Duque prometió que en sus primeros días de gobierno los iba a hacer allá. Pero después de un mes de posesión no ha ido, ni tiene programado ir pronto con sus Talleres Construyendo País.
La promesa que Duque le va incumpliendo a Caquetá
Iván Duque hizo varias visitas a Caquetá en la campaña a Presidencia.
En las cuatro visitas que Iván Duque hizo a Caquetá como candidato entre marzo de 2017 y mayo pasado, prometió que sus primeros días de gobierno los iba a hacer allá. Pero después de un mes de posesión no ha ido, ni tiene programado ir pronto con sus Talleres Construyendo País.
Eso a pesar de que este departamento es clave porque es justo aquí se está dando la crecida de las disidencias a las que prometió combatir, porque aquí fue la última vez que se supo de Iván Márquez y ‘El Paisa’, y porque está disparada la deforestación que amenaza con llevarse por delante la biodiversidad de la Amazonía. Además que es un departamento uribista.
La promesa
“Senador Macías, yo le dije a mis amigos de Caquetá que en los primeros días de Gobierno quería que me alistaran una camita para estar acá un par de días. ¿Me van a recibir? Yo me emociono. Siempre que vengo a Caquetá me regreso recargado”, dijo Duque en la última visita que hizo a Florencia el 10 de mayo, en la que prometió mano dura para que la violencia no volviera al departamento.
Antes, en febrero, incluso dijo que desde allá iba a gobernar 15 días seguidos apenas entrara a Casa de Nariño.
Pero pasados los primeros días de Gobierno, Caquetá no ha entrado en el radar de Duque, ni en el cronograma de los llamados Talleres Construyendo País con los que está recorriendo el país porque ya se conocen los lugares que el Presidente visitará en los fines de semana que hay de acá hasta diciembre, y Caquetá no aparece.
En los demás departamentos del Sur, Huila (29 de septiembre), Putumayo (27 de octubre) y Amazonas (3 de noviembre) ya están programados los talleres en los que Duque va y asume compromisos con gobernadores y alcaldes, como ya lo ha hecho en Cundinamarca, Santander, Valle y Antioquia.
Más allá de si se trató de una estrategia de la campaña para ganar votos o si no ha podido cumplir por temas de agenda, en Caquetá Duque tiene varios retos.
Por un lado está evitar que la violencia y la presión que antes ejercían las Farc y, que había bajado con el acuerdo de paz, regrese de la mano de las disidencias.
Como lo contó La Silla Sur, desde Caquetá y bajo el mando de Gentil Duarte, los guerrilleros que no se metieron al acuerdo están tratando de crear un ‘bloque Sur’, que logrando una mayor coordinación con otras disidencias, bloquee la sustitución de la coca en la región y vuelva a regular la vida de los campesinos a través de las juntas de acción comunal.
Ese embrión de una nueva guerrilla incluye a la disidencia de ‘alias Guacho’, que está en Tumaco, Nariño, y ya se extendió hasta el Catatumbo de Norte de Santander bajo la coordinación de alias 'John 40'.
Además ya hay reportes de que esas disidencias están reclutando niños.
Aparte de ser el caldo de cultivos de esas disidencias, Caquetá es clave para entender qué pasó con exguerrilleros de alto mando como Iván Márquez y alias ‘El Paisa’, que estaban resguardados en la zona veredal de Miravalle en San Vicente del Caguán, y de los que no sabe nada desde más de un mes.
La ausencia de los dos no solo ha alimentado el rumor de que podrían haber llegado a una disidencia, sino que ha generado divisiones y dudas dentro del partido político de la Farc porque ni ellos, dicen, saben de sus paraderos.
Otro asunto del que el gobierno Duque también debe priorizar en Caquetá es el de la deforestación que según el Ideam está disparada por el acaparamiento ilegal de tierras (en un 65 por ciento) y el aumento de los cultivos de coca (en un 22 por ciento).
A eso se suma que Caquetá también ha sido blanco de asesinatos y amenazas a líderes sociales.