alrededor garantiza, además, gobernabilidad en un posible mandato y más teflón a su ya alta imagen (que se traduce en que en las encuestas está entre el 30 y 40 por ciento de intención de voto), pese a que dentro de su todo vale haya figuras que en lo nacional son distantes, y que tiene líos judiciales encima.
A mantener el teflón
Cali es la segunda gran apuesta del partido Verde después de Bogotá, y los problemas judiciales de Ospina y las alianzas que hizo pueden poner a prueba los discursos anticorrupción y anticlientelismo con los que los verdes hacen política habitualmente.
Por ahora, el sector fajardista de los verdes, representado en la congresista Catalina Ortíz (única fajardista en la Cámara electa con votos de opinión caleños), calificó de "traición" la alianza de Ospina
”El contrato no fue firmado por mí y lo denuncié”
Pero hay dos muestras de que Ospina mantiene el teflón.
Por un lado está que pese a tener investigaciones disciplinarias y una imputación de cargos, desde ese momento han llegado más apoyos como el de toda La U.
Ospina ha mantenido y vendido el discurso entre su partido, sus bases y políticos de que la imputación de cargos en la Fiscalía por la firma de un contrato con una empresa sin requisitos legales (que detallamos acá) está basado en hechos falsos.
“¿Por qué lo estallan 12 años después del supuesto ilícito, a puertas de una elección?, (el contrato) no fue firmado por mí, (fue) denunciado por mí, lo que define claramente un vil montaje”, nos dijo Ospina.
Hasta ahora, sus competidores no han logrado capitalizar la imputación a su favor, e incluso el mismo Petro, antes de la imputación, auguró una persecución política en contra de Ospina.
Ha comenzado la persecusion contra los candidatos alternativos al uribismo en la disputa del Poder Local. La fiscalía y la contraloría van contra Caicedo y Jorge Ivan Ospina para evitar que ganen en el Magdalena y Cali
— Gustavo Petro (@petrogustavo) March 16, 2019
Lo segundo es que al petrismo no le importa montarse en tarima con estructuras que ellos mismos critican. El próximo 20 de septiembre el Senador hará un acto en plaza pública con Ospina.
Más llamativo aún que la principal apuesta en Valle de Petro es que la Gobernadora no deje heredera. La movida sería porque Cali es una de las pocas capitales del país donde Petro tiene una apuesta que pinta fuerte.
Cómo se muevan los competidores de Ospina, en especial Ortíz y Eder en las próximas seis semanas, determinará si la campaña sigue el rumbo que está tomando.
Si Ortíz crece más allá del uribismo, sobre todo el voto que pelea con Ospina en las clases populares, podría quitarle espacio. El empresario del chance tiene a su favor un músculo económico propio y una base alineada de apoyos producto de su empresa.
Si Eder logra conformar una tercería con alianzas con otros aspirantes, podría mostrarse viable. Pero, si bien apunta al voto de opinión (difícilmente medible en encuestas), no es claro que logre alianzas en las próximas semanas, sobre todo porque aspirantes con los que podría hacerla, Michel Maya de ASI y Alex Durán por firmas, insisten en que llegarán hasta el final.
Solo en seis semanas se sabrá si este todo vale y la foto logra volver a la Alcaldía.