La nueva Gallup muestra que se acabó el ‘efecto pandemia’

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El covid pasó a segundo plano y cayeron la favorabilidad de Duque y de varias instituciones. Lo más grave es el descrédito sufrido por la Fuerza Pública, el Mindefensa y la Policía.

La encuesta Gallup, que cada dos meses mide el estado de ánimo de los colombianos frente a lo que ocurre en el país, salió ayer en la noche. Fue realizada entre el 16 y el 26 de octubre por lo que muestra las reacciones a los casos de abuso policial y las protestas de septiembre, y el fin del aislamiento obligatorio. Revela un país en el que “el efecto covid” ya pasó, y en el que la desconfianza a pilares claves de la sociedad como la Fuerza Pública se agudiza y aumenta la percepción de que Colombia se acerca a la posibilidad de llegar un día a ser como Venezuela.

Estas son las principales conclusiones:

1

Mejora la economía pero la reactivación no impacta otras percepciones

Aunque el porcentaje de personas que creen que la economía va mejorando subió 12 puntos desde que llegó el coronavirus a Colombia y empezó la crisis económica, todavía la mayoría piensa que la economía en el país va empeorando (76 por ciento).

Esto contrasta con el hecho de que, desde que empezó la reactivación económica tras la cuarentena, la economía ha mejorado. Por ejemplo, según el más reciente dato del índice de seguimiento a la economía publicado del Dane muestra una desaceleración de la caída en junio, julio y agosto, comparado a marzo, abril y mayo.

El desempleo también ha mejorado desde que empezó la reapertura. Desde mayo, cuando tuvimos la peor cifra en la historia (21,4 por ciento), ha bajado a 16,8 por ciento.

Aun así la percepción sobre el desempleo —aunque bajó un poco– se mantiene en un nivel muy alto (86 por ciento), comparado con cómo era antes de la pandemia. También ha aumentado la gente que cree que el cubrimiento en salud, la asistencia a la niñez y el medio ambiente han empeorado.

 

 
2

El coronavirus ya se naturalizó

En plena pandemia, y cuando nos estamos acercando a un nuevo pico, el porcentaje de personas que piensan que el coronavirus es el principal problema que enfrenta el país raya en el margen de error.

Esto, a pesar de que el porcentaje de personas que creen que contraerán el virus en los próximos meses se ha mantenido desde abril y que la mitad de los encuestados se ha visto afectado por la pandemia.

También ha caído, de 64 a 48 puntos, el número personas que creen que lo peor está por venir, aunque de agosto a octubre este número subió siete puntos. Esto tal vez tiene que ver con las noticias que han llegado de Europa en donde, con la segunda ola, en algunos países, como España y Francia, se dispararon los contagios y volvió la cuarentena.

 

 
3

Se acaba el efecto pandemia de Duque.

Durante el periodo de medición de la encuesta ocurrió el asesinato de Javier Ordóñez, las protestas del nueve septiembre y los 13 muertos por disparos de la Policía, y su ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, tuvo que enfrentar dos debates de moción de censura en el Congreso. Pero también bajó el desempleo y se dio de baja a un jefe importante del Eln.

En reacción a todo lo anterior, la aprobación a la gestión del Presidente cayó siete puntos y su desaprobación llegó al 61 por ciento, con lo que se va acercando a los niveles que tenía antes de la pandemia. Como en otros aspectos, el ‘efecto pandemia’ ya no beneficia a Duque.

 

 
4

Uribe libre, regresa al negativo

La recolección de los datos de esta encuesta se empezó a hacer una semana después de que una jueza tumbara la medida de aseguramiento que le ordenó la Corte Suprema en agosto. Por eso, los resultados muestran los efectos que tuvo su libertad.

Lo que revela la medición es que, desde que recuperó su libertad, la desfavorabilidad del Expresidente subió ocho puntos con respecto a agosto que fue cuando empezó su detención y cuando, como contamos, su favorabilidad había mejorado.

Ahora que está libre y preparando el camino de su partido para las elecciones del 2022 su desaprobación está en 61 por ciento, cinco puntos menos que la más alta que ha tenido en la historia en diciembre del año pasado.

 

 
5

Las Fuerzas Militares se vuelven un factor para la polarización

Una de los cambios más grandes que refleja esta encuesta es que por primera vez en 15 años, hay tanta gente con una imagen favorable como desfavorable de las Fuerzas Militares, una institución que hasta abril había gozado de los niveles más altos de favorabilidad. Esto se da tras los casos de abuso que ha habido tanto en la policía como en el Ejército en los últimos meses y que han hecho que, por primera vez, la actuación de las Fuerzas Militares se convierta en un factor divisivo entre entre quienes critican abusos de la Fuerza Pública y quienes los defienden a toda costa.

La Policía, que ha estado bajo el ojo del huracán por los casos de abuso y por su reacción a las protestas del 9 de septiembre, también llegó a su peor histórico. Su desfavorabilidad está en 64 por ciento. Y el Ministro de Defensa, Carlos Holmes, que se esmeró por defenderlas cayó diez puntos.

