Horacio Serpa Uribe fue un político liberal santandereano que se lanzó a la Presidencia, sin éxito, en tres ocasiones. Murió el 31 de octubre de 2020
Nació en Bucaramanga, Santander, el 4 de enero de 1943. Estudió en el Colegio Santander de Bucaramanga donde conoció al ex Fiscal Alfonso Valdivieso; a Alejandro Galvis, miembro de la familia dueña del periódico santandereano Vanguardia Liberal; y a Alberto Montoya Puyana, el actual rector de la Universidad Autónoma de Bucaramanga. Serpa luego se graduó como abogado de la Universidad del Atlántico.
Allí se hizo amigo del ex gobernador del Atlántico, el también liberal y samperista Eduardo Verano de la Rosa.
Entre 1966 y 1970, Serpa se desempeñó en varios cargos en la rama judicial de su departamento. Comenzó haciendo su judicatura rural en Tona, Santander, como Juez Promiscuo Municipal. Luego fue Juez Civil Municipal de Barrancabermeja, Juez Penal Municipal de San Vicente de Chucurí, Juez Penal del Circuito de Barrancabermeja, Investigador Criminal del Departamento y Juez Superior de Barrancabermeja.
En los años 60, durante su tiempo como Juez en Chucurí, ingresó al Movimiento Revolucionario Liberal, MRL, liderado por el liberal Alfonso López Michelsen, que se oponía al Frente Nacional y que era fuerte en la zona debido a la influencia de Alfonso Gómez Gómez, uno de los patriarcas santandereanos del movimiento.
En 1967, cuando López Michelsen fue nombrado Gobernador del nuevo departamento del Cesar por el entonces Presidente Carlos Lleras Restrepo, el MRL se disolvió y una de sus facciones se unió al ELN y la otra al oficialismo del Partido Liberal. Serpa estuvo entre los segundos.
Gómez Gómez se convirtió en el primer padrino político de Serpa: cuando fue Gobernador de Santander, entre 1969 y 1970, nombró a Serpa como Alcalde de Barrancabermeja. Allí, tuvo que lidiar con las varias fuerzas que se movían en la región, pues la ANAPO y el MOIR tenían bastante fuerza en la región y, además, la presencia del ELN era una constante.
En 1971 Serpa se lanzó a la política electoral y llegó al Concejo de Barrancabermeja por el Partido Liberal. Compartió su puesto en el cabildo con 11 Concejales de la ANAPO. En 1974 llegó al Congreso en reemplazo de Rogelio Ayala, y ocupó una curul en la Cámara por el Partido Liberal.
Cuando llegó al Congreso, Serpa creó su propio movimiento, el Frente de Izquierda Liberal Auténtico, FILA, junto a Mario Olarte, Rafael Fernández y Arístides Andrade. Con el FILA, Serpa se convirtió en uno de los caciques más importantes de Santander y en buena parte de la región del Magdalena Medio se convirtió en la máxima autoridad. Sin embargo, nunca pudo hacer crecer ese poder y se quedó con un caudal fuerte, pero limitado a su región.
Serpa se quedó con su curul en Cámara cuando fue elegido por el mismo partido en 1978. Durante ese tiempo le hizo campaña a López Michelsen a la Presidencia. Por eso, en 1981, conoció al ex presidente Ernesto Samper, que también estaba en la campaña, de quien se hizo buen amigo y aliado. Serpa le ofreció su caudal regional para ayudar a su movimiento, el Poder Popular, que había nacido en ese año en Bogotá. Gracias a ese apoyo, Samper logró llegar al Directorio Liberal.
Después, Serpa fue reelegido en 1982, cuando fue Presidente de la Comisión de Acusaciones. Para la legislatura siguiente, en 1986, llegó al Senado, también por el Partido Liberal.
