Adriana Gutiérrez Jaramillo

Adriana Gutiérrez Jaramillo ex senadora y política caldense.

Nacida en Manizales en 1959, esta administradora de empresas de la Universidad Nacional arrancó su carrera en el sector privado donde, entre otras, ha estado en las juntas de la constructora Coinsa, el concesionario Colautos y la productora de espárragos Erupción S.A.

A la política llegó de la mano de su primer esposo Fortunato Gaviria Botero, quien fue viceministro de educación y gobernador de Caldas en el gobierno de Virgilio Barco. Ambos lideraron la campaña en ese departamento de César Gaviria, primo hermano de Fortunato, mientras los barones liberales caldenses como Víctor Renán Barco y Luis Guillermo Giraldo apoyaban a Hernando Durán Dussán.

En 1991, tras el secuestro y asesinato de su esposo, Gutiérrez se lanzó como candidata a la Gobernación de Caldas, en las primeras elecciones populares y con el apoyo del ex ministro conservador Rodrigo Marín Bernal. Terminó perdiendo por 13 mil votos con la conservadora Pilar Villegas de Hoyos, a quien apoyaba la coalición yepobarquista -de los caciques Víctor Renán Barco y el conservador Ómar Yepes- que dominó la política caldense durante tres décadas.

Tras esa derrota Gaviria la nombró cónsul en Barcelona durante dos años. Al volver a Manizales fue nombrada presidenta del Comité Intergremial de Caldas, una influyente coalición empresarial. Gracias a esos cargos estuvo una vez, entre 2001 y 2002, en la junta de Acopi, el gremio de los pequeños empresarios e industriales.

Mientras tanto siguió vinculada a varias campañas: en 1998 fue una de las directivas de la campaña cívico empresarial que llevó a Germán Cardona por segunda vez a la alcaldía de Manizales, tras derrotar al candidato yepobarquista, Arturo Yepes. Y en 2001 estuvo en la campaña fallida de su aliado político Luis Alfonso Hoyos a la gobernación.

Cuando el ex gobernador antioqueño Álvaro Uribe lanzó su candidatura presidencial en 2001, Gutiérrez fue uno de sus tempranos apoyos y le ayudó a organizar la campaña en Caldas. Cuando Hoyos fue destituido como senador en 2001, su sucesor Óscar Iván Zuluaga le propuso ser su fórmula a la Cámara de Representantes. Incluso, un primo de Zuluaga -Carlos Arturo Zuluaga, luego presidente de la siderúrgica Acesco- fue el tercer renglón de su lista.

Gutiérrez ganó la curul con 75 mil votos y se convirtió en una fiel defensora del Gobierno en el Congreso. Con otros políticos uribistas de la época, como Zuluaga, Alfonso Valdivieso y Rafael Pardo, fundó el Nuevo Partido en 2003, lideró la idea de crear un megapartido uribista y fue una de las primeros integrantes del Partido de La U, a donde llegó la mayoría de integrantes del Nuevo Partido.

En 2006 Zuluaga prefirió no lanzarse al Senado para obtener un cargo en el alto gobierno y Gutiérrez dio el salto, saliendo elegida con 64 mil votos. En enero de 2009 renunció a su curul en el Congreso cuando la Corte Suprema de Justicia le abrió una investigación por parapolítica (que terminaría cerrando en 2011), tras aparecer en una foto con Maribel Galvis, una concejal de La Dorada aliada con el Bloque del Magdalena Medio de 'Ramón Isaza' y que terminaría convirtiéndose en la primera mujer postulada a Justicia y Paz.

Aunque Gutiérrez dejó la política activa, no se mantuvo alejada. En 2011 fue la gerenta de la campaña del después ministro de Ambiente Gabriel Vallejo a la Gobernación de Caldas, que terminó perdiendo con Guido Echeverri.

Después de que se anulara la elección de Echeverri por una inhabilidad, la ex senadora fue una de las impulsoras de la candidatura por La U de su primo Julián Gutiérrez, un político de origen liberal que había sido concejal y alcalde designado de Manizales. Gutiérrez terminó ganando la elección, con apoyo del grupo político de los Zuluaga y el del conservador Luis Emilio Sierra.

Tras el distanciamiento del uribismo del gobierno Santos, Gutiérrez se convirtió, en Caldas, en la coordinadora del Centro Democrático y de la campaña presidencial de su aliado Óscar Iván Zuluaga.

Aunque sonó como posible candidata del uribismo a la Gobernación para las elecciones de 2015, terminó optando por lanzarse a la Alcaldía de Manizales, especialmente fuerte para el uribismo por ser la capital de su departamento. El candidato a vencer era Luis Roberto Rivas, quien representando al santismo, contaba con el apoyo de La U y de Cambio Radical.

Pero después de una campaña apretada, el ganador fue un tercero:  José Octavio Cardona León, avalado por los liberales y por Opción Ciudadana, y quien consiguió el 29 por ciento de los votos. En el segundo lugar quedó Rivas con el 26 por ciento y luego Gutiérrez a un punto de él.