La estrategia de Vargas para crecer en el Valle

Silla Pacífico

El vicepresidente quiere sumar opinión a su maquinaria, poniendo a competir a sus congresistas Carlos Fernando Motoa y José Luis Pérez al Senado en 2018.

Tal y como lo está haciendo en Santander al cocinar una alianza con los Aguilar, en el Valle del Cauca el Vicepresidente Germán Vargas Lleras está armando su estrategia para crecer. Su partido, Cambio Radical, no tiene hoy mucho peso en ese departamento, que pone uno de cada 10 votos en las presidenciales y es el tercero en peso electoral después de Bogotá y Antioquia, algo que para Vargas es clave cambiar si quiere ser presidente en 2018.

Su apuesta es similar a la que tiene en todo el país desde hace una década: sumar maquinaria y los votos de opinión que ha conseguido por sus posiciones de mano dura y la imagen de ejecutor que ha cosechado en los últimos años a punta de casas gratis y carreteras.

Para ello está impulsando desde ahora a un candidato que tiene maquinaria y le está apostando al voto de opinión: el hoy representante a la Cámara José Luis Pérez, que se estrenó en el Congreso en el 2014 y que planea lanzarse al Senado (directamente o por interpuesta persona) en marzo del 2018.

El problema es que esa apuesta pondría a Pérez a competir con el único senador de Cambio en el Valle desde el 2006 y quien según una alta fuente de Cambio es uno de los consentidos de Vargas Lleras, Carlos Fernando Motoa. Así que no se trata de una jugada sin riesgos.

Pero si Pérez logra ese salto y Motoa se reelige, Vargas lograría demostrar que tiene un partido que va creciendo. Y lo haría en las elecciones legislativas de marzo de 2018, solo dos meses antes de la primera vuelta presidencial, justo a tiempo para que el resto de los políticos vallecaucanos decidan a qué candiato presidencial le apuestan -y como suelen acercarse a quien ven como ganador-, sería una señal en el momento perfecto para fortalecer su campaña.

Por ahora todo indica que Vargas quiere que compitan, y que ganen los dos, como le dijo a La Silla una alta fuente de Cambio Radical.

“Te puedo asegurar que para Germán no hay disyuntiva. Pérez es el político de [el alcalde de Cali, Maurice] Armitage y ha crecido mucho”, dijo la fuente. “Ojalá los dos aspiren, hay espacio para los dos. Tienen que trabajar”, dijo.

Pérez, el alfil de Vargas en el Valle

Aunque no es muy conocido a nivel nacional, Pérez es un político tradicional con buenas relaciones con la clase empresarial del departamento, sobre todo en Cali. Eso le ha servido, según cinco fuentes entre políticos y periodistas consultados por La Silla, para ser el nuevo barón electoral de La Sultana del Valle.

Periodista, arrancó su carrera política en los años 90 de la mano del ex ministro conservador Carlos Holguín Sardi. Esa relación duró poco y Pérez buscó asilo en la Alianza Social Indígena, que lo avaló en 2004 para llegar al Concejo de Cali. Desde allí, no ha parado de crecer.

En 2006, logró que sus compañeros lo eligieran por unanimidad como el presidente del Concejo, justo en el año antes de las elecciones y a pesar de ninguno de los otros 20 concejales era de su partido. En 2007 se reeligió y duplicó su votación de 15 a 30 mil votos.

En ese período también llegó a la presidencia del cabildo en el 2008. Según una fuente de la Alcaldía que lo conoce, lo logró porque es un componedor que logra unir bandos que parecen opuestos, lo que también lo llevó a servir de puente entre la administración municipal y el cabildo, agregó otro periodista de Cali.

Cuatro años después se retiró del Concejo, le heredó su curul a Oswaldo Arcos (a quien sólo le endosó unos 10 mil votos) y se fue a trabajar como asesor político del recién llegado Alcalde, el conservador Rodrigo Guerrero, de quien es muy cercano. Estuvo con él seis meses, hasta que renunció para lanzarse al Congreso, esta vez por Cambio y en llave con Motoa.

Su rápido crecimiento se explica no solo en su carácter conciliador sino en que es el único político caleño que le ha apostado a la candidatura de los tres últimos alcaldes de la ciudad, el hoy senador verde Jorge Iván Ospina, Guerrero y el empresario independiente Maurice Armitage. Con los tres no sólo ganó las elecciones sino peso político y puestos en la administración municipal y en Emcali, según tres fuentes consultadas por La Silla.

“Tengo la principal cuota que es el alcalde, lo apoyé para ayudarle a él y a mi ciudad”, le aceptó Pérez a El País en octubre, justo después del triunfo de Armitage. No negó a ese diario tener cuotas dentro de la Administración pero sí dijo no ser “el que más funcionarios tiene”.

Algunas de sus fichas, como contó El País, están o han estado en puestos importantes como Nicolás Orejuela, el jefe de gabinete de Armitage; el ex secretario de Vivienda, Juan Carlos Minotta  (a quién Pérez dice que adoptó, según supo La Silla por una fuente cercana a él) y Alexander Camacho, asesor de la alcaldía en salud.  

