Este domingo estaba planeada la convención del Centro Democrático en Antioquia, que tiene en su orden del día definir la lista de candidatos a la Asamblea y, sobre todo, darle la aprobación final a la ex senadora Liliana Rendón como candidata a la gobernación. Sin embargo, fue aplazada porque lo de Rendón está menos definido de lo que parece y el partido podría dividirse.
El uribismo no se ha desenredado en Antioquia
Este domingo estaba planeada la convención del Centro Democrático en Antioquia, que tiene en su orden del día definir la lista de candidatos a la Asamblea y, sobre todo, darle la aprobación final a la ex senadora Liliana Rendón como candidata a la gobernación. Sin embargo, fue aplazada porque lo de Rendón está menos definido de lo que parece y el partido podría dividirse.
La postergación del domingo no es la primera: la convención, que es la que por estatutos debe entregar formalmente el aval, estaba programada para fines de mayo y se ha movido ya dos veces. Además, la decisión de hacerla este domingo se tomó el viernes pasado, por lo que el reverzazo del lunes es notorio.
Dado que la reunión parecía un acto de trámite, pues Rendón es la única aspirante después de que derrotó al ex diputado Andrés Guerra en una encuesta a principios de mayo, el mes largo de demora lo que muestra para seis uribistas antioqueños consultados es que sigue viva una oposición importante para que Rendón sea la ungida.
“Al no existir consenso, lógicamente, buscamos sacrificar tiempo y no sacrificar unidad. Y aplazar la convención”, explica un directivo del partido en el departamento. Eso fue lo que dijo explícitamente la dirección en el decisión de hace un mes: "El aplazamiento de dicho certamen se debe al propósito de buscar consensos generales sobre el tema de lista para la Asamblea y la Dirección Departamental", dice.
Pero hay otra lectura. “La dirección se aplaza para frenar a Liliana, porque iba a llenar ese lugar y hacerse aclamar y ahí si no habría vuelta atrás”, dice otro.
Una tercera fuente, cercana al triunvirato que dirige ese partido en el departamento (en el que están Guerra Hoyos, el ex ministro Fabio Valencia Cossio y el ex congresista Luis Nolberto Guerra), explicó que esa codirección ha preferido postergar la convención para darle tiempo a que se construya un consenso en torno a Rendón.
Solo uno de los entrevistados, el miembro de la dirección nacional Alejandro Arbeláez, dijo que el aplazamiento era normal, debido a que caía en puente. Pero acepta la resistencia que genera la candidatura de Rendón. “La resistencia a Liliana no es cuento”, dice.
Lilianismo y antililianismo
Como contó la Silla, la candidatura de Rendón (que viene del corazón del grupo conservador del ex gobernador Luis Alfredo Ramos y renunció a su curul en el Senado en 2013 para prepararse para esta campaña) ha creado resistencias entre varios grupos uribistas desde el inicio.
“Varios no se sienten identificados con ella porque representa la vieja forma de hacer política”, dice un aspirante uribista. “Liliana tiene poca entrada en el voto de opinión”, explica un congresista distante de ella.
En esa orilla opuesta a Rendón, algunos de manera más pública que otros, están los senadores José Obdulio Gaviria, Alfredo Ramos y Paola Holguín, y los representantes Federico Hoyos, Margarita Restrepo y Wilson Córdoba, varios de los cuales apoyaron la aspiración de Andrés Guerra a la Gobernación, e incluso promovieron el nombre del ex director de Colciencias Jaime Restrepo Cuartas .
Rendón, por su lado, tiene el apoyo de los otros tres representantes (los ramistas Óscar Darío Pérez y Regina Zuluaga, y Santiago Valencia, hijo de Valencia Cossio). También tiene un apoyo importante en el ex alcalde de Bello Óscar Andrés Pérez, candidato del Centro Democrático en ese municipio y quien viene del grupo político conservador del parapolítico Óscar Suárez Mira.