Pero renunció a su curul en 1988 pues fue nombrado Procurador ese año, como reemplazo del asesinado Carlos Mauro Hoyos. En ese cargo tuvo que enfrentar la escalada de la violencia del narcotráfico y de las guerrillas en ascenso a finales de los 80 y, en particular, se tuvo que ocupar del secuestro de Álvaro Gómez Hurtado por parte del M-19 y de la masacre de La Rochela en Santander.
En 1990 renunció cuando el entonces presidente Virgilio Barco lo nombró brevemente como su Ministro de Gobierno. Ese mismo año se convirtió en el jefe político de Samper cuando éste fue precandidato liberal a la Presidencia, pero perdió la candidatura contra César Gaviria, quien terminó llegando a la Casa de Nariño.
En 1990, Serpa fue reelegido al Senado, pero renunció en 1991, cuando se lanzó y fue elegido a la Asamblea Nacional Constituyente, junto a Verano de la Rosa y a Guillermo Perry, por la lista de Samper dentro del Partido Liberal. Serpa fue nombrado Copresidente de la Asamblea, pues la suya fue la lista liberal la más votada.
Un año después Gaviria lo designó como negociador de paz en los diálogos con el EPL y otras guerrillas en Tlaxcala, México, que terminaron fracasando. Y en 1993 volvió a una nueva campaña a la Presidencia de Ernesto Samper, esta vez como su Jefe de Debate. En 1994 Samper ganó la Presidencia y tomó posesión del cargo. Inmediatamente nombró a Serpa como su Ministro de Gobierno. Serpa modificó varias de las responsabilidades de esa cartera y transformó el Ministerio en el Ministerio del Interior.
En junio de 1994, el contrincante de Samper en las elecciones presidenciales, Andrés Pastrana, le entregó a César Gaviria unas grabaciones que serían conocidas como "narcocasetes" en las que el periodista Alberto Giraldo hablaba con Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela sobre los dineros que dio el Cartel de Cali para apoyar la candidatura de Samper. Gaviria le dio las grabaciones al entonces fiscal Gustavo de Greiff, pero las cintas sólo se conocieron un año después cuando el nuevo fiscal, Alfonso Valdivieso, decidió hacerlas públicas. Así comenzó el llamado "Proceso 8.000".
Serpa se convirtió en uno de los más acérrimos defensores de Samper, manteniendo siempre que el Presidente nunca se enteró que dineros del narcotráfico habían infiltrado la campaña, en la que él había sido uno de los directivos. A pesar de que algunos funcionarios fueron condenados por este escándalo, en 1996 Serpa logró convencer a la bancada liberal en el Congreso para que la Cámara no acusara a Samper ante el Senado. La plenaria terminó precluyendo el proceso contra el entonces Presidente por 111 votos contra 43, y la Fiscalía absolvió en primera instancia a Serpa de cualquier responsabilidad en el Proceso 8.000.
En 1997 Serpa renunció al Ministerio para poder lanzarse a la Presidencia. Le ganó la candidatura del Partido Liberal a Alfonso Valdivieso en una consulta interna y comenzó una campaña como el sucesor de Samper. Por ese legado del Proceso 8.000 que arrastraba Serpa, Valdivieso y otros liberales terminaron adhiriendo a la campaña conservadora de Andrés Pastrana. Además, Serpa tuvo que lidiar con un bloque conformado por académicos y periodistas denominado "TOCONSERPA" (Todos Contra Serpa) que se oponía a su candidatura.
Aun así, en 1998 Serpa logró ganar la primera vuelta, aunque por pocos votos, no muchos más que 40.000. Pero perdió la segunda vuelta contra Pastrana. Entonces se dedicó a hacerle oposición al Gobierno y a promover una Constituyente Liberal que renovaría los estatutos del Partido.
Desde 2000 anunció que sería candidato nuevamente a la presidencia. Serpa encabezaba las encuestas para las elecciones de 2002, pero Álvaro Uribe, que se había lanzado como candidato liberal disidente, se convirtió en un fenómeno y arrasó con las elecciones en primera vuelta. Serpa, que quedó en segundo lugar, entonces anunció que no se volvería a lanzar a la Presidencia.