Además, es el padrino político del asesor para la participación ciudadana en la Alcaldía, Armando Aristizábal. Como desde que se posesionó el Alcalde implementó la estrategia de hacer reuniones para escuchar los problemas que hay en los barrios y Aristizábal es el que define los invitados a ellos, ese cargo clave. 

Según una fuente cercana a la Alcaldía, algunos políticos y medios han criticado al Alcalde por Aritizábal, pues sienten que mandó el mensaje de que “si alguien no es de Cambio Radical, la alcaldía no lo atiende”. Eso ha llevado a que Armitage regañe al funcionario para que incluya a más gente en las reuniones “para que no nos vayan a decir politiqueros” en al menos dos consejos de Gobierno, cuenta la fuente.

 

El otro activo de Pérez es que es cercano a la clase empresarial del Valle del Cauca. Según un periodista, una persona cercana a la Alcaldía, un político y un empresario, lo es especialmente a Juan Ramón Guzmán, presidente y fundador de Belleza Express, una de las empresas más grandes del Valle que se especializa en la venta de productos de aseo.

Guzmán no sólo es miembro de las juntas directivas de la Unidad de Acción Vallecaucana y la Fundación FDI-Pacífico sino que según dos empresarios caleños es el empresario más cercano tanto al ex alcalde Guerrero, como a Armitage.

“Fue clave para convencerlos a ambos de ser candidatos (la idea de la candidatura de Armitage fue de él) y los ayudó en sus campañas, incluyendo en la consecución de recursos y, todavía habla continuamente con ellos (especialmente con Armitage). Para mí, con bajo perfil y absoluto desinterés, es el empresario más influyente en política en Cali hoy”, le dijo a La Silla uno de ellos. 

Tres de esas fuentes dijeron que Pérez también era cercano al presidente de Colombina, César Caicedo, a su vez cercano a Guzmán, algo que negó el empresario.

La relación de los empresarios con Pérez, según una fuente, “es táctica. Tiene mucho caudal electoral en Cali y es un tipo inteligente y de muy buen trato. [A los empresarios les sirve] para elegir alcalde”, dijo.

Con esos activos y aunque todavía falta un año largo para las elecciones, Pérez está diseñando la estrategia para venderse como el ‘caballito ganador’ con el que Vargas puede ampliar su poder en el Valle. Consiste en sumar a su fortalecida maquinaria política un candidato de opinión que jalone sus listas en los estratos medios y altos de Cali,  algo similar a lo que Vargas Lleras ha usado en otras elecciones con éxito al mezclar a políticos de opinión como Carlos Fernando Galán con caciques locales como Bernabé Celis en Santander o Daira Galvis en la Costa.

Esa estrategia le dio frutos a Pérez en 2015, cuando logró elegir al concejo a Alexandra Hernández, quien fue asesora suya como concejal y luego lo fue de participación ciudadana y de paz en la Alcaldía de Guerrero, y al empresario Diego Sardi de Lima, ex gerente de Ventolini y quien nunca había hecho política.

Por ahora, y según una fuente muy cercana al congresista, Pérez tiene un plan A y un plan B para el 2018.

El A sería lanzar un candidato de opinión al Senado, para el que está considerando según supo La Silla a un ex alcalde, a un ex ministro vallecaucano o a un empresario e irse con él de fórmula a la Cámara.

Si ninguno de los candidatos acepta, según esa fuente, el plan B es lanzarse él al Senado y llevar dos fórmulas a la Cámara, una de opinión y otra de estructura. Todas las otras fuentes consultadas por La Silla, incluyendo dos altas fuertes de Cambio que están al tanto de la estrategia, creen que en realidad ese es su “plan A”.

Por eso, si no hay nombres de fichas suyas a Senado sí hay a Cámara: el de opinión sería Nicolás Orejuela, quien en 2015 ya fue candidato a la Alcaldía apoyado por Pérez, y se retiró con su bendición para respaldar a Armitage, y el de maquinaria sería el ex concejal de su cuerda, Oswaldo Arcos.

En la Cali política no descartan también puedan aspirar el hoy secretario general de Armitage, Juan Fernando Reyes Kuri, muy amigo de Orejuela y quien perdió por poquísimos votos la Cámara del Partido Liberal frente al bonaverence Hernán Sinisterra en el 2014; y Juan Diego Flórez, ex secretario de vivienda de Guerrero de la cuerda de Pérez.

La pelea dentro de Cambio

Sin embargo, si su plan se concreta, Pérez entraría a competir por los votos en el Valle con Motoa.

En las elecciones de 2015 las dos antiguas fórmulas se ditanciaron cuando, en contra de Motoa, Pérez apoyó a Armitage y a Dilian Francisca Toro a la Gobernación. Motoa, quien se fue con Roberto “El Chontico” Ortíz a la Alcaldía, logró que Cambio no avalara a Dilian, como quería Pérez, y sus relaciones se rompieron.