La tensión entre esos dos grupos no se superó con la encuesta que, como era previsible, le ganó Rendón a Guerra por un amplio margen (la intención de voto de lla fue del 43 por ciento, frente al 13 de él).
Aunque Guerra ahora está dedicado a su campaña a la Asamblea, en la que tiene fijo el primer lugar de la lista cerrada, y no ha marcado distancias con Rendón, varios de quienes lo apoyaron sí se han mantenido lejos de la campaña de la ex senadora.
“Ella tiene mucha resistencia con los parlamentarios y los más jóvenes del partido”, explica un aspirante al concejo de Medellín por el uribismo. Y eso lleva a que el aval que ganó en la encuesta siga en duda
Como quedó claro en la convención para elegir candidato presidencial en 2013, quien define todo es el ex presidente Álvaro Uribe. Y hasta ahora el ex presidente, aunque ha realizado tres recorridos con Rendón como aspirante (que ésta ha difundido para disipar los rumores), no ha dado su guiño. La pregunta es qué haría el uribismo si se queda sin Rendón.
Las alternativas
“La alternativa no es clara. En la dirección departamental, que antes la impulsaba, parece que ha habido cambios respecto a la candidata”, dice un congresista antioqueño.
En el aire hay rumores de que el uribismo podría terminar aliado con alguna de las otras dos candidaturas a la Gobernación: la fajardista de Federico Restrepo o la santista de Luis Pérez, a cambio de que el beneficiado apoye, a su vez, la candidatura del ex senador uribista Juan Carlos Vélez a la alcaldía de Medellín.
Incluso, dos de las fuentes hablaron de la existencia de reuniones, pero La Silla no pudo verificar que se hayan dado. Así lo confirma Arbeláez. “Las conversaciones son puro cuento “, dice, aunque confirma que sí hay rechazo a Rendón.
Y si eso es así y su aspiración peligra, el uribismo tendría que encontrar otro candidato o buscar una alianza. Y todos los entrevistados señalan que la opción sería la segunda.
“Hay dos bloques. Uno con ganas de hacer coalición con el fajardismo para la Gobernación y con eso amarrar al Grupo Empresarial Antioqueño para Juan Carlos Vélez, y el otro con ganas de irse a donde Luis Pérez”, explica una de las fuentes del Centro Democrático.
La disyuntiva no es fácil, según esa misma fuente. “Eso tiene unas aristas tenaces. Si es con Fajardo, Liliana y el ramismo de una se van del Centro Democrático por aquello del libro blanco. Y si es con Luis Pérez, el Grupo Empresarial Antioqueño se emberraca y no apoya a Vélez“.
Otro directivo uribista va aún más allá. “Como veo las cosas, Uribe no le dará el aval a Liliana, ella marcharía con Luis Pérez y Uribe quedará libre para buscar una coalición con el fajardismo. Así las cosas, la disputa seria entre Federico Restrepo apoyado por Fajardo y Uribe, y Luis Pérez apoyado por la Unidad Nacional de Santos”.
Cualquiera de los dos escenarios sería un golpe grande para el uribismo, que aunque lograría darle más bríos a la campaña de Juan Carlos Vélez a la alcaldía de Medellín, también resignaría la posibilidad de quedarse con la Gobernación que ocupó Uribe antes de ser Presidente, dejándole ese cargo a un alfil de Germán Vargas o de Sergio Fajardo, dos de los presidenciables para el 2018. Es decir, reduciría las bases que tendría el uribismo para recuperar el poder en el siguiente cuatrienio.
Y por eso otro de los uribistas consultados ve otra opción que dejaría al uribismo con más fuerza: que Juan Carlos Vélez vaya a la Gobernación (una posibilidad que el candidato acarició hasta diciembre, cuando se decantó por la alcaldía) en alianza con el fajardista con amigos en el uribismo Federico Gutiérrez.
Por ahora está pendiente saber para cuándo queda la convención y qué pasa mientras se reune.