Vuelve la llave Rojas - Pretelt

Imagen

Los magistrados Alberto Rojas y Jorge Pretelt tomaron unas decisiones muy llamativas en la más reciente sala para elegir las tutelas que revisará la Corte Constitucional

Ayer se supo que sucedió algo insólito en la Corte Constitucional.En la sala de selección de tutelas conformada por los polémicos magistrados Jorge Pretelt y Alberto Rojas ambos se declararon impedidos en distintos casos importantes y aunque se aceptaron mutuamente los impedimentos terminaron escogiendo las tutelas que el otro no podía mirar. Con lo cual, el resultado fue el mismo: las tutelas quedaron seleccionadas.

 

Se trata de dos tutelas que favorecen a antiguos miembros del Gobierno Uribe y otra, de un ex magistrado conservador que quiere recuperar su cargo como magistrado y en la cual Rojas se declaró impedido porque dijo que él mismo tiene algún interés en el resultado, posiblemente porque está cerca de la edad de retiro que llevó a ese magistrado a perder el puesto.

La cuarta favorece a un ocupante de tierras de buena fe en la que Pretelt se declaró impedido porque él o algún familiar tiene un interés directo

El procedimiento novedoso

Las salas de selección son el espacio en que la Corte elige, entre las cientos de miles de tutelas que se deciden en el país al año, cuáles merecen que ella revise. Como eso le deja un margen amplio para decidir, el poder que da seleccionar es grande.

De hecho el escándalo Fidupetrol, que es el que tiene a Pretelt en un proceso penal, parte de que supuestamente el magistrado habría cobrado plata a cambio de ayudar a seleccionar una tutela. En reacción al escándalo, la Corte decidió darle más publicidad al proceso de selección de las tutelas, haciendo pública la audiencia en la que se cuenta qué se seleccionó y por qué, y luego se sortean los ponentes de las tutelas seleccionadas.

El auto de la sala del 31 de abril que se conoció ayer el que muestra cómo Pretelt y Rojas se aceptaron mutuamente los impedimentos del otro en cuatro tutelas, pero terminaron aceptándolas con el voto del que no se declaró impedido.

Eso llama la atención por varios motivos.

El primero es el manejo de los impedimentos.

Estos no son muy usuales (en las 11 salas de selección de esta año solo solo una vez se habían presentado impedimentos, y el año pasado esa situación solo ocurrió en 9 de las 47 salas) y entre el año pasado y éste solo una vez se declaró impedido más de un magistrado en una sala de selección, con la diferencia de que en ese caso se declararon impedidos los dos miembros de la sala (María Victoria Calle y Jorge Iván Palacio) por la misma tutela y, por lo tanto, el caso pasó a una sala con otros dos magistrados para que decidieran.

Lo que no tiene antecedentes -por lo menos en las salas del año pasado y del actual- es que los dos magistrados de una sala se declaren impedidos en tutelas diferentes, que el otro magistrado acepte el impedimento, y que luego seleccione todas las tutelas por la que su compañero de sala se declaró impedido. Es decir, hasta ahora nunca se había dado un “yo me declaro impedido y tú seleccionas, tú te declaras impedido y yo selecciono”.

Por ejemplo, en enero de este año la magistrada Calle se declaró impedida en tres tutelas en una sala que compartió con Rojas, y éste luego seleccionó uno de los tres casos y rechazó los otros dos.

El hecho es más llamativo porque Rojas y Pretelt han sido aliados en la Corte. Aunque Rojas es liberal y Pretelt conservador, y se habían distanciado hasta el punto de que Rojas votó a favor de pedirle la renuncia a Pretelt por el escándalo, sus relaciones son de vieja data.

De hecho, en la tutela de Fidupetrol que tiene a Pretelt ad portas de un juicio, fue Rojas quien la seleccionó, por lo que la Fiscalía lo ha señalado de haber participado en el presunto delito. Es decir, de haber sido cómplice de Pretelt.

Además, esos dos magistrados se caracterizan por buscar que la Corte seleccione tutelas para grandes negocios y así prácticamente la convierte en una tercera instancia, como demostró La Silla en estas dos historias.

Y el tercer hecho llamativo es que por lo menos tres de los beneficiados en estas tutelas son figuras visibles con vínculos con el uribismo.