 

 
6

Los presidenciales, entre más hablan, peor les va

De los que suenan como posibles candidatos para 2022 los que mayor favorabilidad tienen son Humberto De la Calle y Juan Manuel Galán, que no tienen los reflectores puestos encima como sí los tienen Sergio Fajardo, Gustavo Petro, Jorge Enrique Robledo, Marta Lucía Ramírez, Álex Char, Federico Gutiérrez y Carlos Holmes Trujillo.

El Ministro de Defensa en esta última medición, que ha tenido un gran protagonismo dados los debates de moción de censura en su contra y el deterioro de la seguridad en el país, tiene la desfavorabilidad más alta desde que es medido, con lo cual el 'Manual Trumpiano' que ha asumido el Gobierno para el manejo de las protestas por parte de la Fuerza Pública por ahora no le ha dado frutos políticos.

Fajardo, por su lado, enfrenta una caída en picada de su favorabilidad desde la campaña del 2018. Pasó de 67 por ciento en ese entonces a 39 en esta nueva medición, que ya cubre su mayor actividad de campaña.

Robledo, Ramírez y Gutiérrez se mantienen en los niveles que han tenido en los últimos meses.

 

 
7

A De la Calle le queda más difícil la jubilación

De todas las figuras por las que pregunta la encuesta, el Exjefe negociador en La Habana es quien tiene la favorabilidad más alta: 49 por ciento. Esto ocurre en momentos en que el Partido Liberal del que hace parte busca un candidato propio para 2022. Como contamos, algunos congresistas del partido lo consideran como una posible carta para esas elecciones, a pesar de que ya había anunciado su retiro de la política electoral tras su debacle en 2018.

Al otro que le fue bien fue a Petro, cuya favorabilidad subió cinco puntos con respecto a las últimas cinco mediciones. Pero su desfavorabilidad se mantiene cerca del 50 por ciento.

 

 
8

Las redes pierden su impulso, pero los medios están en su peor momento

Las redes sociales, que en abril habían logrado una favorabilidad del 61 por ciento, en esta medición cayeron a 44. En estos dos meses desde la última medición, que incluyen los meses de las protestas y de los abusos policiales que se hicieron virales en redes sociales, su imagen favorable cayó nueve puntos.

A los medios de comunicación les va peor. Su desfavorabilidad del 58 por ciento es la peor en la historia y ha venido en aumento desde que llegó el covid, a pesar de que el tráfico de los medios se disparó durante la pandemia (¿o precisamente por eso?). De acentuarse esta tendencia, podría poner cuesta arriba la estrategia de suscripción paga por contenidos digitales que ya tienen los medios más grandes del país, y en todo caso, plantea un debate a fondo entre nosotros los periodistas sobre esta pérdida de confianza justo cuando más se necesita información de calidad.

 

 
9

A los alcaldes les va mejor que al Gobierno Nacional

Los alcaldes de las cinco principales ciudades del país tienen una mayor favorabilidad que el Presidente y la Vicepresidenta: todos están por encima del 50 por ciento. Los verdes Claudia López (Bogotá), Jorge Iván Ospina (Cali) y Juan Carlos Cárdenas (Bucaramanga) mantienen su favorabilidad. Daniel Quintero (Medellín) ha caído desde junio y Jaime Pumarejo (Barranquilla) recuperó sus niveles de favorabilidad precovid, tras la caída histórica que tuvo en en junio (en pleno pico de covid en la ciudad) y que fue la desfavorabilidad más alta de un alcalde en Barranquilla en siete años.

 

 
10

Las polémicas y los escándalos golpean la credibilidad

La Fiscalía alcanzó su peor desfavorabilidad en estos 20 años desde que la Gallup la mide. Ni siquiera luego del escándalo de la muerte de Jorge Pizano y sus revelaciones en el caso Odebrecht, había llegado a un 67 por ciento. En estos dos meses, la Fiscalía de Francisco Barbosa ha tenido que enfrentar escándalos como el intento de imputación de cargos a la funcionaria que denunció la censura en Rtvc y la renuncia de varios miembros de la cúpula del Fiscal . En septiembre, también asumió el caso del expresidente Álvaro Uribe, cuya desfavorabilidad también subió en este tiempo.

La Policía, llegó a su peor momento en 15 años. Y la Corte Suprema, que había tenido una mejora en agosto tras la detención de Uribe, cayó nueve puntos en estos dos meses, luego de que el caso pasara a la Fiscalía.

 

 
11

Ñapa: El castrochavismo, ¿una profecía autocumplida?

El miedo al castrochavismo, que el uribismo viene impulsando desde la campaña del Plebiscito, llegó, por segunda vez, a lo que es su tope histórico: 57 por ciento. Así, más de la mitad de los encuestados creen que Colombia se podría convertir en Venezuela.

Estos resultados vienen acompañados de un toque de xenofobia, pues el 69 por ciento tiene una imagen desfavorable de los venezolanos que llegan al país y el 72 por ciento cree que, después de la pandemia, las fronteras deben permanecer cerradas para que no puedan entrar más inmigrantes de Venezuela.

Esta sensación, acompañada de la creciente desconfianza en las instituciones y en la Fuerza Pública, con el aumento del “otros” como principal factor de preocupación de los colombianos va revelando un caldo de cultivo que seguramente será explotado electoralmente para el 2022.

 

 
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