En ambos casos ganó Pérez y por eso si Vargas se la juega por él le está dando más juego a alguien que lo puede acercar al Alcalde y la Gobernadora, una ventaja que puede ser muy útil en las presidenciales.

El problema es que el éxito del Representante se ha traducido en más votos pero no necesariamente en más representación para su partidos, y eso ha llevado a críticas de sus copartidarios.

“Pérez no sabe trabajar en equipo”, dijo una fuente política del Valle.

El ejemplo que pone es la elección a la Asamblea en octubre del año pasado. Allí, cada uno de los tres congresistas de Cambio en el Valle (además de Pérez y Motoa, está el representante Carlos Abraham Jiménez, del grupo político del senador Juan Carlos Restrepo) puso al menos un candidato, en un intento por conservar los tres diputados que tenía el partido desde 2008.

Pero, aunque el partido sacó la segunda votación más alta (encabezada por la diputada de Pérez, Mariluz Zuluaga) perdió la curul en la que aspiraba a repetir Adriana Gómez, candidata de Jiménez.

“Eso no es crecer”, dijo la fuente. Del lado de Pérez la respuesta es que sí es crecer y que lo que pasa es que los otros grupos no trabajaron bien o no tuvieron suerte.

En todo caso, con Pérez aspirando al Senado o a poner senador propio, quien podría perder es Motoa. Para seis fuentes diversas, aunque el hoy senador tiene votos fuera del Valle y Pérez no, la aspiración del representante podría quitarle tantos votos en el departamento que podría quemarse.

Por eso Motoa no se está quedando quieto y en los últimos meses logró sumar a su equipo político a Roberto “el Chontico” Ortíz, que aspiró por el Partido Liberal, y perdió contra Armitage por 88 mil votos.

Motoa ya logró que Vargas invitara al Chontico a subirse a la tarima de las entregas de viviendas en el Valle en tres oportunidades, una ocasión en la que el Vicepresidente tiende lazos con políticos locales con miras a las presidenciales, como ha contado La Silla.

Sin embargo, el plan del Chontico no es llegar a la Cámara como fórmula de Motoa, sino volver a aspirar a la Alcaldía en el 2019. Por eso, ni ha cerrado su sede de campaña en Cali ni ha dejado de hacer campaña, no sólo con Vargas sino entregando propaganda política en las calles.

El factor Dilian

Encima de esas peleas internas de Cambio, todo apunta a que la verdadera competencia es el enorme poder que ha acumulado la Gobernadora, Dilian Francisca Toro. Aunque dos fuentes cercanas a Vargas hablan de acercamientos del vicepresidente, ella todavía está lejos de querer acompañar su aspiración a la presidencia, según le dijeron a La Silla un político de su grupo y una persona cercana a la Gobernadora.

“Por ahora, no existe posibilidad que Dilian se vaya con Vargas. Ella está más cercana hoy de apoyar un candidato que le de continuismo al gobierno de Santos, que no es Vargas Lleras”, dijo una de las fuentes.

Como ha contado La Silla, Dilian tiene una bancada propia en el Congreso (un senador y tres representantes a la Cámara) y en marzo del 2018 le va a apuntar a crecer con otra curul en el Senado y una más en Cámara. Tan es así, que ya suenan los candidatos: al Senado irá el ex alcalde de Palmira, José Ritter López, y a la Cámara su actual secretaria general, Norma Hurtado.

Es probable que logre su objetivo, porque al poder que tenía en 2014 y que le alcanzó para sus cuatro congresisas le suma ahora la Gobernación, Coldeportes nacional (en cabeza de su ahijada política, Clara Luz Roldán), 11 alcaldías en el Valle e injerencia en varias entidades descentralizadas como Indervalle, Vallecaucana de Aguas y el Hospital Universitario.

Eso dejará sacaría del juego cuatro de las 13 curules a la Cámara del Valle, lo que deja menos espacio para que crezca Cambio. Y eso podría afectar el plan de Vargas.

Y lo podría golpear aún más que Dilian se apoye a otra campaña a la presidencia, pues eso dejaría a la maquinaria más grande del departamento lejos de Vargas y haría más difícil que el hoy vicepresidente apareciera como el caballo ganador para los políticos del Valle.

Así que todavía falta ver cómo se mueven las fichas del Vicepresidente hasta que arranque en forma la campaña al 2018, después de que él renuncie y pueda hacer política todavía más de frente de lo ha estado haciendo hasta ahora. Pero lo que ya está claro es que en el Valle, como en muchos otros departamentos, Cambio Radical se la va a jugar por crecer en maquinaria en las legislativas para apalancar las presidenciales.

 

Nota de la editora:

El miércoles 21 de diciembre corregimos la información sobre una de los cargos que apadrina el representante Pérez en la Alcaldía de Cali, el ex secretario de vivienda, Juan Carlos Minotta, que ya no trabaja más en esa Alcaldía. Ofrecemos excusas por ese error. 

Compartir
0