Los beneficiados

Una de las tutelas beneficiadas por la decisión es la del ex secretario de Álvaro Uribe en la Presidencia, Alberto Velásquez, contra la sala penal de la Corte Suprema, que lo condenó a cinco años de cárcel por el escándalo de la 'yidispolítica'.

Ese caso ya había sido revisado por una sala de selección de la corte (la de Rojas y Calle en enero) y había sido rechazado. Pero los magistrados Luis Guillermo Guerrero y Alejandro Linares insistieron en que la Corte lo seleccionara porque posiblemente la Corte Suprema desconoció un precedente de la Corte Constitucional, y por eso el caso llegó a la sala de Rojas y Pretelt.

En esa sala, Rojas se declaró impedido por haber hablado del caso en un foro académico. Y Pretelt decidió que la Corte sí debe meterse en él. Hoy el caso está en el despacho de otro magistrado conservador, Gabriel Eduardo Mendoza.

La segunda tutela es muy similar. La presentó el ex ministro de salud de Uribe, Diego Palacio contra la sala Penal de la Corte Suprema, también por haber sido condenado por ella en el escándalo de la Yidispolítica. Palacio tuteló y las salas laboral y civil de la Suprema le negaron su recurso.

Aunque a diferencia de la de Velásquez esta tutela no había sido rechazada antes, coincide en que Rojas se declaró impedido y Pretelt decidió solo. Y aceptó la solicitud con el argumento de que la Corte Suprema pudo haber violado un derecho fundamental de Palacio.

Como el anterior, quedó en manos de un magistrado conservador, como es Guerrero.

El tercer caso es el de la tutela del ex consejero de Estado William Giraldo Giraldo (de origen conservador y cercano al hoy uribista Fabio Valencia Cossio contra la entidades públicas que, de diferentes maneras, le negaron su demanda de vovler a ese Tribunal a pesar de haber superado la edad de retiro forzoso de 65 años.

Giraldo tuteló pidiendo que le aplicaran la Reforma a la Justicia, que establece la edad de retiro en 70 años, la sección segunda del Consejo de Estado le negó la tutela en única instancia y ahora ésta llegó a la Corte.

En la sala Rojas se declaró impedido “por tener eventual interés en la pretensión objeto de tutela”, Pretelt la seleccionó y la ponencia le tocó por sorteo a Linares.

El caso es interesante no solo por la pretensión y por la coincidencia en la extracción política de Giraldo y Pretelt, sino porque el mismo magistrado ya dejó una huella en la Corte Constitucional: en 2013 Pretelt tuvo una pelea muy fuerte con los magistrados Palacio y Nilson Pinilla por otra tutela de Giraldo, que trataba de atornillarse en el Consejo de Estado después de cumplir 65 años.

La última es una tutela de Edilio Manuel Meza Pérez contra la sala de restitución de tierras del Tribunal de Cartagena, y que es parte de un largo litigio de Meza por mantener un predio en Ovejas (Sucre), que ese Tribunal decidió que se debía restituir a una víctima, dueña original del predio, en una sentencia de 2013 sin reconocerle derecho a una compensación porque no lo encontró como ocupante de buena fe exenta de culpa.

Meza interpuso la tutela para que el Tribunal lo declare segundo ocupante, lo que le abriría el camino para obtener una compensación. La Sala Civil de la Corte Suprema la negó porque a su juicio el Tribunal tomó una decisión que no es absurda, algo que hay que demostrar para que funcione una tutela contra sentencias.

Inicialmente, la sala de selección de los magistrados Gloria Stella Ortiz y Luis Ernesto Vargas en febrero no la seleccionó. Pero el defensor del pueblo encargado, Alfonso Cajiao, hizo uso de una insistencia para que la Corte lo revisara de nuevo y ahora el expediente quedó en manos de Rojas. Este magistrado decidió seleccionarla porque Pretelt se declaró impedido dado que él o algún familiar suyo tiene un interés en el proceso (no quedó constancia de quién exactamente).

Con las decisiones de esa sala de selección, los dos magistrados más polémicos de la Corte Constitucional suman un nuevo acto a su sonada trayectoria.

Compartir
0