Cuando ingresé a la institución, mi mamá me dijo: “no entiendo por qué con su papá hacemos el esfuerzo de pagarle la carrera de oficial de policía, para que exponga su vida”. Cuando vi a mi compañero en fuego la semana pasada, recordé esta frase.
La protesta social, desde la mirada de un policía
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Algo importante para la construcción de ciudadanía es aceptar que los acuerdos tácitos de la sociedad contienen intrínsecamente el respeto por nuestras diferencias y las elecciones personales. Los policías respetamos y garantizamos el ejercicio del derecho a la protesta, pero también los derechos de quienes no participan en ellas y a veces son afectados de forma colateral
Respeto por los derechos de todos
En Colombia, nuestra Constitución proclama que todos somos iguales y que no existirá discriminación de ningún tipo. Por esto, los derechos individuales llegan hasta donde se afectan los de los demás.
Todos queremos mejor educación pública, condiciones laborales y de vida justas, todos estamos de acuerdo en respetar el derecho a la protesta. En lo que no hay consenso, es en el uso de ese derecho para generar vandalismo y dañar la propiedad privada y los bienes públicos. Asimismo, afectar la tranquilidad de los ciudadanos, que de acuerdo o no con lo que se protesta, pueden gozar de sus derechos.
Si parte de una sociedad educada es respetar las diferencias, no se entiende por qué en las redes sociales la protesta genera ese sentimiento de “haters”, quienes buscan afectar la reputación de las personas y organizaciones, sin a veces no poseer argumentos sólidos en su crítica, y no tienen la intención de mejorar un problema, conllevando al lanzamiento de críticas sin conocer el servicio de policía, para este caso.
Todos somos ciudadanos/as en el ejercicio de los derechos, pero a veces se percibe que por portar uniforme y pertenecer a la Fuerza Pública se pueden vulnerar nuestro derecho a la vida, la integridad, e inclusive el libre desarrollo de la personalidad. Esto lleva a preguntar ¿defender el derecho a la protesta implica vulnerar los derechos de los ciudadanos que hacen cumplir la Ley?, a pesar de que los policías también tenemos familias, que quieren que lleguemos sanos y salvos de todo mal.
Entonces, la elección de pertenecer a una institución que protege a los ciudadanos, en nombre del derecho a la protesta, significa limitar y vulnerar los derechos de los uniformados, por esto ¿los ciudadanos policías pueden ser objeto de vulneración de sus derechos?
Esa justificación de derechos, significa para algunos, que no tengan respeto hacia el hombre y la mujer policía ¿eso les enseñarían sus padres? o ¿la ley no es igual con los policías?
La elección autónoma de estudiar para ser profesional de Policía
Frente al derecho al buen nombre y el respeto por las personas, se reciben insultos de corruptos y brutos, por el hecho de ser uniformados. En las marchas es recurrente el popular estribillo “hay que estudiar, hay que estudiar, el que no estudie es Policía Nacional”, lo cual solo se convierte en un catalizador del odio hacía la Fuerza Pública, generalizando un estilo de vida en el cual los hombres y mujeres comúnmente llamados “robocop” o ESMAD han estudiado profesiones liberales, en diferentes niveles.
La elección de ser policía es la misma de ser ingeniero, abogado o matemático, la cual se realiza terminando el colegio, y todos desde esa elección queremos una mejor calidad de vida, movilidad social y un mejor país. La elección personal de ser policía implica, no tener el derecho al sufragio, no pertenecer a un partido político, ni tampoco realizar proselitismo político.
Con las últimas protestas, en redes sociales se percibe odio e irrespeto a la decisión personal y autónoma de pertenecer a la Policía Nacional, y me pregunto por qué.
En mi experiencia, cuando un ciudadano lo ha necesitado, siempre sin falta se le ha ayudado, sin ningún tipo de reparo, obviamente no todo es perfecto, pero se habla de la tendencia no de las excepciones.
Los profesionales de Policía nos formamos en la Dirección Nacional de Escuelas de la Policía Nacional de Colombia, de donde dependen todas las escuelas formación y capacitación a nivel país, es uno de los sistemas educativos más grandes del país, es una Institución de Educación Superior “pública”, acreditada en alta calidad por el Ministerio de Educación Nacional.
Por lo anterior, en lo personal, he tenido debates donde manifiestan que no es pública porque "le servimos a ellos", siempre pregunto ¿quiénes son ellos? Y no me dan razón, ninguna característica de ellos, son invisibles.
Tan solo les manifiesto que quienes eligen los gobernantes son los colombianos, y los elegidos por ustedes ciudadanos son nuestros jefes.
El derecho a la protesta es un medio, no un fin
Juan Camilo Córdoba, estudioso de los temas de conflictividad social, indica que la última década se ha caracterizado por el incremento de la protesta social como medio de convocatoria para promover diferentes causas, y mostrar el rechazo que presenta la sociedad frente a los inconformismos por las políticas del Gobiernos o situaciones de desigualdad en todo el territorio nacional.
Sin embargo, acciones legítimamente constituidas como la protest se han convertido en algunas ocasiones en focos de violencia debido a unas pocas personas que realizan actos contrarios a la convivencia.
En épocas como estas se refleja el rechazo en contra de la Policía Nacional por sus acciones en las protestas, pero realmente nos hemos preguntado ¿en qué momentos actúan los uniformados?
No he visto en mi experiencia que un escuadrón del Esmad se encuentre todos los días a cada hora al interior de las universidades, porque quieren atropellar estudiantes, o que exista una electiva en las carreras en las cuales se enseñe a dañar la propiedad y personas en las protestas.
Lo anterior, resuelve la pregunta expuesta. La Policía Nacional actúa solamente cuando se afecta derechos de un tercero, cuando la protesta sale de su curso normal y transgrede bienes, derechos, o vidas; tanto de la persona que está en la marcha, como de quién no tiene ni idea que está pasando y se pregunta que hace esa gente en la calle, o de los mismos miembros de la Fuerza Pública.
Reflexiones y preguntas como Colombiano
¿Estamos en un juego de aprender a ser ciudadanos? ¿La ciencia no ha encontrado otras opciones más allá de la protesta para resolver los asuntos de interés público? y ¿No se ha diseñado una forma de evitar vándalos en las protestas?
Por mi uniforme me endilgan responsabilidades históricas, de antes de mi nacimiento, sobre “opresión al pueblo”. He sido policía en cuatro gobiernos, pero durante mi vida en esos periodos presidenciales me han gritado lo mismo, pero muchos de quienes lo gritan tampoco habían nacido.
Si los ciudadanos, como constituyentes primarios, recuerdan que cuando eligen gobernantes eligen a los máximos directivos de la Fuerza Pública. Ellos, con su voto, eligen la filosofía de la política pública en los asuntos públicos, entre ellos la de seguridad ciudadana.
Para finalizar, si se exige una mejor educación pública, con principios de mayor inclusión y mayor cobertura ¿por qué los policías no podemos ingresar uniformados a algunas de ellas a estudiar como cualquier otro colombiano?
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