Movieron sus influencias en Casa de Nariño y se reconciliaron, la semana pasada en una reunión privada, con el Gobernador, pero nada les ha alcanzado a los ñoños de Córdoba para tumbar la aspiración de su principal rival a la Gobernación de ese departamento.
Los ñoños no logran tumbar a su rival
Movieron sus influencias en Casa de Nariño y se reconciliaron, la semana pasada en una reunión privada, con el Gobernador, pero nada les ha alcanzado a los ñoños de Córdoba para tumbar la aspiración de su principal rival a la Gobernación de ese departamento.
Ayer en un trino, el exsecretario Carlos Gómez Espitia anunció después de dos semanas de silencio que se inscribirá este viernes para ese cargo con el aval que le dio Cambio Radical. Eso a pesar de que los ñoños (los senadores Musa Besaile y Bernardo ‘Ñoño’ Elías de La U) se movieron para quitarle su principal respaldo: el grupo del gobernador Alejandro Lyons.
Como lo ha contado La Silla, Musa, Ñoño y el Gobernador eran un solo grupo en el Partido de La U. El Gobernador, sin embargo, decidió crear su propio movimiento el año pasado y cocinó la aspiración de Gómez para competirle a la carta de los ñoños: el arquitecto Edwin Besaile, avalado por La U y hermano de Musa.
Después de que los ñoños se quejaran en Palacio de la reventada de La U en su departamento, el Gobernador empezó a acercarse a ellos, pero no era claro si iba a haber reconciliación entre los otrora aliados.
Es obvio que a los ñoños no les conviene tener un rival fuerte porque eso les encarece la campaña y los pone a sudar.
La Silla confirmó que el miércoles de la semana pasada en Montería, esos dos legisladores se reunieron a puerta cerrada con Lyons. En el encuentro, el mandatario les aseguró que desistiría de apoyar a Gómez.
La conversación duró de 7 a 11 de la noche y se dio en presencia del senador de La U (del grupo de la exsenadora investigada por parapolítica Zulema Jattin, afín a Lyons) Martín Morales y de dos asesores del Gobernador.
El camino parecía despejado para los ñoños, hasta ayer que Gómez advirtió que les dará la pelea.
Aunque ya no cuenta con los recursos económicos y la estructura de Lyons, el candidato le apostará a una campaña cívica y al voto de opinión para enfrentar la máquina de la ñoñomanía, como casi nunca se ha visto en Córdoba.
De hecho, en una entrevista ayer en el periódico local el Meridiano, advirtió a sus rivales que aunque ellos tienen la plata, él cuenta con las ideas para buscar sus votos.
En esta empresa, lo acompañará hasta el final el vargasllerismo que lo avaló, y que lograría sacarla del estadio si le gana la Gobernación a los poderosos ñoños. En el fondo, sería el triunfo del vicepresidente Germán Vargas Lleras sobre el santismo.