En 2002, el entonces Presidente Uribe nombró a Serpa como Embajador ante la OEA. Serpa estuvo en el cargo hasta 2004, cuando decidió renunciar para volver al país a buscar una nueva candidatura a la Presidencia, ante el proyecto de reelección presidencial inmediata que estaba cursando en el Congreso.
En 2005, Serpa fue el primer colombiano elegido como Vicepresidente de la Internacional Socialista. Ese año también apoyó la elección de César Gaviria como Director del Partido Liberal, en lo que parecía ser una reunificación liberal para oponerse a la reelección.
Un año después Serpa ganó holgadamente la consulta liberal, en la que se enfrentó a Rafael Pardo, Andrés González y Rodrigo Rivera, y se convirtió, nuevamente, en el candidato del partido a la Presidencia. Pero las elecciones de ese año las ganó una vez más Uribe en primera vuelta y esta vez Serpa quedó en tercer lugar, detrás de Carlos Gaviria del Polo, ya que la campaña se polarizó entre el presidente-candidato y su opositor más caracterizado. Ese fue un duro golpe para Serpa y para el Partido Liberal, que por primera vez en más de un siglo y medio no quedó entre los dos primeros en una elección presidencial en la que tuvo candidato propio.
En 2007 varios sectores políticos de Santander, incluidos dirigentes liberales, conservadores y del Partido de la U, se unieron para respaldar una campaña de Serpa a la Gobernación del Departamento. En las elecciones se enfrentó con Didier Tavera, la ficha de Convergencia Ciudadana, el cuestionado partido del entonces Gobernador, Hugo Aguilar.
Serpa logró reunir gran parte de la oposición a Aguilar y ganó las elecciones. Se posesionó como Gobernador en 2008 y ocupó el cargo hasta 2012, cuando fue reemplazado por Richard Aguilar, hijo del ex gobernador Hugo Aguilar, quien venció al candidato liberal Luis Fernando Cote Peña, a quien apoyaba Serpa.
Por otra parte, su hijo Horacio José Serpa, resultó elegido al Concejo de Bogotá para el período 2012-2015, también por el Partido Liberal.
A finales de 2011, Serpa fue llamado como testigo en la investigación contra Ernesto Samper por su presunta responsabilidad en el magnicidio del político conservador Álvaro Gómez Hurtado. En efecto, el narcotraficante extraditado Hernando Gómez Bustamante, alias 'Rasguño', los acusó a ambos de haber instigado el asesinato. Y en enero de 2012 la Contraloría abrió una investigación contra Serpa por un posible detrimento patrimonial de 50 contratos que fueron firmados al final de su mandato como gobernador sin contar con el acta de inicio.
En las elecciones legislativas de 2014 Horacio Serpa sacó la mayor votación –casi 130 mil votos- del Partido Liberal. Durante este periodo legislativo defendió el acuerdo de paz en el Congreso y al ex presidente Juan Manuel Santos en diferentes ocasiones como el caso Odebrecht.
En la consulta Liberal de 2017, con la cual se decidió quién sería el candidato único por el partido en las elecciones presidenciales de 2018, respaldó a Juan Fernando Cristo. Respaldo que fue en vano debido al triunfo de Humberto de la Calle y al fracaso de la consulta en términos de participación, en la que solo votaron 744.521 personas.
Su aspiración de lanzarse al Senado nuevamente para las elecciones de 2018 quedó truncada debido a que César Gaviria, jefe del Partido Liberal, no lo puso a encabezar la lista, decisión con la que Serpa no estuvo de acuerdo y por la que no aspiró.
Serpa apoyó entonces a su hijo, Horacio José Serpa, quien renunció a su curul en el Concejo de Bogotá para lanzarse al Senado en remplazo de su padre. Fue elegido con 91.407 votos.